Así estarán los personajes de Star Wars: Los últimos jedi al comienzo de la historia

La revista Entertainment Weekly ha lanzado una serie de artículos relacionados con la próxima entrega de la franquia, Star Wars: Los últimos jedi, dirigida por Rian Johnson (Looper, Brick) y que saldrá en cines el próximo 15 de diciembre.

Los artículos nos sitúan básicamente en cómo y dónde estarán los personajes durante el inicio de esta octava entrega, empezando por Luke (Mark Hamill) y Rey (Daisy Ridley… recordamos que el final de El despertar de la Fuerza nos dejó con estos dos recién encontrándose en el planeta Ahch-To y la continuación la sigue tan solo unos minutos después). Al parecer, nuestro ya no tan joven Skywalker no estará muy emocionado de ver a la muchacha y a su sable láser, dejándola inicialmente de lado, ya que prefiere seguir con sus cosas. En palabras de Hamill, Luke ya no es el joven optimista de antaño y piensa que quizás ha estado malinterpretando a la Fuerza durante todos estos años:

«(Luke) cometió el enorme error de creer que su sobrino era el elegido, por lo que invirtió todo lo que tenía en Kylo, similar a como Obi-Wan había hecho con mi personaje. Y él es traicionado, con trágicas consecuencias. Luke se siente responsable de eso, siendo el primer obstáculo que él tiene para volver a unirse al mundo y a la jerarquía jedi, ¿sabes? Es esa culpa, ese sentimiento de que es su culpa, que no había detectado la oscuridad en él hasta que ya era tarde».

La llegada de Rey podría dar la vuelta a las cosas, a pesar del rechazo inicial, que hará mella en su pasado de abandono (Rey fue dejada sola por unos padres desconocidos en Jakku). Más aún cuando todos los nuevos personajes que había ido conociendo en El despertar de la Fuerza la habían recibido con los brazos abiertos, especialmente Han, creando un contraste absoluto con «el gruñón» Luke. No obstante, Rey es una joven bastante esperanzadora, e intentará que Skywalker acuda en ayuda de la galaxia, que lo necesita.

Luke y Rey no estarán solos en Ahch-To, ya que los acompañarán una serie de nuevas especies con formas de «mini pingüinos», denominados «porgs», por un lado, y otros que se asimilan a unas tortugas disfrazadas de monjas (no es casual), conocidas como «las cuidadoras». Y Chewbacca, por supuesto.

Los porgs son nativos del planeta al que va a parar Luke y en donde se encuentra el primer templo jedi, que a su vez se encargan de custodiar «las cuidadoras» desde hace miles de años. Éstas últimas pueden comunicarse con Luke a través de lo que Johnson ha descrito como «una especie de habla escocesa en pez», pero no se encuentran especialmente emocionadas con que el jedi esté en la isla, simplemente «toleran» su presencia.

En Ahch-To hallaremos también unas pinturas rupestres relacionadas con la mitología y el pasado de los jedi, asegurando Johnson que la película abarcará esos temas, aunque no pretende fundar una nueva religión ni nada por el estilo.

De Ahch-To a la rebelión

En El despertar de la Fuerza también conocimos a Finn, interpretado por John Boyega. Al final de la anterior entrega, este personaje había quedado seriamente herido por Kylo Ren, dejándolo en coma. Cuando al fin despierta, en Los últimos jedi, Finn sigue teniendo esas ganas de salir huyendo de la Primera Orden, al igual que antaño. La muerte de Han a manos de su hijo y la lucha contra éste último solo ha conseguido aterrorizarlo aún más.

Sin embargo, esto empieza a cambiar cuando se topa con Rose Tico (nuevo personaje interpretado por Kelly Marie Tran), del servicio de mantenimiento. La muchacha piensa que él es un héroe por haber participado en la destrucción de la base Starkiller. Así lo describe Boyega:

«Él es un héroe para gente como Rose, que luchan junto a la Resistencia porque la Primera Orden ha destruido sus hogares».

Por el otro lado, Rose es una «don nadie», no solo frente a Finn, sino incluso al lado de su hermana mayor, Paige (Veronica Ngo), una francotiradora que lucha junto a Poe Dameron (Oscar Isaac). Esto empezará a cambiar tras el fortuito encuentro con el que era soldado imperial, que también empezará a hacer mella en Finn, quien ante la visión de esta chica de que él es un chico valiente y comprometido con la causa, intentará esforzarse más, aunque la idea de fugarse no desaparecerá del todo. De alguna forma, ambos terminan en Canto Bight, un nuevo planeta que vendría a ser un «Las Vegas con alienígenas».

En la Resistencia tenemos a otros dos personajes esenciales: Leia y Poe. La hermana de Luke, acostumbrada desde el comienzo de la historia a la pérdida (sin duda es la más fuerte de los Skywalker), no cesa en la lucha por la libertad de la galaxia. Sin embargo, la Resistencia se encuentra dividida tras la destrucción de la República, dejándola en un puesto muy vulnerable. A ello se le une la pérdida sufrida por Leia tras la muerte de Han a manos de su hijo.

Sin embargo, la líder de la Resistencia siempre encuentra esperanza, y parece que esta vez la hallará en Poe Dameron, cuya relación no es meramente profesional, sino familiar. Leia además sabe que no estará ahí para siempre y piensa en quién dejar el legado, viendo en Poe al candidato perfecto. Por eso, quiere que éste no se conforme con ser un piloto, sino también una persona sabia y sensata. Isaac lo describe del siguiente modo:

«Poe es en algunos aspectos un hijo adoptivo para Leia, pero también creo que ella ve en él el potencial para ser un verdadero y gran líder de la Resistencia».

El conflicto estará servido con la entrada de la vicealmirante Holdo (Laura Dern), quien conoce a Leia de antaño, pero aún no sabemos bien si esta especie de amistad continuará siéndolo o, por el contrario, acabará en rivalidad.

Lo que sí parece cierto es que Los últimos jedi tendrá un enfoque más político que el resto de películas de la saga, ya que Johnson siempre parece hacer bastante hincapié en este aspecto de la historia (y películas que le han servido de inspiración como el clásico Almas en la hoguera así parecen corroborarlo). A nosotros la verdad que esta arista nos emociona bastante y queremos saber ya más de Leia, Poe, Holdo, Finn, Paige y Rose.

Los malos (o no tan malos)

El líder supremo Snoke (Andy Serkis) tan solo apareció unos pocos minutos de metraje en la anterior entrega, a través de un holograma, pero ya sabemos que es «el gran villano en la sombra» de esta nueva trilogía (al menos aparentemente).

Sin embargo, Snoke no llega solo, siendo acompañado por una guardia pretoriana vestida de rojo y que se asimila a la guardia del Emperador en la trilogía clásica. Johnson resalta, no obstante, que estos nuevos soldados sí pelean, y saben cómo hacerlo. Su papel es básicamente el de ser los guardaespaldas de Snoke.

En cuanto a éste último, conoceremos más de él y sus objetivos en Los últimos jedi, pero los que estén ansiosos por conocer su origen tendrán que esperar; aunque, sí, tendrá más minutos de metraje que en El despertar de la Fuerza.

La octava entrega de la saga nos introducirá otro nuevo personaje cuyas alianzas todavía no están muy claras. Se trata de un hombre conocido simplemente (por ahora) como DJ (Benicio Del Toro). Por ahora, lo único que conocemos de este enigmático personaje es que se topa con Finn y Rose en Canto Bight. ¿En qué circunstancias? No sabemos. Básicamente, DJ no lucha por ningún bando, sino para su propio beneficio (económico).

Por ahora, este es el escenario presentado para los personajes (viejos y nuevos) en la próxima entrega de Star Wars. Lamentablemente, no ha salido nada (aún) sobre Kylo Ren, Hux o Phasma; aunque hay esperanzas de que se comente algo hoy (ya que todavía queda al menos un artículo pendiente de salida).

ACTUALIZADO: Sobre Kylo Ren, veremos especialmente cómo le ha afectado la muerte de su padre (asesinado por él mismo) y la humillación tras la derrota a manos de Rey. Para Johnson, su caída en el Lado Oscuro es comparable al tránsito del adolescente, pero de una forma mucho más insana. Al final, el director de Los últimos jedi resumen la relación entre él y Rey como «las dos cara de la luz y la oscuridad», mientras que Ridley afirma que su personaje se tomará el parricidio de forma mucho más personal.

«Ella no comprende a Kylo. Cuando todo lo que deseaba eran unos padres, ¿por qué alguien que los tiene haría algo así? Es algo más allá de su comprensión, es ridículo. Así que siente el dolor por la pérdida y además está la furia».

Lo que sí comparten ambos es un interés por el pilotaje, ya que veremos a Kylo a los mandos de un TIE Silencer similar al que tenía (cómo no) Darth Vader.

También ha habido ocasión para comentar algo sobre la capitana Phasma (Gwendoline Christie), que volverá para seguir complicándole las cosas a Finn. Puede que no sepamos mucho más sobre Phasma en esta octava entrega (para eso están la novela y la serie de cómics), pero sus apariciones serán más amenazantes y, en fin, presentes, que en El despertar de la Fuerza.

Las familias

Uno de los debates más encendidos en la red tras el final de la séptima entrega de la franquicia es quiénes son los padres de Rey. Este tema se abordará en Los últimos jedi, pero quizás no de la forma que esperamos. Para Johnson, el asunto es importante en el sentido de que también lo es para Rey, para que ella pueda aprender de ese pasado y no volver a caer en lo mismo en el futuro.

Para Ridley, su personaje encontrará las respuestas que está buscando, y descubrirá que al final no le importa tanto, mientras que lo esencial sea tener un lugar al que se pertenece. Al final, más allá de la familia y del punto de partida, lo importante es el destino (y esto lo dice también la actriz).

«Lo que es maravilloso es que no está tan claro, quién es bueno y quién es malo, y no soy yo diciendo «oh, dios mío, algunas personas se están volviendo malvadas». Siempre hay lugar para que la gente mala tome buenas decisiones, y viceversa»

Otro personaje principal con pasado misterioso es precisamente Finn, del cual también conoceremos más. Especialmente (probablemente) en su esperada confrontación con Phasma (recordamos que los soldados imperiales eran robados siendo bebés y entrenados por la Primera Orden).

No podemos terminar el artículo sin tocar (aunque sea brevemente) el periodo de luto por el que estará pasando Chewbacca tras la pérdida de Han Solo (quien por cierto estará «presente de alguna forma»). Nuestro querido wookie estará más serio y protector con Rey que de costumbre, lo que no quita que siga siendo nuestro peludo favorito y resiliente de siempre.

Especial Doctor Who: Nueva Generación. Temporada 1 y el Noveno Doctor

Doctor Who está marcada en el Libro Guinness de los Récords como la serie televisiva más longeva de la historia. Iniciada en 1963 por parte de la cadena pública inglesa BBC, tuvo varias temporadas hasta 1989, cuando la cancelaron. Posteriormente, en 2005, los productores y escritores Russell T. Davies y Julie Gardner decidieron retomarla por todo lo alto, en una versión conocida como Doctor Who: Nueva Generación y que continúa emitiéndose en la actualidad (y más presente en redes que nunca con el reciente anuncio de que el treceavo doctor será, por primera vez, una mujer).

No todo ha sido un camino de rosas para esta nueva generación, a pesar de que en general las críticas son positivas (llegando a recibir varios premios) y de que su popularidad en varios países ha aumentado de forma sobresaliente. La primera temporada, si bien tiende a ser olvidada años después por el paso posterior de David Tennant en la Tardis, es en buena parte culpable de ello.

Todo buen fan del Doctor que se precie sabe de sus características reencarnaciones. El personaje es un alienígena, un señor del tiempo, que no envejece y que, llegado el momento de «morir», lo que hace en realidad es reencarnarse en otra forma y con distinta personalidad, aunque con la misma identidad y recuerdos. Una muy buena excusa que desde el principio consiguieron los guionistas para que la serie pudiera tener continuidad con distintos actores y que no supusieran constantes reinicios (como sí pasa, por ejemplo, con James Bond o más recientemente Spiderman).

Nuevo inicio, nueva tripulación de la Tardis

Para la nueva generación, contaron con Christopher Eccleston (un actor bastante reconocido en la televisión británica) como Doctor, su novena encarnación. Para sorpresa de Davies (ya que era su primera opción), éste aceptó. Como compañera del Doctor (otra de las características básicas de la serie: el Doctor siempre viaja con una, que es terrícola y sirve como punto de unión con el espectador) eligieron a Billie Piper interpretando a Rose Tyler, la que sigue siendo, probablemente, acompañante más popular de todas las temporadas (con permiso de Sarah Jane).

Uno de los grandes aciertos, ya que ambos no solo demuestran ser buenos actores, sino que desprenden una potente química en pantalla. De hecho, y quizás debido a esto, la primera temporada de la nueva generación sería la primera en toda la historia de la serie en dejar entrever un romance entre el Doctor y su compañera, algo que, según Piper, no estaba previsto inicialmente y que además continuaron hasta la cuarta etapa.

Al dúo se les unen compañeros ocasionales, concretamente Adam Mitchell (Bruno Langley) y el Capitán Jack Harkness (John Barrowman), siendo éste último otra de las virtudes de esta primera temporada de la nueva generación, llegando a tener su propio spin off: Torchwood. Hacemos aquí un inciso para decir que no solo la química entre el Doctor y Rose, sino también la desprendida entre estos dos (juntos o por separado) con Jack es también muy palpable, dando quizás lugar a una de las mejores tripulaciones, en conjunto, de todas las que ha tenido Doctor Who. Lamentablemente, la temprana partida de Eccleston no permitió profundizar más en estos aspectos, dando lugar, eso sí, a la aclamada entrada de Tennant.

Aparte de los personajes, cabe destacar en esta temporada del noveno doctor algunos momentos enormes, como el regreso de los daleks (en general, todo el episodio Dalek es una joya), o capítulos enteros como El día del padre, El niño vacío o El Doctor baila. Los guiones de estas historias, las ambientaciones (la Inglaterra nocturna bombardeada por los nazis es realmente mágica) y, sobre todo, las relaciones que van estableciendo los personajes entre ellos, desprendiendo una calidez que puede casi hasta tocarse, elevan este periodo del Doctor Who a los altares. Realmente, no pudo haber tenido un mejor reinicio.

El noveno Doctor

Centrándonos en el personaje del Doctor, en esta ocasión se nos presenta con dos novedades principales: es el que viene inmediatamente después del «doctor de la guerra» (inconmensurable John Hurt, del que hablaremos en otra ocasión) y, por lo tanto, es el más oscuro y melancólico de todas las encarnaciones pasadas y futuras. Sin llegar a perder nunca del todo la frescura y cierto humor que caracterizan al personaje, lo cierto es que esta novena versión puede resultar, sobre todo inicialmente, bastante borde. Es el que más desprecia (a veces abiertamente) a los humanos, aunque nunca deje de protegerlos en caso necesario, y se lleva bastante mal con Mickey (al que llama «Ricky», el ¿ex novio? de Rose interpretado por Noel Clarke). La madre de su compañera (Jackie, interpretada por Camille Coduri) tampoco se libra de sus comentarios mordaces, aunque a la postre termina desarrollando cierto cariño por ella.

En realidad, lo mejor que nos trae este noveno doctor es la evolución del personaje mismo, y solo en 13 episodios. Empieza irascible y taciturno, pero termina aprendido a valorar más las cosas y su buen humor va aumentando (la escena de baile en El Doctor baila es quizás el momento más significativo de este cambio), en buena parte gracias a Rose y su positiva influencia (que no lo digo yo, lo dice el décimo doctor).

Su cambio de diseño y vestimenta, menos estrafalaria que otras encarnaciones, es la otra principal novedad. A petición del propio Eccleston, quien pensaba que el hecho de que fuera un alienígena con dos corazones, que viajaba en el tiempo y que era el último de su especie ya era de por sí bastante raro. Por eso, el noveno doctor viste solamente con una característica cazadora de cuero negra, una camiseta, unos pantalones y unas botas, aportándole además un ligero toque militar (no olvidemos que proviene del conflicto bélico contra los daleks). También habla (en la versión original, claro está) con un marcado acento del norte de Gran Bretaña, algo que el actor hizo a propósito para mostrar que los intelectuales (y el Doctor lo es bastante) no tienen porqué hablar siempre con una marcada pronunciación británica urbanita.

En definitiva, nos encontramos ante un inmejorable regreso de Doctor Who, con un noveno Doctor algo innovador, con una compañera simpática y con la que tiene gran química, y unos secundarios de lujo y con vida propia, además de varios episodios memorables. La mayor pega es, probablemente, lo corto del periodo de Eccleston y que lo sucedió David Tennant, el que es considerado por la opinión popular y aún hoy como mejor Doctor de toda la serie.

P.D.: ¿Cómo se me pudo pasar por alto uno de los mejores clímax de todas las series habidas y por haber?

Hablemos de Sefirot (y un poco de Aeris, Final Fantasy VII)

Todo fan que se precie de Final Fantasy VII conoce (y es posible que sea a su vez seguidor acérrimo del mismo) a su villano: Sefirot (o Sephiroth, como se lo conoce en otros lares). El antagonista de este videojuego, ya considerado un clásico, es una de las imágenes más representativas del título. Y no es para menos: tiene un diseño imponente y (MUY) atractivo, un tema musical que pone los vellos de punta y algunas de las escenas más memorables de la historia de los RPG.

Sin embargo, no voy a realizar un análisis exhaustivo de Sefirot. Primero, porque no me siento capacitada (nunca he sido muy fan del personaje, lo confieso, aunque entiendo el porqué de su popularidad), y segundo porque con el paso de los años ya lo han hecho en multitud de ocasiones a lo largo de la red. Lo que voy a tratar aquí es, aparte de los motivos de su fama, cómo podrían incluso mejorar (sí, mejorar) al personaje de cara al remake. Porque, por muchos seguidores que tenga, en lo personal pienso que al villano de Final Fantasy VII le falta algo tan esencial en los títulos de la saga, incluso para los oponentes del héroe: profundidad en su historia. Lo cierto es que Sefirot tiene un ENORME potencial (he ahí otro de los factores de su popularidad), pero que no queda bien reflejado a lo largo del juego, siendo esto de hecho uno de los fallos del mismo.

¿Sefirot o Jénova?

Es bien sabida la cantidad de debates sobre este punto que se han ido generando por internet desde poco después de que saliera el juego. ¿Quién es el verdadero villano, Sefirot o Jénova? ¿Quién controla a quién? Como sabrán los que ya se lo han pasado (y los que no, avisamos de SPOILERS), en cierto momento, ya avanzada la historia, se revela que Sefirot en realidad está muerto, partido en dos y congelado en el Cráter del Norte. Entonces, ¿con quién habíamos estado tratando hasta entonces? Desde el principio surgieron dos teorías principales: o era el propio Sefirot, «encarnado» en una figura «material» debido a que había sido capaz de absorber parte de la Corriente Vital y de la sabiduría que allí se halla; o era Jénova, «la calamidad de los cielos», el alienígena que había llegado hace siglos en un meteorito y que había acabado con (casi) todos los Cetra. Como sabemos, el doctor Hojo (padre biológico de Sefirot) inyectó células de Jénova en su hijo cuando aún era un feto. Por lo tanto, cuando el villano (antes héroe) se enteró de esta verdad y de que Jénova era una Cetra (una confusión, ya que Jénova nunca fue Cetra, sino todo lo contrario), pensó que él mismo era el descendiente de esta raza anciana y con poderes sobrenaturales, capaces de comunicarse con el planeta. En ese momento, entró en contacto con lo que quedaba del alien, desapareciendo misteriosamente durante años hasta el presente que nos ocupa durante los acontecimientos del juego. Por lo tanto, no pocos fueron (fuimos) los que creían que Sefirot era en realidad Jénova, ya que entre los poderes de la última se encontraba el cambiar de forma y engañar al resto de la población (siendo así de hecho como se infiltró entre los Cetra, acabando con ellos).

Sin embargo, material posterior a Final Fantasy VII, englobado dentro de la Compilation, como Case of the Lifestream: Black/White y las Ultimania, han desvelado que todo el tiempo fue Sefirot el que estuvo detrás de Jénova, valiéndose de sus poderes, y no al revés. En Case of the Lifestream: Black, escrito por el propio Nojima (guionista también de Final Fantasy VII), dice:

«(…) Para eso, necesitaba un cuerpo. Había cosas que quería decir con su propia voz. Cosas que quería destruir con sus propias manos. Había decidido que usaría el poder de Madre.»

https://www.youtube.com/watch?v=oPK6hVeKbAA

Por lo tanto, parece que este enigma está resuelto. Pero entonces, ¿por qué no queda claro a lo largo del juego, como debería? He aquí uno de los grandes fallos del personaje.

Historia profunda que no lo es

Como decíamos, Sefirot se concibe como un experimento. Su padre es un científico chalado y su madre biológica (Lucrecia) claramente tampoco está muy estable emocionalmente (en cualquier caso, desaparece cuando su hijo es aún un bebé). Por lo tanto, nuestro villano crece probablemente en medio de un laboratorio, sin figuras paternas ni maternas, con todas las miradas puestas en él para que termine siendo «el soldado perfecto». Mientras crece, va consiguiendo este objetivo, ya que Sefirot se convierte en una especie de figura mesiánica, un héroe a los ojos del mundo, algo que se consolida sobre todo a raíz de la guerra de Wutai. Pero Sefirot, como persona, en ningún momento se cree un héroe. Si algo resulta realmente atractivo de su persona es que en ningún momento se lo cree… aparentemente. En realidad, nuestro querido «Sephi» tiene un complejo de Dios más grande que Midgar, el cual estalla (y de qué manera) cuando se le revela (de forma equívoca) «la verdad» sobre su «madre», Jénova.

¿Por qué el juego no indaga más en esta doble cara de Sefirot? Su figura es imponente y su tema amenazante, pero su yo pasado es dejado en el olvido y a la mente creativa de los fans que quieran escribir fan fictions. Algo de esto se trata en Crisis Core, pero por alguna absurda razón decidieron meter a Génesis, y Sefirot, que desde el minuto uno es marcado como el villano principal de la Compilation, queda con menos tiempo de exposición. Su «caída a los infiernos» sigue pareciendo forzada, aún con la (¿absurda?) intervención de Génesis, sacada de la manga para este spin off.

Sefirot lo ve todo con MUCHA claridad

Hay tiempo para remediarlo en el Remake. Si hay algo que podrían (y deberían) añadir a la historia es mayor profundidad en la extinción de los Cetra, en la llegada de Jénova y en el pasado de Sefirot. Incluso tenían una oportunidad perfecta para hacer esto último en el juego principal, pero se ve que o no se dieron cuenta o la obviaron: el profesor Gast, Ifalna y su hija Aeris (Aerith por los mismo lugares de Sephiroth). Como se deja claro en Final Fantasy VII, Gast era un científico que trabajaba también para Shinra, cuyos logros estaban por encima de los de Hojo y que fue el verdadero fundador del «Proyecto Jénova» (primer punto de conexión con Sefirot). Gast conoce a Ifalna, la última superviviente de los Cetra, y la investiga, enamorándose ambos y teniendo una hija: Aeris. Hojo los descubre, mata a Gast y secuestra a la madre y a la hija, llevándoselas a su laboratorio, donde pasarán varios años (punto dos de conexión con Sefirot, quien era también un niño pululando por los laboratorios de Hojo en la misma época). Ya tendríamos ocasión perfecta de conocer más aspectos de esta parte de la historia a través de los ojos de una infantil Aeris (protagonista). Sin embargo, y por algún motivo, parece que la Cetra y el villano no se conocen de nada hasta ya avanzada la historia, dejando esta ocasión por perdida.

No fue así en todos los planteamientos de guión que se hicieron, pues en un momento Sefirot y Aeris iban a ser hermanos, de ahí la similitud en sus diseños, y más tarde Sefirot iba a ser el primer amor de Aeris (Zack entró en fases posteriores de desarrollo), de ahí las ilustraciones de Amano donde ambos parecen estar muy juntitos y relajados. Por algún motivo, estas ideas se desecharon, quedando en… no se conocen de nada. Aunque hayan pisado el mismo suelo durante años en el mismo periodo, no importa. Nada. Hasta que llega EL acontecimiento importante. FIN.

Sefirot y Aeris

Hay una parte, para mí, algo incomprensible en todo el juego, que se acentúa aún más en la Compilation y que distrae del verdadero objetivo: la conexión entre Cloud y Sefirot. Evidentemente, son el protagonista y el villano, y además el rubio mata al albino no una, sino dos veces (tres si contamos Advent Children), pero llega un punto (volvemos a referirnos al Case of the Lifestream: Black/White y a Advent Children) en que parece que éste último está obsesionado con el primero, y nunca se llega a entender del todo porqué. Principalmente, porque la que lo detiene y frustra sus verdaderos planes es Aeris, no Cloud. Es la Cetra la que destruye Meteorito (recordemos que el verdadero plan de Sefirot es acabar con toda la vida gracias a Meteorito y después absorberla él mismo a través de la Corriente Vital, convirtiéndose así en un verdadero Dios), es Aeris la que cura Geostigma (creada con la misma finalidad que Meteorito) y, sobre todo, es ella la que simboliza la vida y la creación en el mundo de Final Fantasy VII, mientras que Sefirot lo hace con la destrucción y la muerte. El por qué los creadores no explotan esta idea, centrándose más en clichés de anime con el rubio, no tenemos la menor idea.

Otro factor que sufre con esta «pasada por alto» es la propia muerte de Aeris. En una de las escenas más memorables, Sefirot se deja caer sobre ella mientras invoca a Sagrado y la atraviesa con su masamune, matándola en el acto. El porqué Sefirot se había esperado hasta ese momento para hacerlo (cuando sabemos por el sueño de Cloud que estaba siguiendo a Aeris desde el principio), cuando el invocar a Sagrado era lo más amenazante para él: para hacer sufrir al rubio. Quería esperar a que Cloud llegase para matar a la muchacha delante de sus ojos. Hay un par de problemas con este concepto: Sefirot queda un poco como «tolai» (NO es Cloud tu verdadera amenaza, idiota), y Aeris, que vendría a ser a la postre la verdadera salvadora, queda como un deus ex machina, porque ella está ahí en ese preciso instante para hacer sufrir al héroe, y no porque esté salvando a la humanidad. Todo gira en torno a Cloud, que no me parece mal como fan (por algo es mi personaje favorito del juego), pero que, como guión, deja escapar varias oportunidades de oro y hasta defenestra a otros personajes.

De cara al Remake, esto también podría mejorarse. Pongamos como ejemplo toda la trama en el Templo de los Ancianos, donde Aeris tiene que estar en tu equipo «por cojones» (es esencial para la trama), y en donde también se encuentran con Sefirot y descubren sus verdaderos planes. Es en este momento del juego, el único, donde Aeris y Sefirot intercambian un par de palabras, lo cual es demencial. Ya podrían aprovechar un mínimo enfrentamiento entre los dos en el Remake, aprovechando el momentáneo fuera de juego que sufren Cloud y el resto de la tropa, aunque sea dejando claro desde el principio que Aeris no tiene ninguna oportunidad (como no la tenía nuestro equipo contra Beatrix en Final Fantasy IX, y aún así la batalla ahí está). Algo para crear un mínimo de vínculo entre los dos, Square. Y que Aeris no exista por el mero hecho de tener que hacer derramar lágrimas a nuestro héroe.

Para finalizar (que esto ha quedado muy largo), vamos a hacer hincapié en la enorme simbología que une a Sefirot y Aeris, pero que la historia desaprovecha: sus diseños son similares, pero opuestos (Aeris es rosa y de colores alegres, Sefirot es negro); a una la suele simbolizar el agua (fuente de vida), mientras que al otro lo hace el fuego (destructor); ambos son los únicos que al final del juego permanecen como entes «permanentes» en la Corriente Vital, uno nuevamente como causante de muerte (diablo), y otra como salvadora y protectora (dios), lo cual aparece reflejado en Case of the Lifestream: Black/White; y, finalmente, Sefirot se cree el verdadero Cetra, pero la auténtica es en realidad Aeris, causando la gran tragedia que es la caída en desgracia de este personaje (nuevamente, la imagen del ángel caído, el demonio).

El pueblo, esa figura

Nos vamos a poner un poco vacacionales esta vez. La ocasión lo amerita (por este lado del charco estamos en pleno verano, aunque me consta que de la otra parte también están las «vacaciones de invierno»). No son pocos los que, llegado estas fechas, escapan del mundanal ruido y estrés de la urbe para refugiarse en «sus» pueblos, lugares donde sus antepasados (o incluso ellos mismos) nacieron y/o se criaron, por lo que normalmente hay casa asegurada.

En varias obras de fantasía y ciencia ficción el pueblo es también una figura importante, puede que incluso un personaje más de la trama. Se me vienen a la cabeza, en estos momentos, la esperadísima Stranger Things (o su segunda temporada, más bien) y productos MUY disfrutables como Gravity Falls. También Stephen King (a la que Stranger Things debe más de un homenaje) bebe mucho del entorno pueblerino en gran parte de su bibliografía, destacando en este aspecto It (cuya nueva versión cinematográfica está al caer).

¿Por qué es tan importante el pueblo?

Desde un punto de vista narrativo, es comprensible su uso en ocasiones que les viene como anillo al dedo. Primero, el pueblo (o localidad pequeña con número de habitantes ciertamente reducido, en caso de que alguno prefiera referirse a ellos como «ciudades pequeñas») es ese sitio donde normalmente no pasa nada. Pero nada, NADA. Ya lo dice el sheriff Hopper, de Hawkins, lugar en el que habita y en donde ocurren los extraños sucesos de la serie de Netflix: allí lo más grave que ha ocurrido en los más de cuatro años que lleva en su puesto es que un búho atacó a una señora porque creyó que el moño de su cabeza era su nido. Pero ocurre aquí que en los sitios donde normalmente no sucede nada de pronto irrumpe algo inesperado, algo tan increíble que ni tan siquiera en las grandes ciudades podría darse.

La pandilla de «los perdedores» de Derry

Primer punto, pueblo muy tranquilo y seguro, de pronto no lo es tanto. El contraste es mayor y, así, les cuesta más tiempo de reacción a sus habitantes. Que un niño desaparezca en una gran urbe es, lamentablemente, pan nuestro de cada día, no así en Hawkins o en Derry, ubicación donde se emplazan los acontecimientos de It.

Segundo punto, relacionado con el anterior: los pueblos son sitios tan seguros y tan tranquilos que es habitual hallar en ellos a niños jugando en la calle prácticamente a todas horas (comidas aparte). Aunque lamentablemente sea cada vez algo menos frecuente, quién no ha experimentado el llegar a su pueblo y echarse a la calle a jugar con su pandilla de amigos/primos/loquesea hasta que su madre o abuela lo llamaba para comer. Desde un punto de vista narrativo, tenemos aquí la situación creada perfecta para que se dé el desenlace con total naturalidad: un niño desaparece o se pierde, o bien la pandilla de chavales descubre algo inesperado (en la mayor parte de casos termina siendo sobrenatural), o bien ocurren ambas cosas.

En Gravity Falls tenemos a los hermanos Dipper y Mabel, que se van a veranear a la casa de su tío abuelo Stan, en el pueblo de mismo nombre. Allí esperan aburrirse como ostras (son niños urbanitas), hasta que empiezan a percatarse de que están sucediendo cosas extrañas. Nunca les había sucedido en el lugar de donde proceden, pero sí en Gravity Falls, donde hay lugar para lo inimaginable (o no, si hablamos de la imaginación propia de un niño).

Dipper y Mabel llegan a la casa de su tío abuelo Stan en Gravity Falls

En Stranger Things y en It los niños no se encuentran de veraneo, sino que han nacido y viven en Hawkins y Derry, respectivamente. Localidades como mencionábamos muy apacibles hasta que empiezan a desaparecer niños. A la postre, el significado tras estas desapariciones pertenece al mundo sobrenatural. Algo que solo tendría cabida en pueblos tranquilos y seguros como Hawkins o Derry.

El tercer punto, no por ello menos importante, se remonta directamente al dicho «pueblo chico, infierno grande». En estas «ciudades pequeñas» resulta que todo el mundo se conoce. Saben quién es el jefe de la policía, el alcalde, el profesor de matemáticas del instituto y todos los vecinos. Por eso, cuando llega alguien o «algo» nuevo a este tipo de emplazamientos, el revuelo que se causa es mucho mayor. ¿Quién se da cuenta en una ciudad como Madrid qué familia ha llegado nueva o se ha marchado? ¿Quién se entera incluso (en caso de no estar atento a las noticias) de los acontecimientos más graves que ocurren? En el pueblo no hace falta estar enchufado a la tele ni suscrito al periódico, te vas a enterar sí o sí. Esto a su vez conlleva que las redes de solidaridad entre estos grupos suelan estar más arraigadas, pero también el nivel de «hijaputez» con el prójimo que no es de tu agrado. Y es que existen crímenes a lo largo de la historia que se han dado porque la familia Pérez y el clan Sánchez del pueblo X no se soportaban.

Narrativamente, es mucho más sencillo ubicar a todos los personajes, sus lazos e historias en un enclave como el pueblo, donde, como decíamos, todo el mundo se conoce. En Stranger Things, por ejemplo, Jonathan ya era «el rarito solitario/borde» entre los adolescentes del instituto (porque solo hay uno en todo Hawkins, claro) y todo el mundo sabe que Joyce se divorció de Lonnie y que éste se fue a vivir a la ciudad. En Gravity Falls (y aquí vienen SPOILERS de la serie), Stanley se termina haciendo pasar por Stanford (su hermano gemelo, residente en dicha localidad) para que los habitantes de allí no se percaten de su (misteriosa) desaparición.

El pueblo y la infancia

Por último, a modo de conclusión, el pueblo es ese sitio imbuido de nostalgia. Es el lugar donde muchos hemos crecido, sino en periodos estivales, sí durante años enteros y, en definitiva, el rincón que guarda muchas de nuestras emociones y recuerdos de infancia y adolescencia. Probablemente, en el pueblo hubo un amor de verano, tuvimos amigos con los que jugábamos a echarnos carreras en bici, explorábamos en cuanto oscurecía esperando encontrar nuestro propio demogorgon local, y es el sitio en donde más nos relacionábamos con nuestros mayores, ya sean esos abuelos abnegados en cuidarnos o un tío abuelo Stan. Por eso, series como Stranger Things o Gravity Falls resultan tan nostálgicas para la gran parte del público (ambientación en años 80 aparte): nos vemos reflejados en ellas, vemos allí a «nuestro» pueblo y ese pedacito de infancia/adolescencia que, solo en ocasiones, se resiste a dejarnos.

Nueva información sobre el Universo de Final Fantasy XV

Como algunos ya sabrán, Hajime Tabata (director) y el equipo de desarrollo de Final Fantasy XV realizaron un evento dirigido a fans en Japón durante el pasado fin de semana. Durante el mismo, se mostró arte conceptual de Final FantasyXV y Versus XIII, se enseñó nuevo merchandising relacionado con la saga y se aportó más información sobre todo el universo que envuelve a Eos. Gracias al usuario Jirokichi, nos ha llegado un resumen traducido del japonés al inglés sobre todos estos datos adicionales, que nosotros nos hemos encargado de traducir al castellano a continuación (atención, habrá SPOILERS de Final Fantasy XV y Kingsglaive). Algunas de las fotos y el relato original es de la usuaria @hart_hakaishin.

Empezaron por algo tan apasionante como el nuevo juego de pesca en realidad virtual que se anunció durante el pasado E3. En él, Noctis dialoga bastante con el jugador mientras se encuentra pescando junto a él, por lo que está recomendado especialmente para los seguidores del príncipe. Echar la caña de pescar es más complicado de lo que parece, sobre todo para aquellos que no están acostumbrados a esta modalidad visual. Aunque, luego de pescar un pescado, el jugador puede llegar a sentir el peso y la resistencia del mismo. Si no eres fan de la pesca, puede que te quejes de vez en cuando porque a veces, lo tienes frente a tus narices. Noctis se gira hacia a ti y te habla, pero sus ojos miran hacia cualquier lado. Sería bueno que el equipo de desarrollo haga al respecto con este tema.

Las flores azules características del juego, las siléreas, fueron diseñadas pensando en que se trataría de un objeto importante que acabaría «convirtiéndose en polvo». Las arañuelas, lavandas e iris sirvieron de inspiración a la hora de crear esta flor.

La criatura similar a un bengal que puedes ver en algunas ilustraciones de Nyx es un animal natural de Galahad, que sirve además de motivo ilustrado del protagonista de Kingsglaive y representa su «salvajismo» como inmigrante en Lucis. Asimismo, el color que representa a Nyx es el azul y es debido a que lo es también el de Regis, pero con una tonalidad más morada. El púrpura representa así a la nobleza, por lo que para Nyx fue el azul para que reflejara su juventud frente a Regis.

Sin embargo, el color de Drautos (Glauca) es el rojo, que es además el del imperio. También hay otros colores para los demás personajes (el de Crowe es el naranja, por ejemplo).

Por otro lado, se ha confirmado que la edad de Nyx durante los acontecimientos de Kingsglaive es 32 años, teniendo 20 cuando Niflheim invadió Tenebrae. Como la orden de los kingsglaive fue establecida hace 15 años, él es todo un veterano. En general, todos los personajes de la orden son más mayores que los chocobros, ya que el equipo de desarrollo quería mostrar cómo se veía el mundo desde la óptica de gente más mayor y experimentada. Crowe, a su vez, tiene veintitantos.

El equipo también avisó de que están preparando «algo especial» por el aniversario de KIngsglaive, que será anunciado vía Twitter alrededor del 9 de julio, así que habrá que estar atentos.

Cambiando de tercio, sobre el Episode Prompto, Aranea posará en ocasiones para sacarse una selfie. Hay un total de seis patrones. En cuanto al mismo Prompto, sus células han sido tantas veces modificadas que, aunque sea un clon de Verstael, es improbable que acabe igual que él. Por lo tanto, su pelo no tiene que caerse como el del científico de Niflheim… o puede que termine completamente calvo. En cualquier caso, no es seguro que pueda llegar a la edad de Verstael (¿y aquí Tabata y el equipo han confirmado que los chocobros sobreviven a los eventos del juego?).

Sobre el tatuaje de Gladio, es algo propio de la línea masculina de los Amiticia, pero específicamente cuando entran en la guardia. Clarus (padre de Gladio e Iris) también tiene uno.

Hablando de Ravus, el equipo se refirió al momento en que fue quemado por el anillo, debido a que, como dijo Ardyn, él no era el elegido. Lo que Ravus deseaba al ponerse el anillo no era exactamente la venganza, sino ayudar a Luna, ya que es lo primero para él.

Para el rubio, el imperio es un aliado, ya que siente que no puede contar con Lucis. Además, no puede ser oráculo al ser un hombre, por lo que siempre ha luchado solo. El equipo pide que por favor estemos atentos a su historia (vítores varios, ¿episodio de Ravus? ¿Jugará un papel importante en el de Ignis?).

Hablando del Episode Ignis, desarrollará la historia del susodicho, pero también parte del relato principal. El equipo parece que se está esforzando muchísimo con este y, aunque aún no está terminado, ya ha hecho llorar a Tabata.

El director y compañía además aclararon que la verdadera Shiva es la grande, siendo las pequeñas parte de su «traje». Lo que en realidad son estas pequeñas o Gentiana continua siendo un misterio.

Hablando de la segunda mitad del juego y lo «acelerada» que se percibe, el equipo comentó que esto llevaban notándolo aún antes de la salida del juego, siendo lo que más les ha costado sobrellevar, ya que hubo montones de cosas que no pudieron meter en el producto final aunque hubiesen querido. Están intentando solventarlo a través del contenido descargable y las actualizaciones; sin embargo, éstas llevan tiempo y dinero, por lo que están dándole prioridad a las peticiones con mayor demanda.

Hablemos de Prompto (Final Fantasy XV)

Las historias sobre la búsqueda de identidad no son ajenas al mundo de Final Fantasy. Ya se nos presentaba dicha temática con Cecil en Final Fantasy IV, Terra en Final Fantasy VI, Cloud en Final Fantasy VII o Vivi en Final Fantasy IX, y eso solo poniendo algunos y conocidos ejemplos. En realidad, las típicas preguntas «¿quién soy?», «¿de dónde vengo?» son inherentes al ser humano, y como tal han sido retratadas en múltiples ocasiones en obras de ciencia ficción y fantasía.

En Final Fantasy XV también tenemos nuestro caso particular de búsqueda identitaria en la forma de Prompto Argentum. El personaje se nos presenta como un joven de 20 años aparentemente de lo más normal, jovial, extrovertido (o eso creemos), preocupado por las chicas y los videojuegos. A simple vista podrá llegar incluso a resultar molesto, debido a su verborrea incontenible y a que es, en definitiva, el más enérgico del grupo de cuatro protagonistas que van recorriendo el mundo de Eos.

No obstante, hay más en el interior de Prompto de lo que pensamos (y a partir de aquí habrá SPOILERS para los que no se hayan pasado Final Fantasy XV  y Final Fantasy IX). En Final Fantasy XV Brotherhood se nos presenta como un «niño de la llave», o lo que es lo mismo, un pre-adolescente que se pasa solo casi todo el tiempo, tanto en el colegio como en casa. Probablemente debido a eso, desarrolla algo de obesidad, ya que Prompto simplemente «se deja estar». No parece que tenga ningún tipo de relación profunda con nadie, ni tan siquiera con sus padres (a los que nunca vemos), hasta que aparece un día una perrita herida en medio de la calle. Al muchacho, que siempre le han gustado los animales (como podemos apreciar por su colección de fotografías), se le ocurre llevársela a su casa para que se termine de curar, bañarla y darle de comer. Resulta que el can es en realidad Pryna, la perra de Luna, que a su vez es la amiga de la infancia de Noctis (compañero asimismo de colegio de Prompto). Cuando la dueña se entera de quién ha salvado a Pryna, le manda una carta de agradecimiento y, además, le pide que por favor siga siendo buen amigo de Noctis, puesto que en realidad el príncipe no se relaciona mucho. Debido a que es la primera vez en su vida que alguien le encomienda algo, Prompto se motiva para hablar con Noctis… pero solo logra intercambiar un par de palabras con el príncipe. En realidad, se siente una carga para él, como seguramente se sentirá que lo es para sus ausentes padres. Así, Prompto se propone bajar de peso, comer más sano y, en definitiva, vivir un poco y quererse más, para lanzarse a ser amigo de Noctis. Ambos empiezan a relacionarse realmente en cuanto entran al instituto, forjando una seria amistad que durará el resto de sus vidas.

Lo que Prompto (y lo demás, claro) no sabe es de dónde viene en realidad. Sabe que no es de Lucis, pero no hay más detalles. Durante un incidente mientras van en tren, Ardyn engaña a Noctis haciéndole creer que se encuentra delante de sus narices, causando que el príncipe lo empuje y lo lance fuera. En realidad, se trataba de una visión: la persona a la que Noctis había tirado del tren no era Ardyn, sino Prompto. A partir de este punto, el rubiales queda fuera del grupo hasta que casi hemos pasado todo el capítulo 13. El Episode Prompto intenta solucionar ese hueco, ya que el personaje, una vez regresa, lo hace como alguien más maduro y sereno, mostrándoles a sus amigos el tatuaje con forma de código de barras que lleva siempre oculto y que revela su verdadera identidad: un soldado del imperio de Niflheim. El nuevo contenido descargable del juego se centra en esta averiguación: qué es Prompto y cómo llega a superarlo, aceptarlo y afrontarlo, de paso derrotando a uno de los enemigos de la historia y con quien guarda un estrecho vínculo.

Prompto y Cloud… no, mejor Prompto y Yitán

Son inevitables las comparaciones entre Prompto y el protagonista de Final Fantasy VII, incluso partiendo de sus respectivos diseños (aunque Prompto tiene unos rasgos más «distinguibles» que Cloud), También hay áreas de las historias de ambos que resultan similares, a saber, los dos han formado parte de los experimentos del «científico loco» del juego y, una vez descubren su verdadera identidad, entran en shock y en una profunda crisis de la que solo salen (con ayuda de algún empujoncito) haciendo reflexiones de sus vidas y aceptando a sus verdaderos «yo» internos.

Bueno algo sí se parecen… ¿no?

Sin embargo, hay un personaje de la saga con la que, en mi opinión, Prompto guarda aún mayor similitud: Yitán/Zidane Tribal, protagonista de Final Fantasy IX. No solo guardan algo de parecido en su personalidad (ambos son alegres, enérgicos y suelen quedar prendados -de forma más o menos seria- de cualquier fémina con cara bonita), sino que sus historias son prácticamente iguales: Yitán fue creado por Garland, único superviviente de Terra y un señor con apariencia algo siniestra y barba blanca, para que al crecer terminase destruyendo Gaia. Kuja, anterior creación de Garland y por lo tanto hermano mayor de Yitán, lo secuestra aún siendo un crío y lo abandona en la misma Gaia, donde es encontrado y criado por la banda Tántalus. Yitán crece así en el planeta que estaba destinado a destruir, sin saber en realidad de dónde viene, haciendo amigos y creando lazos con la gente que habita en ese lugar. Cuando Garland le descubre la terrible verdad, el rubiales con cola cae en una depresión y crisis de identidad de la que sale con ayuda de sus amigos y, especialmente, de Garnet. Es probable que, si Final Fantasy IX se hubiese desarrollado con la tecnología que tenemos hoy en día, la escena de la revelación de Garland a Yitán hubiese sucedido de forma muy similar a la de Prompto con Verstael (éste último, científico de Niflheim y verdadero «padre» de Prompto, ya que lo creó como clon suyo); aunque seguramente de manera algo menos agresiva. Y es que Verstael, esta vez sí, con quien guarda verdaderas similitudes es con Hojo de Final Fantasy VII.

La escena posterior, especialmente en el momento en que entra en escena Garnet, también puede ser comparada al momento ante el fuego de Prompto y Aranea. En la novena entrega, el protagonista incluso llega a agradecerle a su compañera de forma muy similar a la que lo hace Prompto con Aranea hacia el final del episodio. Y, tal como dice la muchacha, con esto «el niño se hizo hombre». Prompto y Yitán dan aquí un salto de madurez. Conservan su esencia, su personalidad aparentemente despreocupada, pero tienen un objetivo claro y se han centrado, ya saben quiénes son y lo que quieren y lo aceptan con gusto. El principal problema de Prompto, lo dice también Aranea, es que se preocupa más por lo que buscan los demás que por lo que él quiere realmente. Esa es una de las principales características de Prompto: sus inseguridades, hasta el punto de tener en realidad una baja autoestima. El final de Episode Prompto nos deja al menos con el buen sabor de boca de que el rubiales se tiene un poco más en cuenta que antes.

Los logros del personaje

Hajime Tabata, director de Final Fantasy XV, dijo antes de la salida del juego que el equipo y él mismo se habían preocupado por lo bajo que puntuaba Prompto en las encuestas de popularidad. Por eso se molestaron especialmente en convertirlo en un personaje interesante de cara al público. Y vaya si lo han conseguido. Sí, es verdad que es un personaje que sigue resultando en algunos apartados irritante, pero no podemos obviar que en la actualidad, a más de seis meses después de la salida de Final Fantasy XV, es uno de los favoritos en las redes. Es, además, el preferido por el productor del juego, Akio Ofuji y la pareja formada por él y Noctis es probablemente la más popular entre el fandom (hasta el punto de denominarse «Promptis»).

Tiene su lógica. No solo su historia es una de las más profundas de Final Fantasy XV, sino que además Prompto es normalmente el personaje que sirve de punto de conexión con el jugador (quitando a Noctis, que es a quien controlamos, claro), llegando a romper en ocasiones la cuarta pared (es quien más referencias y guiños hace al resto de Final Fantasy). En ese sentido, su afición por la fotografía es un punto a su favor. A lo largo del juego, Prompto va haciendo fotos del resto de personajes y lugares que nos encontramos, convirtiéndose esto en el «modo selfie» del Episode Prompto, creando una serie de fotos de él mismo o Aranea de lo más hilarantes. Sirve de paso para percibir rasgos de estos personajes que de otra forma no quedan tan claros (como por ejemplo que en realidad tanto Prompto como Aranea son bastante payasos. Del rubiales te lo esperas, pero de la otra, a simple vista, no. Algo similar ocurre con Noctis).

En cualquier caso, la gran virtud que han conseguido con Prompto es, para mí, lo bien equilibradas que están las dos caras de su personaje: la externa y la interna. El «Prompto payaso», como decíamos, y el otro, repleto de inseguridades y con un pasado de lo más turbio. Este tipo de dualidad, en mi opinión, no la habían logrado tan bien en un Final Fantasy desde, justamente, Yitán en Final Fantasy IX. Sí, sé que Zack (Crisis Core) también es ese prototipo de personaje, pero el moreno no entra en el cuadro de los pasados oscuros e inseguridades escondidas en nuestro ser interno. Por eso, Prompto es, junto con Ardyn (por supuesto) y Noctis, uno de los mejores personajes de Final Fantasy XV. Y Episode Prompto, jugabilidad algo irregular en ocasiones aparte, un gran añadido (que a nivel historia, ritmo y química entre personajes incluso llega a superar a veces al juego principal). Pon un Prompto en tu vida.

¡Hablemos de Ardyn Izunia!

 

Tekken 7: Una nueva y esperadísima entrega

El Tekken 7 era un título muy esperado por parte de  muchos fanáticos alrededor del mundo. Es un juego que visualmente enamora ya que le saca todo el jugo gráfico a las consolas de la nueva generación.

Esta nueva entrega ofrece los siguientes nuevos  personajes:

  • Katarina Alves: Una luchadora brasileña que practica Savate o boxeo francés.
  • Master Raven: Es una luchadora que al igual que Raven de Tekken 5, practica el ninjitsu.
  • Claudio Serafino: Es un luchador italiano, jefe de los Arquros de Sirius, una organización secreta que lucha contra el gen  demoníaco del  clan Mishima.
  • Lucky Chloe: Es una otaku que suele vestirse con disfraces de gatita. Su estilo de pelea es el Freestyle Dance.
  • Akuma: Ya conocido en el universo del Street Fighter, Kazumi le pide que pague su deuda matando a Heihachi y Kazuya.
  • Kazumi Mishima: Es esposa y madre de Heihachi y Kazuya respectivamente. Es la que genera el hilo argumental de la historia de este juego.
  • Shaheen: Es un luchador de origen árabe que pelea utilizando un sistema militar de auto-defensa.
  • Jack-7: Una nueva versión del robot que utiliza la fuerza bruta para complicarle la existencia a sus adversarios.
  • Josie Rizal: Es una luchadora de origen filipino que practica el kali filipino o eskrima y el kickboxing.
  • Gigas: Es un humanoide con el cual han experimentado, habiéndole implantado el ADN de diversos luchadores. Su estilo de pelea es el de impulso destructivo.
  • Eliza: Este es un personaje que se adquiere inicialmente por DLC. Tiene un estilo de lucha variado y sufre de narcolepsia, permitiendo que mientras está dormida, pueda recargar su salud.

 

Este es un juego que ha generado mucha expectiva (la espera ha generado muchos interrogantes, como siempre para entregas de este calibre). Bandai Namco, sabiendo esto, lanzó en 2015  las máquinas arcade, para lo que creemos fue un testeo de marketing. Mal no les ha ido, ya que se han hecho  incontables torneos y eventos a partir de este temprano lanzamiento.

La premisa del Tekken 7  yace en una guerra sin paz entre Heihachi Mishima, de la corporación Mishima Zaibatsu,  y su hijo Kazuya, de la corporación G. Hace su aparición Kazumi Mishima, esposa y madre respectivamente de los dos anteriormente mencionados, quien le pide a Akuma (de la saga Street Fighter y archienemigo de Ryu) que mate a Heihachi, Kazuya y Jin Kazama, para así poder acabar con la maldición que arrastra la familia Mishima.

En esta entrega los modos de juego son los siguientes:

  • Modo historia: Es un modo muy entretenido donde combatimos siendo distintos personajes del juego, en el marco de la historia de la guerra sin cuartel entre Heihachi y su hijo Kazuya.
  • Modo torneo: Se puede jugar de hasta 8 jugadores, tres rounds, donde también podemos configurar el tipo de eliminación ya sea simple o doble.
  • Modo Arcade: Es el clásico modo de siempre, pero que nosotros consideramos a nota personal, bastante corto, ya que consta solamente con 5 fases de pelea. Esperemos que esto se pueda arreglar en alguna próxima actualización
  • Modo Combate de Tesoro: Son combates por premios contra la CPU, donde ganando los combates se gana dinero y premios en consecuencia de la victoria. También se va ascendiendo en un ranking con distintos niveles de dificultad.
  • Modo biblioteca: Este es uno de los puntos a favor del juego. Digno de nostalgia y la memorabilia. Es aquí donde se puede invertir el dinero del juego, desbloqueando videos de los personajes de todas las entregas anteriores de esta saga.
  • Modo gramola: Aquí donde podemos poner en el juego, la música de los juegos anteriores. Un verdadero acierto y un subidón de nostalgia y recuerdos.
  • Modo online: Para ir a tono el creciente fenómeno de los E-Sports, este modo permite jugar contra gente en todo el mundo en peleas individuales o torneos. Pero desde que nosotros tenemos el juego, este modo no ha ido muy bien, ya que no logra una conexión estable.

A favor:

  • Es un juego dinámico, de constante movimiento y de imposible tedio.
  • La biblioteca y la gramola es un acierto con todas las letras para los más antiguos fanáticos.
  • Aunque un poco polémico, nos mostramos a favor del modo Rage Art.
  • La fidelidad de idiomas de los personajes según su procedencia.

En contra:

  • El modo arcade se nos hace muy corto con solo cinco fases de combate.
  • El modo online no es muy estable realmente y puedes esperar mucho tiempo para jugar una partida en este modo.
  • Las escenas finales o endings, suelen ser algo tontas e insuficientes.

 

En conclusión, el Tekken 7, con su variedad de personajes, ofrece horas de diversión. Es un juego de fácil jugabilidad, ya que sus combos no son nada complicados en su ejecución, en comparación, tal vez, con otros juegos de pelea. Quizás por priorizar nuevas modalidades, se ha dejado de lado un poco todo lo que hace que el Tekken sea ya un clásico.  Los puntos a mejorar arriba mencionados, tal vez se subsanen con una posible actualización.

No obstante, aseguramos que el Tekken 7 ha logrado con creces superar nuestras expectativas y lo recomendamos sin temor a equivocarnos.

Valoración: 8, 5 puntos.

Por qué los guionistas de Dragon Ball Super no han entendido nada (Capítulo 93)

Sí, el título es pretencioso, pero es lo que siento ahora mismo mientras veo el último capítulo de Dragon Ball Super (el 93) emitido en Japón. Algo similar me ocurre con Los Simpson desde hace algunos años. Opino  que, debido a que las hordas de guionistas (que son varios)  nuevas son de generaciones que crecieron viendo el Dragon Ball y Dragon Ball Z de antaño (con suerte, porque a lo peor alguno no habrá visto nada del Dragon Ball de Toriyama), se habrán formado ideas en su cabeza con el tiempo que luego querrán plasmar, así en plan fan fiction. Lo malo es que a veces esas ideas no quedan bien ejecutadas, o directamente no son coherentes con el resto de la historia creada por Akira Toriyama. Puede que el culpable sea éste mismo, ya que a veces es él el que viene dando la idea base para la historia en Super (como ocurrió con Goku Black). Probablemente, el haber podido acceder a través de internet a algunas obras creadas por los fans (el Multiverse es el que más se viene a la mente), ha llevado a la decisión de plasmar algunos conceptos «cool» en el canon de la serie (que, a veces, no quedan bien ejecutados en cualquier caso).

Pongámonos en situación, porque son varios los frentes que tengo ahora abiertos con Dragon Ball Super (SPOILERS para quiénes no hayan llegado hasta el capítulo 93):

Los saiyans del Universo 6: Los que nos siguen por redes sociales saben de nuestra debilidad por la introducción de estos nuevos saiyans. No es de extrañar, puesto que, de los tres, dos de ellas son mujeres, ¡y encima se transforman! ¡Las primeras mujeres super saiyan en toda la historia de Dragon Ball! Así, era imposible no emocionarse ante la perspectiva. Además, el diseño de Caulifla (hecho por el mismo Toriyama) mola (aunque le falten varios bocatas de chorizo, como a Cabba), y Kale es directamente una copia de Broly para atraer a los fans de éste último, que no son pocos. ¿Qué empieza a fallar, entonces?

Por un lado, la forma de transformarse. La de Cabba tuvo un pase porque Vegeta lo provocó malamente con amenazas REALES (Cabba no conocía de nada a ese saiyan tan fuerte y de apariencia amenazante). Pero las de Caulifla (que ya va por super saiyan nivel 2 y nadie se ha dado cuenta (!!)) y Kale, no. Son aún peores que las de Trunks y Goten, de por sí ya muy criticadas por los seguidores de la serie en su día. Caulifla resulta que se transforma con solo pudiendo concentrar bastante energía en su espalda. Y ya. Lástima de Vegeta, que se dejó torturar y matar por Freezer porque nunca había llegado a tan compleja conclusión. O Goku, que tuvo que ver la muerte de su mejor amigo para nada. Y encima lo llaman «genio de la estrategia». Se ve que la espalda de Caulifla está muy entrenada porque, lo dicho, ya va por el nivel 2 y, a este paso, no nos sorprenderá verla en super saiyan 3 o incluso blue. Total…

Ahora vamos con Kale, «la Broly femenina». Curioso que sea una copia de Broly sin disimulo alguno (hasta le imitan frases y poses), porque los guionistas parece que no han entendido nada de lo que es el personaje. Broly surgió en las películas como la figura del verdadero super saiyan legendario en lugar de Goku/Kakakrotto (de hecho, nacieron el mismo día). Por lo tanto, desde el minuto 1 de su existencia poseía un potencial y un nivel de poder incalculables, causando el temor del Rey Vegeta, quien decidió acabar con Broly aún siendo un bebé y con su padre, Paragus. Ambos sobrevivieron gracias al poder del infante, quien pudo transformarse en super saiyan desde muy temprana edad (sin apenas poder controlarlo, por lo que Paragus le construyó y puso por la fuerza una diadema para mantener a raya dicho poder). Kale no. Kale es una saiyan tímida y algo peculiar (en pocas palabras, es una yanguire total) que pasa totalmente desapercibida para cualquiera (Cabba ni la registra) hasta que alguien osa dirigirle la palabra a su admirada Caulifla. Entonces estalla y se convierte en una monstruosa figura que, bueno, que copia todo de Broly. Ni una mención a que Kale naciera como alguien especial, a que fuese temida por el resto de sus compañeros o a que Caulifla se acercase a ella porque vio «algo» en ella que le decía «tiene un poder incalculable», o similar. Kale no tiene en absoluto el trasfondo que tenía Broly y, por lo tanto, su transformación carece de lógica y hasta de ritmo. Lo único que tiene en común con el personaje de las películas (apariencia y tal aparte) es que el motivo de que ambos «estallen» es totalmente ridículo. Sí, puede que un futuro cuenten mediante flashbacks aspectos del pasado de Kale que la acerquen más al armario empotrado que era Broly (aunque lo dudo), pero el daño sobre la primera vez en que vemos su transformación ya está hecho.

De Cabba no voy a hablar, porque hasta la fecha solo ha servido de saco de boxeo de las féminas. Está bien que introduzcan a mujeres poderosas y fuertes en Dragon Ball (ya era hora); no que lo hagan a costa de ningunear a otro personaje que inicialmente también prometía.

La vuelta de Freezer. Ay, la vuelta de Freezer. Otra vez, que a este paso se está pareciendo justo a Broly en las películas. Ya he mencionado lo que me parece el regreso de este villano (puede que el más emblemático e irredimible de toda la serie), pero seguiré por la misma vía: ¿Toei quiere cargarse la saga de Namek o qué? ¿Cómo es posible que Krilin, Vegeta o Piccolo estén de acuerdo con que semejante ser luche junto a ellos? ¡Si apenas muestran oposición! Recordamos que al primero lo mató y se cargó las razas enteras del segundo y del tercero (bueno, y al príncipe de los saiyans también lo tuvo esclavizado durante unos cuántos años, ya de paso). Pero nada. Y Goku también como si nada, que le interesa más ver el nivel de una supuesta nueva forma de Freezer (¡¿otra?!) que todo lo que le hizo pasar el tirano espacial en el pasado. Es verdad que puede que Goku esté jugando con el villano, ya que en principio le ha prometido algo que las bolas de dragón de la Tierra no pueden cumplir (ser resucitado, lo cual siendo ya dos veces, no debería poder ser). También es cierto que puede resultar interesante ver a un villano como este luchando del lado de los buenos, pero en definitiva, a mí me sigue sonando como un mal fan fiction. Si lo comparase con otras series, sería como si Luke volviese a por Palpatine o Naruto a por Madara (y eso que los grados de evangelización de Naruto a veces alcanzas cuotas incalculables). Un sinsentido total.

Y Buu es como Cabba, mejor no hablar de él y de su (mal)trato por parte de Toei…

En definitiva, sigo esperando a que esta nueva saga de Dragon Ball Super me demuestre algo coherente y de calidad. Quizás una vez empezado el Gran Torneo, que se está haciendo desear. Por lo demás, me sigue pareciendo una mala copia del Multiverse con muy poca lógica y coherencia. Y eso que los nuevos personajes prometen…

P.D.: La animación sigue en su línea, no hace falta mencionar más.

P.P.D.:Escenas como la de abajo ahora carecen de sentido…

Japoneando Anime: Shingeki no Kyojin (Attack on Titan)

Esta vez en Japoneando Anime vamos a tratar una de las series más populares de los últimos años: Shingeki no Kyojin (進撃の巨人, también traducida como Attack on Titan o Ataque a los titanes), de Hajime Isayama y publicada desde Bessatsu Shônen Magazine desde septiembre del 2009. Actualmente, lleva 22 volúmenes recopilados y más de 20 millones de copias vendidas, además de anime y películas en imagen real.

El anime está al cargo de los estudios Production I.G. y Wit, llevando ya dos temporadas en curso. Como el manga aún está serializándose, es altamente probable (también visto el éxito cosechado) que terminen siendo alguna que otra más. De la banda sonora se encarga Hiroyuki Sawano (Nanatsu no Taizai, Blue Exorcist, etc.). Si bien el anime captura bastante la esencia del dibujo de Isayama, lo cierto es que lo «mejora» bastante, volviéndolo más bonito a la vista a través de una animación fluida y, por lo general, cuidada.

Shingeki no Kyojin nos sitúa en un mundo post apocalíptico dominado por titanes, unos misteriosos seres de gran envergadura (unos más que otros), sin genitales y que se alimentan solo de humanos. Por ello, los supervivientes se han refugiado en ciudades entre muros, siendo los sectores más humildes los que habitan las áreas más pegadas al exterior y los más favorecidos los que habitan en el centro y más hacia el interior. Eren Jäeger es un niño que vive con su familia y con su amiga/hermana adoptiva Mikasa en una de estas zonas más pegadas al exterior. Un día, de forma repentina y totalmente inesperada, el único muro que los protege de lo que hay afuera se ve atacado por «el titán colosal», un titán nunca visto de proporciones increíblemente gigantescas. La ciudad se ve atacada entonces por multitud de estos seres y solo unos pocos consiguen evacuar, entre ellos Eren, Mikasa y su amigo Armin. Debido al rencor y a la sed de venganza, Eren jura entonces unirse a la milicia contra los titanes.

Entre el shônen y el seinen

En Shingeki no Kyojin encontramos un shônen (少年漫画, manga para chicos adolescentes) realmente entretenido, pero no por ello libre de varios clichés típicos de este género. Sin embargo, lo que quizás hace que esta serie destaque sobre el resto de otros shônen de éxito es su crudeza, que causa que a veces parezca más cercano al seinen (青年, manga dirigido a adultos). Este es, probablemente, uno de los grandes aciertos de Shingeki no Kyojin: se palpan la desesperación y el sentido de «emergencia» en sus páginas, apareciendo también bien reflejado en el anime. De hecho, Isayama no tiene ningún reparo en asesinar personajes que solo unos capítulos atrás parecía que iban a ser importantes para la trama. Esto causa la sensación de que, a la postre, cualquiera será prescindible y que nadie está a salvo. Ni tan siquiera su protagonista (que se las ha visto canutas en más de una ocasión).

Unido este punto al de que este manga y anime trata temas aparentemente algo más serios como la política y la corrupción, alejan a Shingeki no Kyojin de ser el shônen convencional y lo acercan más, quizás, a historias tipo Juego de Tronos (o Canción de Hielo y Fuego, para los fanáticos de los libros). No obstante, Shingeki no Kyojin no deja de ser un shônen con todos sus ingredientes típicos: protagonistas adolescentes con aires cool y, por qué no decirlo, bastante estereotipados (algo que trataremos a continuación), acción fluida y a raudales, pequeños toques de romance (sobre todo de la o las fémina/s que beben los vientos por el prota) y, en definitiva, un mundo al que salvar.

Tsundere, kûdere, yandere o ninguna de ellas

Comentábamos que los personajes de Shingeki no Kyojin se encuentran bastante estereotipados, algo que, no lo negaremos, sucede en el 90% de mangas, animes y videojuegos procedentes de Japón. De hecho, cada estereotipo tiene su propia denominación nipona, según los rasgos de personalidad que destaquen en él.

Así y por ejemplo, tenemos por un lado a los tsundere (ツンデレ), kûdere (クーデレ) o dandere (ダンデレ”), en donde entrarían las personalidades más introvertidas, siendo el primero el ejemplo de alguien que es frío (incluso hostil) con su entorno hasta cierto punto (y que en el fondo esconde una faceta más tierna y cariñosa); el segundo sería el más apático e inexpresivo; y el tercero el que se muestra tímido o asocial con los demás, salvo con su interés amoroso o con las personas de más confianza. Se pueden encontrar varios debates por la red sobre dentro de qué estereotipo se encontraría Mikasa (en mi modesta opinión, tsundere o kûdere), mientras que Historia Reiss suele estar catalogada dentro de los dandere (aunque en la primera parte pueda parecer mucho más yangire, como veremos) y otros como Levi en los kûdere.

El contrapunto a este bloque de estereotipos sería el yandere (ヤンデレ) y el yangire (ヤンギレ), que son personajes aparentemente dulces y cariñosos, que en el fondo tienen un lado sádico y violento. El caso de yangire suele aplicarse a personajes femeninos que van enloqueciendo paulatinamente y debido a algún trauma; mientras que los yandere muestran los cambios de manera brusca y repentina. En realidad, varios personajes de Shingeki no Kyojin son susceptibles de entrar en este grupo, destacando probablemente Bertolt, Reiner o Armin. No es de extrañar, como punto y aparte,  encontrarse en las series yaoi o shônen ai que uno de los chicos cumple el papel de tsundere y el otro el de yandere.

Desastres que asolan Japón

Ya hemos hablado en otros Japoneando Anime cómo las bombas de Hiroshima y Nagasaki, junto con otras terribles consecuencias de la II Guerra Mundial, afectaron al imaginario colectivo nipón, reflejándose esto en algunos de sus manga y anime. Hay otro factor que siempre ha sobrevolado al grupo de islas y que es incluso más relevante que lo acontecido en la II Guerra Mundial: los desastres naturales.

Como muchos sabemos, Japón se encuentra en medio del conocido como Cinturón de Fuego del Pacífico, convirtiéndolo en una de las zonas más sísmicas del planeta. A lo largo de su historia, el país nipón ha sufrido terremotos realmente terribles, como el de Kantô el 1 de septiembre de 1923 o el de Sendai el 11 de marzo del 2011. El primero dejó la ciudad de Yokohama y alrededores destruidos, más de 105.000 fallecidos y otros 37.000 desaparecidos (además aparece reflejado en la película El viento se levanta, de Hayao Miyazaki). El segundo, probablemente el más conocido en nuestra generación, fue seguido de un terrible tsunami y dejó cerca de 9.000 muertos y 13.000 desaparecidos, además de la amenaza nuclear de Fukushima.

Los terremotos (y tsunamis que a veces siguen) son imprevisibles, de ahí su poder devastador. No es de extrañar que en tantos manga y anime surjan seres gigantescos y completamente destructivos (ya hablamos también de Godzilla y el género kaiju). Como hemos mencionado, uno de los grandes logros de Shingeki no Kyojin es su sensación de amenaza constante, de que nadie está a salvo. Ya en el primer capítulo, los titanes colosal y acorazado surgen de la nada y arrasan con el muro y con la ciudad. Este tipo de episodio se repetirá más veces posteriormente y a lo largo de la serie. Y es que nadie está a salvo, ni tan siquiera Eren Jäeger.

P.D.: Queremos aprovechar esta entrada y que estamos en plena emisión de la segunda temporada para avisar que Selecta Visión está lanzando los capítulos de Shingeki no Kyojin casi a la vez que en Japón y subtitulados al castellano. Es GRATIS y LEGAL. A partir de aquí:

https://www.youtube.com/watch?v=uJQ6kbDgARM

Esos clásicos inolvidables: El Cristal Oscuro (The Dark Crystal, 1982)

Corrían los años de la década de 1950 y triunfaba en la televisión un espacio ocupado por títeres, titulado The Muppets Show (originalmente conocido como Sam and Friends, mientras que en España nos llegó como Los Teleñecos). Se trataban de unas marionetas bastante complejas y expresivas, algunas con formas de animal y otras no, que hacían las delicias de los niños a lo largo del planeta (varias películas y toda una sarta de merchandising relacionado así lo confirman).

La mente pensante tras estos títeres era la de un hombre llamado Jim Henson (1936-1990), quien había fundado The Jim Henson Company y cuya inquietud artística lo terminaba llevando a otro tipo de terrenos… como al cine. A pesar de contar ya con dos éxitos televisivos (tras The Muppets llegaría, a finales de los 60, Barrio Sésamo), Henson llevaba tiempo pensando en realizar una película… donde no apareciera ni un solo ser humano. De hecho, así es como se promocionó inicialmente El Cristal Oscuro (The Dark Crystal, 1982), como la primera cinta donde no se vea ningún ser humano en pantalla. Henson tenía la ambición de realizarlo todo con marionetas y escenarios móviles, y así lo hizo. Primero se asoció con su amigo y compañero de profesión, Frank Oz (archiconocido por ser, básicamente, Yoda en Star Wars, de hecho por propia recomendación de Henson). Una vez decididos los dos a ponerse detrás de las cámaras, Henson contactó con el ilustrador británico Brian Froud, ya que era admirador de su obra, y le encargó el diseño de criaturas y personajes. De la mente de Froud salió todo un singular mundo de seres únicos e irrepetibles, como los Místicos (Mystics), los Skeksis (inspirados en una fusión entre reptiles, aves carnívoras y dragones) o los Gelflin. Con una clara inspiración de obras tipo El Señor de los Anillos, la historia que creó Henson se centraba mucho más en aspectos filosóficos propios de la corriente New Age imperante en aquellos años.

Así, los seres que poblaban el mundo de Thra (así es como se llama el planeta de El Cristal Oscuro), los Místicos y los Skesis, representan las dos caras de un ser (de hecho, un místico está vinculado a un skeksis y viceversa), la espiritual (mística) y la materialista (no por nada, skeksis es un vocablo bastante similar a skeptical, escéptico en inglés, el que no cree). Los místicos de Thra se muestran en un mundo más dominado por la naturaleza, pero que a su vez pareciera que no pertenecen a él (en cuanto sienten la llamada del cristal, inician la peregrinación). A su vez, son seres aparentemente bondadosos y libres de toda carga material (se los representa haciendo varios rituales y, cuando muere el más sabio de todos ellos, lo consideran libre e incluso Aughra lo cree estar «en todas partes»). Por el otro lado, los skeksis viven en un palacio, son los que dominan el mundo a base de tiranía. La muerte del skeksis equivalente al místico más sabio es totalmente contrapuesta a la de éste: mientras el místico fallece acompañado por Jen (su discípulo e «hijo adoptivo») y en paz, el skeksis lo hace rodeado del resto de los suyos, ansiosos por hacerse con el poder, y totalmente contrariado y aferrado a su cetro de emperador. En medio, hallamos otras series de especies, de entre las que destacan dos: los mencionados gelfling, con forma humanoide (más similar a la de un duende), y los podling (utilizados como esclavos por los skeksis y con formas similares a las de un tubérculo). El protagonista de la cinta es de hecho un gelfling llamado Jen, el cual según una vieja profecía será el encargado de reparar el cristal oscuro (roto hace mil años, lo que causó la división de místicos y skeksis y la dictadura de éstos últimos) y traer de nuevo la armonía a Thra. Debido a que los skeksis conocen esta profecía, acabaron con todos los gelfling, salvo con Jen (que fue rescatado de niño por este místico) y con Kira (una gelfling hembra rescatada y adoptada por los podling). Jen emprende su camino para recomponer el cristal, encontrándose con la propia Kira, Aughra y toda una serie de aventuras.

Tras cinco años de realización, donde todo fue hecho artesanalmente y donde los actores tenían que llevar puestos trajes y muñecos de hasta 32 kilos (el propio Henson no podía llevar la marioneta del místico durante más de 10 segundos seguidos), Henson y su equipo se encontraron con el primer (y principal) inconveniente: su película era considerada demasiado oscura para los niños. En realidad, Henson era totalmente contrario a la idea de que a los menores se los protegiera de emociones como el miedo, ya que el que no lo sintieran lo consideraba insano (si viviera hoy en día, le daría un patatús). Pero a las distribuidoras, más preocupadas por hacer taquilla, esto les suponía un inconveniente. La película estuvo retenida durante bastante tiempo por ITC Entertainment, hasta que el propio Henson se cansó y estrenó la cinta con dinero de su bolsillo. Al principio las reacciones fueron mixtas, pero con el paso de los años, El Cristal Oscuro acabó convirtiéndose en una película de culto (actualmente tiene un 72% en Rotten Tomatoes y un 7,2 en IMDB). Si bien el éxito en taquilla fue inicialmente modesto, el paso del tiempo también ha sabido darle aquí la razón a Henson, surgiendo una cantidad considerable de material complementario relacionado con el universo de Thra, empezando por cómics (algunos editados en nuestro país por Norma Editorial), libros, muñecos, una secuela que lleva bastante tiempo en realización y una precuela que acaba de ser confirmada por Netflix.

El éxito de El Cristal Oscuro viene dado por varios factores: principalmente, un apartado técnico increíblemente cuidado, no solo en lo visual, sino también en lo sonoro (el gran Trevor Jones se encargó de ponerle música a la cinta). Por otro lado, una historia aparentemente sencilla y ya mil veces contada, la del camino del héroe y la del bien contra mal, pero esta vez con toques propios de una filosofía New Age, que enfrenta al materialismo con lo espiritual hasta hallar un equilibrio. Y, por supuesto, que lo que inicialmente parece otro cuento más para niños al final no lo es tanto, resultando casi más en un divertimento para adultos (y adolescentes). Lo cierto es que sí, El Cristal Oscuro se pasa de oscura (sobre todo en algunas escenas que fueron eliminadas del metraje original; aunque ya pueden verse integradas en la edición normal de DVD/Blu ray), lo que puede asustar a algún que otro infante sensible. Además, es bastante probable que al niño se le escape buena parte del mensaje. No así al adulto. En realidad, Henson siempre quiso llegar a un público mayoritario y demostrar que las marionetas no eran cosa exclusiva de niños, pero durante buena parte de su vida se topó con una sociedad todavía obcecada.

P.D.: ¿Nadie más ha pensado que la saga de videojuegos Final Fantasy pueda haber recibido algo de inspiración de esta cinta? Aparte del más que evidente papel que juega el cristal en ambas, el planetario de Aughra nos recordó, y mucho, al de Cañón Cosmo (Final Fantasy VII).