Octopath Traveler II y la fijación con la lucha de clases

Octopath Traveler II salió al mercado hace unos meses prometiendo (y así cumplió) corregir los errores de su, por otro lado, laureada precuela. Efectivamente, la última entrega de Square Enix y Acquire ofrece otras ocho historias independientes (pero algo más entrelazadas que las anteriores), que recorren un mundo preciosista de cuento que ofrece secretos casi en cada rincón.

Durante mi (larguísima, por cierto) partida encontré, no obstante, que había un elemento común de trasfondo en casi todas las narrativas: la lucha de clases. No sé si es que estoy viendo últimamente demasiado cine surcoreano o en la oficina estoy percibiendo más injusticias, el caso es que, a mi parecer, este título de Asano estaba mostrando mensajes de desigualdad socioeconómica por doquier (al menos, bastante más que en la primera parte). Claro que, teniendo en cuenta una de las tramas principales del aún más reciente Final Fantasy XVI… ¿Será algo que ahora también inquieta al imaginario colectivo nipón? ¿Al mundo?

Avisamos de que habrá SPOILERS de Octopath Traveler II.

Partitio, el ejemplo más claro

Partitio es en esta ocasión el que lleva el trabajo de mercader, por lo que se presta desde el minuto uno a ser quien refleje este tipo de cuestiones en su arco narrativo. Aun con eso, éste se centra especialmente en buscar cierta equidad (dentro de las posibilidades de un mundo de fantasía capitalista).

Octopath Traveler 2. Acquire y Square Enix.

No sin ciertas sobredosis de idealismo (de verdad, qué fácil y qué bien le sale a este hombre lo de montar su propio Carrefour en una ciudad decadente), Partitio acaba enfrentándose inevitablemente a Locke (dudo mucho que el nombre sea una elección casual y sutil), tras haber derrotado a sus secuaces (perro incluido). Básicamente, no rompe con el sistema ni revoluciona nada, pero es su búsqueda de oportunidades y su pura inocencia bienqueda lo que contrasta con los villanos ávidos de riqueza, aunque sea explotando a los demás.

El otro personaje secundario que sirve para representar al rico frente al pobre, pero de una forma muy naif, es Alrond, un extravagante heredero que no tiene inconveniente en invertir su fortuna si ve que la causa es justa (como, por ejemplo, revitalizar su ciudad).

Partitio es generalmente considerado, junto a Agnea, como el protagonista de la historia más “inocente” y desenfadada de todo este Octopath Traveler II, y con razón. Me hubiese gustado ver una crítica más feroz al capitalismo, pero entiendo que, en el fondo, el arco de Partitio nunca fue de eso (sino de reflejar sus posibles bondades, lo cual puede llevar a la trampa). Otra cosa es que la perspectiva del pobre apenas aparezca reflejada (a no ser que se considere a Partitio como tal, pero teniendo en cuenta que en otros tiempos también tuvo un gran negocio y fortuna, no sé yo…).

Octopath Traveler 2. Acquire y Square Enix.

Agnea, Gil y Dulcinea

La otra historia más desenfadada sí ofrece, sin embargo, esa perspectiva del pobre o de la clase obrera, personajes no controlables aparte. Y no tanto por Agnea, quien, aunque provenga del ámbito rural (algo que su lenguaje deja en claro desde el primer momento), no parece que haya pasado nunca por penurias económicas. Sin embargo, en el segundo capítulo llega a Nueva Delsta (una de las varias ciudades por todo Octopath Traveler II que muestra esa división entre zonas ricas y pobres) y se topa con el propietario de un modesto y decadente bar de copas que apenas sobrevive en el barrio marginal. Frente a él, la ostentosa ópera y su dueño, quien será (no podía ser de otra forma) el enemigo a batir en este capítulo.

Esta demostración del mercantilismo del arte no termina aquí. La principal antagonista de Agnea, Dulcinea, proviene de una zona repleta de miseria en Sai, y fue a base de muchísimo esfuerzo por lo que logró salir de ahí y convertirse en una gran estrella.

Dulcinea no critica al sistema ni rompe con él, se suma al mismo. Por ello, se siente amenazada por nuevas promesas como Agnea. No obstante, el enemigo al final no es ella, sino ese mismo molde cruel y dirigido por gente sin escrúpulos, como lo era Locke en el caso de Partitio.

De nuevo para quien esto suscribe, eché en falta algo más de mala leche en todo este embrollo dentro del arco de Agnea. Pero teniendo en cuenta que ni tan siquiera alguien tan inescrupuloso y codicioso como Locke obtiene su merecido al final…

Octopath Traveler 2. Acquire y Square Enix.

Hikari y su pueblo

El príncipe destronado de Ku también proviene, parcialmente, de un origen humilde, pues su madre fue una de las concubinas del anterior emperador, quien la eligió por su renombrada bondad y belleza; sin embargo, no pertenecía a la nobleza. Este es uno de los rasgos que le echa en cara su medio hermano mayor, Mugen, pues él sí pertenece completamente a una alta alcurnia.

Quizás por sus propias vivencias, la madre de Hikari le transmite una cierta empatía por sus súbditos, vengan del estrato que vengan. Probablemente por eso, desde edad temprana se hace amigo de Ritsu, un joven perteneciente a la clase humilde quien ve por ello automáticamente mermadas sus oportunidades. Lamentablemente, esto no impide que Ritsu crezca en un personaje rencoroso y trepa, que no escatima en medios si eso le permite escalar posiciones.

De nuevo, nos encontramos con que al final se culpa más al sistema cruel que al propio personaje por sus acciones, como si éste se viese obligado a actuar de determinada manera si no quiere ser maltratado o, peor aún, ejecutado y reemplazado. Todo esto estaría bien… si Octopath Traveler II se hubiese atrevido a REALMENTE criticar a dicho sistema, o al menos intentar una ruptura con él (quizás la que estuvo más cerca fue Throné en su arco; pero éste no se centraba tanto en las diferencias de clases). Al final, los personajes antagónicos parecen quedar excusados y (salvo Ritsu, y aun así también intentan suavizarlo), ninguno es que termine mal en absoluto.

Octopath Traveler 2. Acquire y Square Enix.

Escrito todo esto, la verdad es que Octopath Traveler II es un muy buen juego (y lo considero uno de mis GOTY), que supera en todo a su precuela. Lo que no quita que haya llamado mi atención sobre este aspecto narrativo, tan centrado en esas aparentes luchas de clases (y que se hallan presentes asimismo en las historias de Castti, con el sobrino heredero de la señora rica y los distintos barrios de la ciudad de Petalogélido; Throné y la citada Nueva Delsta… por no mencionar las misiones secundarias), que al final no llevan realmente a ningún sitio.

Publicado en Destacadas, JRPG / Aventura y etiquetado , , , , , , , , , , .