Star Wars: El ascenso de Skywalker, un ¿punto final? con momentos épicos y algo de trampa

J. J. Abrams no lo tenía fácil. Tras la repentina salida de Colin Trevorrow de la dirección del noveno y último episodio y la muerte de Carrie Fisher (quien a todas luces desempeñaría un papel principal en esta entrega), decidió retomar las riendas tras su inicio con El despertar de la Fuerza y cerrar la trilogía y la saga con El ascenso de Skywalker.

Para escribir el guión eligió a Chris Terrio, quien ya había trabajado junto a Ben Affleck en Argo y a Zack Snyder en Batman v Superman, dando origen a una narrativa que resulta quizás lo peor de la película por su barroquismo y sus irregularidades, con una primera parte que, de verdad, no da respiro. Pero del estilo que uno se pregunta si los personajes no deberían parar a comer o echarse una siestecita.

Tras este inicio sigue un segundo acto más intenso y un final que ya es el colmo del horror vacui, con apariciones de última hora, regresos inesperados, villanos que cambian de planes sobre la marcha y más regresos inesperados… Lo que puede hacerle parecer un despropósito. Por suerte, el irregular ritmo y la sobrecarga van acompañados de momentos épicos, tensos, dramáticos y románticos… Y nostalgia. Mucha nostalgia.

Los que más sobresalen (para variar) en El ascenso de Skywalker son Rey y Kylo Ren, con una Daisy Ridley y un Adam Driver que siguen desprendiendo esa química que los lleva de enemigos que no pueden ni verse a tensión sexual no resuelta (y algo más). El arco argumental de estos dos personajes ha sido quizás el más constante de esta trilogía.

Star Wars: El ascenso de Skywalker. Disney y Lucasfilm.

Ridley también desprende buena química con John Boyega (Finn) y Oscar Isaac (Poe Dameron, quien por cierto a su vez tiene buena química hasta con una roca de Jakku). Suya es la primera y frenética parte de la película, donde la acción se atropella y no paran de soltar chascarrillos (alguno más afortunado que otro).

Mientras que el personaje de Poe está aquí más aprovechado, me temo que no podemos decir lo mismo de Finn, quien sigue encorsetado en la figura del secundario cómico (y pelín obsesionado con Rey). Lo mejor aquí, una vez más, el vínculo entre Boyega e Isaac, junto a las (breves, pero intensas) presentaciones de dos nuevos personajes: Zorii Bliss (Keri Russell, acompañada de un personajillo ciertamente hilarante) y Jannah (Naomi Ackie).

Una de las mayores complicaciones a la que se enfrentaba Abrams era cómo retomar el papel de Leia tras el fallecimiento de Fisher, optando por recuperarla con material rodado y no utilizado de otras películas, y hemos de decir que esto es algo que han resuelto sorprendentemente bien. Es verdad que algunos diálogos se perciben un poco inconexos y forzados, pero suyo es uno de los momentos más emotivos de la cinta, y esto es todo un logro.

Star Wars: El ascenso de Skywalker. Disney y Lucasfilm.

Leia no es la única cara conocida que hemos visto (sí, hay bastante fan service, uno mejor integrado que otro). Billy Dee Williams vuelve a ponerse la capa como Lando Calrissian y la verdad es que agradecemos su presencia, enérgica a pesar de la edad. También regresa Mark Hamill como Luke Skywalker en un momento breve pero sustancial (aunque nos preguntamos si a los fantasmas de la Fuerza les crecen las greñas). C3PO (Anthony Daniels) tiene aquí mayor peso argumental que en las dos anteriores entregas, lo que añade su característica vis cómica; y Chewbacca (Joonas Suotamo) protagoniza uno de los (breves) momentos más inquietantes del metraje.

Uno de los retornos más anunciados y esperados era el de Ian McDiarmid como el emperador Palpatine. Será con seguridad también uno de los más polémicos tras El ascenso de Skywalker. Digamos que su personaje es víctima de la sobrecarga que trae toda la película y especialmente el final, pero su presencia sirve (aparte de para el citado fan service) para cerrar una trama a nivel más global y que incluya a las precuelas, ya que hay, eso sí, decepcionantes «ausencias».

Uno de los elementos característicos de Star Wars son sus planetas, y aquí Abrams cumple su parte. Pasaana, Kimiji, Exogol… Algunos nos resultan más familiares que otros, pero sin duda la dirección artística en algunos de ellos es para tenerla en consideración.

Star Wars: El ascenso de Skywalker. Disney y Lucasfilm.

Decir que la banda sonora de John Williams es uno de los puntos fuertes de la película es caer en la redundancia. El compositor regresa aquí a sus 87 años y nos trae consigo temas ya familiares y otros nuevos. La experiencia no sería la misma sin su partitura y se perdería la mitad de la emoción en el camino. Hay un tema en especial, «Farewell», que nos pone los pelillos de punta al escucharlo.

No queríamos terminar la crítica sin aclarar que, si bien El ascenso de Skywalker rehuye de algunos de los temas planteados por Los últimos jedi (como hiciera aquélla con El despertar de la Fuerza, lo que sí denota una cierta falta de unión metanarrativa en la trilogía), está lejos de mandarle un «fuck you», como hemos llegado a leer. Hace referencias claras a acontecimientos sucedidos en el octavo episodio e incluso se da cierto cameo de unos bichitos bastante reconocibles.

En definitiva, El ascenso de Skywalker tiene fallos como película notorios, como son la ausencia de la personalidad que desprendía su antecesora, una narrativa con ritmo errático o conclusiones tramposas a alguna de sus tramas (no olvidemos que está Abrams tras la cámara y Disney tras el marketing). Sin embargo, lo compensa con fan service que hará las delicias de nosotros, seguidores de la saga (servidora también se llevó su parte del pastel) y momentos épicos y hasta emotivos, con alguna carcajada, sonrisa y hasta llanto. Al fin y al cabo, George Lucas no creó esta saga situada en una galaxia muy, muy lejana para contentar a los académicos (que inicialmente no dieron un duro por ella y la vapulearon), sino para seguir despertando a ese niño interior que ansía con visitar distintos mundos y acompañar a sus héroes por duros derroteros.

Luke, Lando y Leia vuelven para el episodio IX de Star Wars

Disney y Lucasfilm han confirmado que el rodaje de Star Wars: Episodio IX arrancará el 1 de agosto de 2018 en los Estudios Pinewood de Londres. J.J. Abrams, quien escribió el guion junto a Chris Terrio (Argo) regresa para dirigir la última entrega de la saga de Skywalker.

Los miembros del reparto que repiten incluyen a Daisy Ridley (Rey), Adam Driver (Kylo Ren), John Boyega (Finn), Oscar Isaac (Poe Dameron), Lupita Nyong’o (Maz Kanata), Domhnall Gleeson (Hux), Kelly Marie Tran (Rose), Joonas Suotamo (Chewbacca), y Billie Lourd (Connix). Al elenco del Episodio IX se incorporarán Naomi Ackie y Richard E. Grant, a quienes se unirán los veteranos actores de Star Wars Mark Hamill (Luke Skywalker), Anthony Daniels (C3PO) y Billy Dee Williams, que retomará su papel de Lando Calrissian.

El papel de Leia Organa volverá a ser interpretado por Carrie Fisher, utilizando material de archivo inédito de Star Wars: El despertar de la fuerza. «Amamos desesperadamente a Carrie Fisher», ha dicho Abrams, quien ha añadido que «nos resultaba imposible encontrar un final totalmente satisfactorio a la saga de Skywalker sin ella. No íbamos a buscar otra actriz ni utilizar un personaje creado por ordenador. Con el apoyo y la autorización de su hija Billie, hemos encontrado la forma de rendir homenaje a su legado y al papel de Carrie como Leia en el Episodio IX utilizando imágenes inéditas que rodamos juntos para el Episodio VII«.

El compositor John Williams, que ha escrito la música de todos los capítulos de la saga de Star Wars desde Una nueva esperanza en 1977, regresará a una galaxia muy, muy lejana con el Episodio IX. El estreno está programado para diciembre de 2019.

Sobre Luke, Leia y Lando

Definitivamente, de entre todo lo confirmado, nos quedamos con el ataque de nostalgia que supone la vuelta de Billy Dee Williams como Lando, añadiendo la incertidumbre de si el (todavía desconocido) personaje que interpretará Naomi Ackie estará vinculado a él de alguna forma.

Por otro lado, el que Luke regrese confirma su proyección como fantasma de la Fuerza, al igual que ya lo hicieran Obi-Wan o Yoda. La cuestión es, ¿se aparecerá ante Rey para seguir su entrenamiento? ¿A Kylo para atormentarlo y seguir su despedida («hasta luego, muchacho»)? ¿A los dos?

En cuanto a la reutilización de material rodado con Carrie Fisher como Leia, nos parece lo más acertado, aún a sabiendas de que seguramente suponga una breve aparición del personaje y/o una pronta muerte (al menos no fallecerá detrás de las cámaras y que lo anunciasen en los créditos iniciales, como temíamos la mayoría). Es algo arriesgado, teniendo en cuenta que puede salir algo «chapuza» de todo esto, pero tengamos fe en Abrams.

Hablemos de Kylo Ren/Ben Solo (Star Wars)

Star Wars: Los últimos jedi se estrenó el pasado 15 de diciembre y todavía está dando que hablar en redes sociales y medios varios, para bien y para mal. Teniendo en cuenta el lapso de vida de las novedades en Twitter o Facebook, es bastante. Uno de los temas centrales de los debates que la rodean es el personaje de su villano (¿o anti héroe?), tanto en el episodio siete como en el que nos ocupa: Kylo Ren, también conocido como Ben Solo, único hijo de Han y Leia, interpretado por Adam Driver. Avisamos de paso que se avecina un largo análisis con SPOILERS de Los últimos jedi.

Tanto J.J. Abrams (director de El despertar de la Fuerza y el Episodio IX) como Rian Johnson (director de Los últimos jedi) han dejado caer varias declaraciones sobre la ambivalencia del personaje de Kylo y CÓMO NO es Darth Vader, a pesar de que al ver su diseño es lo primero que nos trae a la mente. Así, Abrams comentó que tanto a él como a Kathleen Kennedy (presidenta de Lucasfilm) se les ocurrió Driver tras unas pocas pruebas de casting a algunos actores debido a su versatilidad, hasta el punto de que fue el primer miembro del reparto en ser anunciado al público. Johnson, por su parte, ha declarado, entre otros, que Kylo y Rey «son las dos partes de un protagonista».

De este modo, diseños aparte, Kylo Ren poco y nada tiene que ver con el prototipo de villano que era Vader, más allá de ser su nieto, que tenga una cierta admiración por él y, de hecho por eso, copiarlo en la apariencia y vestimenta.

Con quien sí guarda mayor similitud es con Anakin, tanto en el aspecto debajo de la máscara (cicatriz ahora incluida), como en la actitud de un muchacho muy poderoso que no sabe muy bien qué hacer con el papel que le ha tocado jugar, derivando en una enorme inestabilidad emocional. Porque, si algo tiene Ben en común con su abuelo, es que ambos son tremendamente emocionales, hasta el punto de traspasar los límites de la cordura y de inestabilizarse con cierta facilidad.

Si hacemos caso a las palabras de otros personajes a lo largo de las últimas dos cintas, Ben también guarda cierta similitud con Han (Snoke le dice que tiene el corazón de su padre), lo que no debería pasar desapercibido entre tanto trato negativo en Ben, incluyendo entre los miembros de su propia familia. De lo poco que hemos visto a Han y su hijo juntos, la relación entre ellos debía ser algo distante. El dueño del Halcón Milenario no sabe muy bien qué hacer con el niño poco después de nacer debido a su conexión con la Fuerza y años más tarde se dedica a enseñar a otros jóvenes pilotos más que otra cosa, según Bloodline, además de lo comentado por el propio Kylo a Rey. Sin embargo, y a pesar de la dramática deriva de los acontecimientos, Ben no odia a su padre, como también le dice a la muchacha. Si acaso, su muerte lo ha sumido aún más en la confusión emocional en la que estaba sumido.

Una víctima de abuso y un pésimo líder

Llegados a este punto, ¿qué sabemos realmente del pasado de Kylo Ren? Pues más bien poco. único hijo de Han y Leia, poderoso en la Fuerza desde el momento en que nació, según Abrams, Kylo es tan fuerte en el lado luminoso como en el lado oscuro, lo que rápidamente atrajo la atención de Snoke. Se ve que este ser lo acechó desde temprana edad, aunque no sabemos exactamente cuándo (¿infancia? ¿adolescencia?). Sea como sea, sus padres, bastante metidos de lleno en sus respectivas carreras (Han como piloto, como ya decíamos, y Leia como política de la nueva república), se dieron cuenta en algún momento de que estaban perdiendo a su hijo y decidieron mandarlo con Luke, quien había fundado una academia jedi con una docena de estudiantes,

Luke y Ben entrenaron juntos por algún tiempo, pero llegó un punto en que el primero tuvo una visión del segundo, donde Snoke ya había llegado a lo más profundo de su corazón, y por puro instinto durante un momento fue a matarlo mientras dormía. Evidentemente, Luke enseguida cayó en la cuenta de la atrocidad que estaba a punto de cometer y se detuvo, pero ya era tarde: su sobrino había despertado y lo había visto. Ben evidentemente se defendió y derribó a Luke, se llevó a algunos de sus estudiante (¿los caballeros Ren?) y al resto los mató, incendiando de paso su academia.

Ben Solo no era siempre un conflictivo muchacho que daba problemas. Extracto de la guía visual de Los últimos jedi, por Pablo Hidalgo

Es increíblemente significativo que en dicho momento Ben no acudiera a sus padres… sino a Snoke, lo que nos habla de que efectivamente el villano ya tenía una poderosa influencia sobre él. Sin embargo, si nos fijamos en la actitud de Snoke hacia Kylo tanto en el séptimo episodio como en el octavo (más en los pocos minutos que trata a Rey), nos damos cuenta de que el primero es tremendamente abusivo con el segundo, recurriendo a humillaciones psicológicas («el increíble Kylo Ren» con tono de sorna al burlarse que ha sido derrotado por una inexperta), emocionales (prácticamente lo obliga a matar a Han) y físicas (el rayo, la tortura a Rey).

Si sumamos esto último a la sensación de soledad y abandono que ha debido sentir Ben por los poderes con los que ha nacido, la temprana edad a la que Snoke debió empezar a contactarlo y el bagaje emocional que de por sí lleva en los genes, nos parece que demasiado bien está Kylo Ren después de todo.

¿Dónde está el mayor drama, entonces? En que, una vez liberado de Snoke, y de hecho habiéndolo asesinado él (pudo matar a Han, pero no a Rey), Kylo Ren ya debería estar libre para poder tomar mejores decisiones… solo que no lo está. Si nos fijamos, tras el asesinato del líder de la Primera Orden y de su guardia pretoriana, lo primero que hace Kylo es quedarse mirando fijamente el cadáver de Snoke. Claramente está en shock. Es probable que tenga estrés postraumático en ese mismo momento y en los años próximos.

Arte conceptual de Los últimos jedi, extraído de The Art of StarWars: The Last Jedi

Sin embargo, Rey, por quien acaba de dar dicho paso, le dice que salve a la Resistencia. Pero Kylo tampoco guarda aprecio hacia el grupo (los llama ladrones, asesinos y traidores en la cinta anterior), está hasta las narices de todo y quiere mandarlo al carajo. Una reacción, a priori, muy normal en alguien que aún está en shock. Rey choca con él en este punto y ya sabemos todos cómo sigue la cosa.

La rabieta posterior de Kylo Ren es bastante criticada, y no falta razón, pero tengamos en cuenta que la película está contada desde la perspectiva de «los héroes», y él está en el bando de «los villanos». Si fuera al contrario, sinceramente, tampoco le faltarían motivos al muchacho para estar cabreado, más teniendo en cuenta lo fácil que es que salte. La aparición de Luke empeora aún más las cosas, pues Kylo odia a su tío: es el principal culpable de su actual situación, con la cual no parece que esté radiante de felicidad. Tanto es así, que ni se da cuenta de que lo que está frente a él ni tan siquiera es REAL, ya que Luke no deja marcas de pisadas en la sal que cubre Crait (solo por poner un ejemplo).

Toda esta secuencia también sirve para mostrarnos otra cara de Kylo: la de un pésimo líder. No sabe dar órdenes (Hux se le intenta imponer a la mínima y en cualquier momento me huelo un Frank Underwood con él) y se guía puramente por sus emociones, no por la estrategia ni por la ideología de la Primera Orden, la cual creo que se la trae más bien al pairo (cuando se le propone a Rey, entre otras cosas le dice que acaben juntos con la organización). Todo ello concluye en un gran fracaso para «los malos» y con los escasos miembros de la Resistencia huyendo con vida, lo que no es poco.

Por lo tanto, en lo personal veo poco probable que haya un gran salto temporal entre Los últimos jedi y el noveno episodio, entre otras cosas porque no veo a Kylo Ren gobernando la Primera Orden durante mucho tiempo sin graves consecuencias, comenzando para él mismo. Hux sigue rondándole y la última mirada que le dirige antes de finalizar la película no es precisamente de aprecio. Puede que el general no sea poderoso en la Fuerza, pero dentro de la Primera Orden tiene más contactos que Ren seguro (a quien se ha mostrado que temen, pero no respetan), por lo que es fácilmente imaginable la organización de una especie de golpe de Estado.

No es tampoco poco significativo que la última escena protagonizada por Kylo Ren en Los últimos jedi lo muestre arrodillado ante Rey, agarrando los dados de la suerte que pertenecieran a su padre, con gesto triste y actitud arrepentida, mientras un rayo de luz lo ilumina en medio de la oscuridad.

Esto ya lo hemos visto en otra parte…

La historia de lo que llevamos hasta ahora de Ben Solo y Kylo Ren no es única en el mundo del entretenimiento. De hecho, los seguidores de anime, manga y videojuegos procedentes de Japón tienen ejemplos varios. Cáspita, hasta Elza de Frozen podría servir de referencia en ciertos puntos. A partir de aquí, habrá SPOILERS de Naruto y de Code Geass.

El más llamativo es probablemente el de Sasuke Uchiha (Naruto), protagonista primero y villano después, empezando la serie como compañero, rival y amigo de Naruto para después volverse su enemigo, movido primero por las ansias de venganza personal y por, adivinad, estrés postraumático posterior, hasta el punto de querer acabar con todo el orden ninja establecido, el cual percibe como corrupto, aunque para ello tenga que matar a Naruto, a Kakashi, a Sakura o a quien haga falta.

Por suerte, Naruto nunca pierde del todo la esperanza en él (aunque hay momentos que casi), y en un enfrentamiento final donde ambos pierden sus brazos, Sasuke «ve la luz» y vuelve al lado luminoso (valga la redundancia). Tras unos años de exilio, y sin llegar a recuperar nunca su brazo, Sasuke acaba viviendo en Konoha con Sakura y ambos tienen una hija, Sarada, restaurando asimismo el clan Uchiha (del cual solo quedaba él).

La otra gran similitud percibida es con Lelouch Lamperouge, protagonista de Code Geass, aparentemente un estudiante normal que un día y de forma fortuita se ve ¿bendecido? ¿maldecido? con el poder del geass, el cual causa que todo aquel que lo mire directamente a los ojos siga sus órdenes. Lelouch decide usar este poder principalmente como medida de venganza personal, adoptando un alter ego enmascarado (vaya) conocido como Zero, con el cual también se erige como una figura justiciera frente al opresor imperio de Britannia. Sin embargo, Lelouch se va obsesionando con su venganza hasta el punto de derribar a todo aquel que ose interponerse, aunque sean sus amigos, parientes o similar.

Llegado el momento, Lelouch llega hasta sus padres, el emperador de Britannia, objeto principal de su venganza, a quien asesina. ¿Qué hace entonces el chico? Se auto erige como máximo dirigente y se vislumbra como la nueva principal figura opresora. Al final, Lelouch acuerda con su amigo Suzaku su asesinato ante el público y, en teoría, muere (aunque algunos teorizan que es una farsa para escapar con C.C. a la vez que le deja un mundo mejor a Nunally, que era su deseo). Sea como sea, parece que Lelouch volverá para una tercera temporada.

Podríamos hablar de otras representaciones de estos personajes más antihéroes (o héroes byronianos) y de sus contrapartes heroicas sin artificios, como Riku y Sora en Kingdom Hearts, Seifer y Squall en Final Fantasy VIII, Delita y Ramza en Final Fantasy Tactics, etc. En definitiva, parece ser un concepto que encanta a los asiáticos.

Lo que en mi opinión queda claro es que Kylo Ren se redimirá de alguna forma (¿dónde estaría la gracia de la trilogía entonces?), pero si en el camino sobrevivirá o si llegará totalmente íntegro ya es otro cantar… La narrativa está poniendo bastante énfasis en que el objetivo es obtener el verdadero equilibrio en la Fuerza, no que prevalezca un lado sobre el otro, que es en donde fracasaron las anteriores trilogías, con la oscuridad prevaleciendo en las precuelas y la luz en la original (como bien dirían en Kingdom Hearts, a más luz haya, mayor será la oscuridad). Ben Solo debe hallar ese equilibrio en él mismo, pero también entre él y Rey.

Podríamos hablar extensamente también de la interesante relación entre Kylo Ren y Rey, de qué papel puede jugar en el destino de la galaxia como último Skywalker (¡y Solo!), de cómo su historia parece ser la misma que la de Anakin pero a la inversa («terminaré lo que tú empezaste»), y más cosas, pero eso nos llevaría a escribir nuestra propia trilogía. Lo que sacamos en claro es que Kylo Ren/Ben Solo es, para nosotros, el personaje más interesante de esta nueva saga. Esperamos que sepan darle una conclusión satisfactoria.

Star Wars: Los últimos jedi (crítica sin spoilers)

Han pasado unas pocas horas desde nuestro primer (porque habrá más) visionado de Star Wars: Los últimos jedi (The Last Jedi, Rian Johnson), las suficientes como para ordenar algunas ideas en mi cabeza y llegar a una conclusión sobre el grado de satisfacción que deja su resolución.

Empezaré diciendo que ya era seguidora del trabajo de Rian Johnson, destacando de su filmografía Brick y la más conocida Looper. Por lo tanto, sabía que no es un director al uso, y eso se nota fundamentalmente en Los últimos jedi. Olvidaos de J.J. Abrams (por ahora, ya que regresa para hacerse cargo del Episodio IX) y de si este nuevo capítulo iba a ser un refrito de El imperio contraataca porque, guiños aparte, no tienen nada que ver.

Para empezar, la acción de la película, que se sitúa unos pocos minutos (quizás horas en el caso de la trama de la Resistencia) tras el final de El despertar de la Fuerza, es francamente distinta a lo que nos tiene acostumbrados las cintas de esta saga. No es que no haya escenas de batallas, que las hay (por cierto, una de ellas en concreto se ha convertido en mi absoluta favorita), sino que los tiempos que maneja la narrativa no son los habituales.

Así, tenemos por un lado dos tramas principales: la citada de la Resistencia contra la Primera Orden, más al uso de una cinta comercial de Hollywood y que parece que abarca unas horas o a lo sumo días; y otra que gira en torno a la Fuerza, más pausada y mística, que si me dicen que se lleva a cabo en varias semanas me lo creo.

Ambas confluyen en el tercer acto, donde se suceden varias sorpresas que seguramente desencajarán la mandíbula a más de uno y que nos deja un par de escenas para el recuerdo, no solo por su belleza visual sino además por su impacto en todo el universo de Star Wars.

Hablando de belleza, la cinematografía que maneja Johnson es probablemente lo mejor de toda la película, y en donde claramente deja más impreso su sello personal. Hay planos que se quedan en la retina (un par de ellos en concreto los tengo aún MUY presentes) y coreografías muy muy MUY bien organizadas, sin llegar a lo artificial de Darth Maul contra Obi-Wan/Qui-Gon ni a lo limitado de las peleas cuerpo a cuerpo de la trilogía original.

A la cinematografía le siguen los personajes y, con ello, las interpretaciones. No nos engañemos, Star Wars: Los últimos jedi es una película de personajes, y seguramente por ello en algunos apartados da la sensación de que no esté pasando realmente mucho. Evidentemente, sí que pasa, pero en la introducción de su psique, otra de las novedades que nos trae Johnson. En este apartado brillan por encima del resto (no necesariamente en orden) Adam Driver (Kylo Ren), Daisy Ridley (Rey) y Mark Hamill (Luke Skywalker), que se lucen especialmente. De hecho, creo que las mejores escenas (exceptuando una en concreto que me pareció bellísima, también cinematográficamente hablando) son en las que aparecen ellos, juntos o por separado.

Lamentablemente, en contraste el resto queda bastante opacado. Por ello, de las nuevas introducciones, solamente Kelly Marie Tran (Rose) parece la única que tiene algo que aportar (y además es adorable), mientras que Laura Dern (vicealmirante Holdo) y Benicio del Toro (DJ), aunque solventes como siempre, se difuminan tras dar un par de lecciones.

Los personajes de anteriores entregas (exceptuando a los citados Kylo, Rey y Luke) también sufren con esta difusión, y así por ejemplo Phasma (Gwendolyne Christie) nunca acaba de despegar y Poe Dameron (Oscar Isaac), aunque mole, me parece el personaje más arquetipo de Hollywood posible. Finn (John Boyega) y Leia (Carrie Fisher) cumplen más con su papel, aunque no les de mucho tiempo a brillar. Lamentablemente, Episodio IX iba a ser «la película de Leia», lo cual añade un sabor bastante agrio al asunto. De Snoke (Andy Serkis) mejor no diremos nada, mientras que Hux (Domhnall Gleeson) es ese personaje que adoramos detestar y que al final hasta nos da cierta lástima.

A pesar de que, como decíamos, Johnson deja su impronta en la película, Los últimos jedi no está exenta de guiños hacia los fans de toda la vida, y alguno de ellos es probable que mueva a más de uno a las lágrimas. De todos modos, no nos pareció que las referencias a las anteriores películas (incluyendo a las precuelas, por cierto) eclipsaran nada, así que por mí todos son más que bienvenidos, y añaden asimismo una cierta área gris a la mitología de Star Wars que en mi opinión era muy necesaria.

De este modo, llegamos a un panorama donde lo que es bueno y qué es malo no queda del todo claro y al final no sabes muy bien a qué personaje apoyar, ataques de nostalgia aparte. Esa ambigüedad y esas tonalidades grises pensamos que pueden llegar a dar muchísimo juego de cara al noveno episodio, si Abrams sabe jugar bien sus cartas (el hecho de que haya halagado el guión de Johnson es para mí una buena señal en este sentido).

En definitiva, y a falta de digerir más aspectos de la cinta y de superar más visionados (que conllevarán análisis, desde luego uno de Kylo ya está en el aire), sabemos que esta película va a crear divisiones entre los fans, lo cual es sinónimo de que arriesga, pero en donde más brilla es en su hermosa cinematografía y en la profundización de algunos de sus personajes. Kylo Ren y Rey se comen la cinta, Johnson podría hacer dos horas de ellos dos mirándose y no nos cansaríamos (la química entre Ridley y Driver también tiene buena parte de culpa).

P.D.: Sobre los nuevos animalitos para vender merchandising, la verdad es que apenas se nota su presencia, así que están bien.

P.P.D.: Si Rian Johnson sale un día (si no lo ha hecho ya) diciendo que es fan del anime o de los videojuegos procedentes de Japón, me lo creería.

Qué nos dice el último tráiler sobre Star Wars: Los últimos jedi

El último tráiler de Star Wars: Los últimos jedi ha llegado con bombo y platillos, acompañado de un nuevo póster y de la salida a la venta de las entradas.

Teniendo en cuenta el secretismo que la ha acompañado durante toda su producción, nos ha sorprendido (para bien) la cantidad de nueva información que deja entrever este avance… sin llegar, ni mucho menos, a contarnos toda la película (de hecho, juegan bastante al despiste). ¿Qué novedades e información que (quizás) sea importante nos trae?

Más Kylo Ren

El personaje interpretado por Adam Driver estaba siendo lo más ocultado en la promoción que ha estado saliendo hasta ahora, con el actor estando ausente en casi todos los eventos y relegando su participación en reportajes casi a un segundo plano (siempre bastante por detrás de Luke y Rey). Solo el maravilloso primer póster presagiaba su importancia dentro de la trama.

Al cartel lo acompaña ahora este tráiler, donde Kylo es el personaje con mayor exposición, además de Rey.

Ya en el principio, lo vemos guiando a un comando de soldados imperiales en lo que parece ser Crait, arrodillado ante Snoke (o así parece), destrozando su casco o contemplando el exterior desde un hangar que, si nos fijamos bien, parece el mismo que posteriormente aparecen destruyendo Finn y Rose.

Pero eso es solo la base. Lo más importante sobre Kylo que se puede percibir a través del tráiler es su duda/sufrimiento a la hora de tener que disparar contra el sitio donde se halla Leia (no puede) y que parece forjar una especie de alianza o entendimiento con Rey.

Esto último se deja entrever justo al final del tráiler, cuando Kylo le tiende la mano a quien parece ser Rey, y durante un diálogo anterior en el que él le dice a una persona (a todas luces la misma muchacha) que tienes que destruir tu pasado para poder conocer tu papel a jugar dentro de la partida.

Así pues, parece que tendremos a un Kylo Ren si acaso más confuso y dañado que en El despertar de la Fuerza, que incluso deja la puerta a un posible inicio de redención.

Rey, sus dudas y su poder incontrolable

Como decíamos, el personaje interpretado por Daisy Ridley es el que más podemos apreciar, lógico si tenemos en cuenta que es la nueva protagonista.

De entre lo más llamativo, por un lado sus escenas de entrenamiento y con Luke, quien parece temer el poder de la joven (así lo afirma también en lo que dice en el tráiler); por el otro lo que ya comentábamos de un acercamiento a Kylo Ren (al final Rey parece casi suplicarle a alguien -que bien podría ser también Skywalker- que le muestre su papel en todo este entramado en el que se ha visto envuelta, justo antes de que Kylo tienda la mano) y, sobre todo, una escena donde está siendo claramente torturada por Snoke, dejando el interrogatorio de Kylo Ren en la anterior entrega en un mero juego de niños.

El tráiler deja la sensación de que Rey anda todavía bastante descolocada con todo esto y que probablemente le cueste controlar sus poderes, lo que le causa desazón y puede que hasta frustración. El citado temor de Luke no parece ayudar a la causa. Así pues, el camino que acabe tomando Rey parece que definitivamente tendrá más intringulis que sus misteriosos orígenes.

¿Nuestra apuesta? Snoke le dice las palabras del principio del avance (esas sobre «siempre vi en ti un tremendo poder…) a Rey, a quien intentará llevar a su terreno (escena de la tortura). Antes de eso, como sabemos, Rey convencerá a un reticente Luke para que la entrene (de ahí el «necesito que alguien me diga cuál es mi lugar en todo esto», que definitivamente sucede en la primera mitad de la película por el aspecto de la muchacha y que probablemente vaya dirigido al jedi). Skywalker aceptará con reparos y receloso, lo que llevará a que algo ocurra entre ellos y que hará a Rey dudar, una vez más, de cuál es su papel y qué hacer (entrada en escena de Kylo, que sabemos por el rodaje que en algún momento caerá sobre Ahch-To, y que probablemente le dirige ese «tienes que matar tu pasado» a ella). A partir de ahí, solo Johnson dirá.

Luke y Leia, hermanos separados

Todo un aire de tragedia parece envolver a los mellizos a lo largo del tráiler. De Leia se prevé ya su trágico final, adelantado por el abrupto y fatídico fallecimiento de Carrie Fisher, mientras que a Luke lo acompaña un halo de oscuridad, dejando claro que ya no es el optimista jovenzuelo de la trilogía original. Está dañado (flashback incluido) física y emocionalmente y se lo ve cansado y harto de estarlo. Parece que en un momento le espeta a Rey (a quien en principio se niega a entrenar y a quien teme) que las cosas no están saliendo como ella esperaba, con un tono más de enojo que de otra cosa.

Un duelo esperado

La trama de la Resistencia no asoma mucho por el tráiler, pero sí lo hace una escena especialmente llamativa: Finn contra Phasma. Parece que ambos resolverán sus cuentas pendientes en esta octava entrega, y que el personaje de Gwendoline Christie estará algo mejor aprovechado que en El despertar de la Fuerza (lo cual es fácil).

Chewbacca, porgs y el Halcón Milenario

Algo que ya se ha visto para aquellos que hayan estado siguiendo los reportajes de Entertainment Weekly y similares es al famoso wookie entreteniéndose ahora con estos nuevos animalillos, incluso a bordo del emblemático Halcón Milenario.

La nave vuelve a volar en este avance, aunque seguimos sin saber quién la pilota. Lo más previsible, claro está, son el propio Chewbacca y Rey, pero estando por ahí hasta Kylo Ren con unas buenas habilidades de pilotaje heredadas, nunca se sabe.

Un apartado técnico espectacular

Nada nuevo en una película de Star Wars, que lleva siempre buenas cantidades de dinero invertidas detrás, pero Rian Johnson ha demostrado hasta la fecha no ser un director de blockbusters al uso, con Brick y Looper en su currículum.

Si algo demuestra este tráiler es que Johnson no se ha contenido en esta ocasión, mostrando una puesta en escena y una fotografía maravillosas y espectaculares. Tenemos muchas ganas de ver Crait. Qué carajo, ansiamos que sea ya 15 de diciembre.

Así estarán los personajes de Star Wars: Los últimos jedi al comienzo de la historia

La revista Entertainment Weekly ha lanzado una serie de artículos relacionados con la próxima entrega de la franquia, Star Wars: Los últimos jedi, dirigida por Rian Johnson (Looper, Brick) y que saldrá en cines el próximo 15 de diciembre.

Los artículos nos sitúan básicamente en cómo y dónde estarán los personajes durante el inicio de esta octava entrega, empezando por Luke (Mark Hamill) y Rey (Daisy Ridley… recordamos que el final de El despertar de la Fuerza nos dejó con estos dos recién encontrándose en el planeta Ahch-To y la continuación la sigue tan solo unos minutos después). Al parecer, nuestro ya no tan joven Skywalker no estará muy emocionado de ver a la muchacha y a su sable láser, dejándola inicialmente de lado, ya que prefiere seguir con sus cosas. En palabras de Hamill, Luke ya no es el joven optimista de antaño y piensa que quizás ha estado malinterpretando a la Fuerza durante todos estos años:

«(Luke) cometió el enorme error de creer que su sobrino era el elegido, por lo que invirtió todo lo que tenía en Kylo, similar a como Obi-Wan había hecho con mi personaje. Y él es traicionado, con trágicas consecuencias. Luke se siente responsable de eso, siendo el primer obstáculo que él tiene para volver a unirse al mundo y a la jerarquía jedi, ¿sabes? Es esa culpa, ese sentimiento de que es su culpa, que no había detectado la oscuridad en él hasta que ya era tarde».

La llegada de Rey podría dar la vuelta a las cosas, a pesar del rechazo inicial, que hará mella en su pasado de abandono (Rey fue dejada sola por unos padres desconocidos en Jakku). Más aún cuando todos los nuevos personajes que había ido conociendo en El despertar de la Fuerza la habían recibido con los brazos abiertos, especialmente Han, creando un contraste absoluto con «el gruñón» Luke. No obstante, Rey es una joven bastante esperanzadora, e intentará que Skywalker acuda en ayuda de la galaxia, que lo necesita.

Luke y Rey no estarán solos en Ahch-To, ya que los acompañarán una serie de nuevas especies con formas de «mini pingüinos», denominados «porgs», por un lado, y otros que se asimilan a unas tortugas disfrazadas de monjas (no es casual), conocidas como «las cuidadoras». Y Chewbacca, por supuesto.

Los porgs son nativos del planeta al que va a parar Luke y en donde se encuentra el primer templo jedi, que a su vez se encargan de custodiar «las cuidadoras» desde hace miles de años. Éstas últimas pueden comunicarse con Luke a través de lo que Johnson ha descrito como «una especie de habla escocesa en pez», pero no se encuentran especialmente emocionadas con que el jedi esté en la isla, simplemente «toleran» su presencia.

En Ahch-To hallaremos también unas pinturas rupestres relacionadas con la mitología y el pasado de los jedi, asegurando Johnson que la película abarcará esos temas, aunque no pretende fundar una nueva religión ni nada por el estilo.

De Ahch-To a la rebelión

En El despertar de la Fuerza también conocimos a Finn, interpretado por John Boyega. Al final de la anterior entrega, este personaje había quedado seriamente herido por Kylo Ren, dejándolo en coma. Cuando al fin despierta, en Los últimos jedi, Finn sigue teniendo esas ganas de salir huyendo de la Primera Orden, al igual que antaño. La muerte de Han a manos de su hijo y la lucha contra éste último solo ha conseguido aterrorizarlo aún más.

Sin embargo, esto empieza a cambiar cuando se topa con Rose Tico (nuevo personaje interpretado por Kelly Marie Tran), del servicio de mantenimiento. La muchacha piensa que él es un héroe por haber participado en la destrucción de la base Starkiller. Así lo describe Boyega:

«Él es un héroe para gente como Rose, que luchan junto a la Resistencia porque la Primera Orden ha destruido sus hogares».

Por el otro lado, Rose es una «don nadie», no solo frente a Finn, sino incluso al lado de su hermana mayor, Paige (Veronica Ngo), una francotiradora que lucha junto a Poe Dameron (Oscar Isaac). Esto empezará a cambiar tras el fortuito encuentro con el que era soldado imperial, que también empezará a hacer mella en Finn, quien ante la visión de esta chica de que él es un chico valiente y comprometido con la causa, intentará esforzarse más, aunque la idea de fugarse no desaparecerá del todo. De alguna forma, ambos terminan en Canto Bight, un nuevo planeta que vendría a ser un «Las Vegas con alienígenas».

En la Resistencia tenemos a otros dos personajes esenciales: Leia y Poe. La hermana de Luke, acostumbrada desde el comienzo de la historia a la pérdida (sin duda es la más fuerte de los Skywalker), no cesa en la lucha por la libertad de la galaxia. Sin embargo, la Resistencia se encuentra dividida tras la destrucción de la República, dejándola en un puesto muy vulnerable. A ello se le une la pérdida sufrida por Leia tras la muerte de Han a manos de su hijo.

Sin embargo, la líder de la Resistencia siempre encuentra esperanza, y parece que esta vez la hallará en Poe Dameron, cuya relación no es meramente profesional, sino familiar. Leia además sabe que no estará ahí para siempre y piensa en quién dejar el legado, viendo en Poe al candidato perfecto. Por eso, quiere que éste no se conforme con ser un piloto, sino también una persona sabia y sensata. Isaac lo describe del siguiente modo:

«Poe es en algunos aspectos un hijo adoptivo para Leia, pero también creo que ella ve en él el potencial para ser un verdadero y gran líder de la Resistencia».

El conflicto estará servido con la entrada de la vicealmirante Holdo (Laura Dern), quien conoce a Leia de antaño, pero aún no sabemos bien si esta especie de amistad continuará siéndolo o, por el contrario, acabará en rivalidad.

Lo que sí parece cierto es que Los últimos jedi tendrá un enfoque más político que el resto de películas de la saga, ya que Johnson siempre parece hacer bastante hincapié en este aspecto de la historia (y películas que le han servido de inspiración como el clásico Almas en la hoguera así parecen corroborarlo). A nosotros la verdad que esta arista nos emociona bastante y queremos saber ya más de Leia, Poe, Holdo, Finn, Paige y Rose.

Los malos (o no tan malos)

El líder supremo Snoke (Andy Serkis) tan solo apareció unos pocos minutos de metraje en la anterior entrega, a través de un holograma, pero ya sabemos que es «el gran villano en la sombra» de esta nueva trilogía (al menos aparentemente).

Sin embargo, Snoke no llega solo, siendo acompañado por una guardia pretoriana vestida de rojo y que se asimila a la guardia del Emperador en la trilogía clásica. Johnson resalta, no obstante, que estos nuevos soldados sí pelean, y saben cómo hacerlo. Su papel es básicamente el de ser los guardaespaldas de Snoke.

En cuanto a éste último, conoceremos más de él y sus objetivos en Los últimos jedi, pero los que estén ansiosos por conocer su origen tendrán que esperar; aunque, sí, tendrá más minutos de metraje que en El despertar de la Fuerza.

La octava entrega de la saga nos introducirá otro nuevo personaje cuyas alianzas todavía no están muy claras. Se trata de un hombre conocido simplemente (por ahora) como DJ (Benicio Del Toro). Por ahora, lo único que conocemos de este enigmático personaje es que se topa con Finn y Rose en Canto Bight. ¿En qué circunstancias? No sabemos. Básicamente, DJ no lucha por ningún bando, sino para su propio beneficio (económico).

Por ahora, este es el escenario presentado para los personajes (viejos y nuevos) en la próxima entrega de Star Wars. Lamentablemente, no ha salido nada (aún) sobre Kylo Ren, Hux o Phasma; aunque hay esperanzas de que se comente algo hoy (ya que todavía queda al menos un artículo pendiente de salida).

ACTUALIZADO: Sobre Kylo Ren, veremos especialmente cómo le ha afectado la muerte de su padre (asesinado por él mismo) y la humillación tras la derrota a manos de Rey. Para Johnson, su caída en el Lado Oscuro es comparable al tránsito del adolescente, pero de una forma mucho más insana. Al final, el director de Los últimos jedi resumen la relación entre él y Rey como «las dos cara de la luz y la oscuridad», mientras que Ridley afirma que su personaje se tomará el parricidio de forma mucho más personal.

«Ella no comprende a Kylo. Cuando todo lo que deseaba eran unos padres, ¿por qué alguien que los tiene haría algo así? Es algo más allá de su comprensión, es ridículo. Así que siente el dolor por la pérdida y además está la furia».

Lo que sí comparten ambos es un interés por el pilotaje, ya que veremos a Kylo a los mandos de un TIE Silencer similar al que tenía (cómo no) Darth Vader.

También ha habido ocasión para comentar algo sobre la capitana Phasma (Gwendoline Christie), que volverá para seguir complicándole las cosas a Finn. Puede que no sepamos mucho más sobre Phasma en esta octava entrega (para eso están la novela y la serie de cómics), pero sus apariciones serán más amenazantes y, en fin, presentes, que en El despertar de la Fuerza.

Las familias

Uno de los debates más encendidos en la red tras el final de la séptima entrega de la franquicia es quiénes son los padres de Rey. Este tema se abordará en Los últimos jedi, pero quizás no de la forma que esperamos. Para Johnson, el asunto es importante en el sentido de que también lo es para Rey, para que ella pueda aprender de ese pasado y no volver a caer en lo mismo en el futuro.

Para Ridley, su personaje encontrará las respuestas que está buscando, y descubrirá que al final no le importa tanto, mientras que lo esencial sea tener un lugar al que se pertenece. Al final, más allá de la familia y del punto de partida, lo importante es el destino (y esto lo dice también la actriz).

«Lo que es maravilloso es que no está tan claro, quién es bueno y quién es malo, y no soy yo diciendo «oh, dios mío, algunas personas se están volviendo malvadas». Siempre hay lugar para que la gente mala tome buenas decisiones, y viceversa»

Otro personaje principal con pasado misterioso es precisamente Finn, del cual también conoceremos más. Especialmente (probablemente) en su esperada confrontación con Phasma (recordamos que los soldados imperiales eran robados siendo bebés y entrenados por la Primera Orden).

No podemos terminar el artículo sin tocar (aunque sea brevemente) el periodo de luto por el que estará pasando Chewbacca tras la pérdida de Han Solo (quien por cierto estará «presente de alguna forma»). Nuestro querido wookie estará más serio y protector con Rey que de costumbre, lo que no quita que siga siendo nuestro peludo favorito y resiliente de siempre.

Salta a la red la descripción de un primer (posible) avance de Star Wars: Los últimos Jedi

Parece que todavía faltan unas semanas (¿en la Star Wars Celebration de abril?) para poder ver el primer avance oficial de Star Wars: Los últimos Jedi, pero algunos afortunados ya han tenido acceso a una pequeña muestra por parte de Disney y Lucasfilm, concretamente durante una reunión en Denver con acreedores. Daniel Miller, de LA Times, habría estado presente y esto es lo que ha podido avanzar a través de su cuenta de Twitter (advertimos que parecen ser filtraciones bastante fiables, por lo que, quien quiera mantenerse lo más alejado de SPOILERS posible, se retire ahora):

  • Luke le pregunta a Rey «¿Quién eres?» Después se la vería a ella manejar hábilmente el sable láser.
  • También aparecen: Finn, Leia y Chewbacca.
  • Se pueden observar distintos tipos de paisajes: montañas, desierto, bosques.
  • Una escena de un X-Wing bamboleándose en el aire, bajo el ataque de una nave gigantesca. Parecería un pajarillo herido.
  • La General Leia aparecería un solo segundo en traje militar y sin decir una palabra.
  • Un personaje (no dice cuál) diría en un momento del vídeo la frase «es ahora o nunca».

luke-skywalker

Por otro lado, y según recopilan en los foros de The Jedi Council, podría verse en el mismo vídeo, sin ningún orden en particular, lo siguiente:

  • Luke dentro de una cabaña en Ahcho-To preguntándole «¿Quién eres?» a Rey.
  • Finn en uniforme de la Primera Orden sobre un puente dentro de un destructor estelar (o una gran nave).
  • General Leia.
  • Algunas escenas de Rey entrenando con el sable láser.
  • Capitana Phasma.
  • Chewbacca rugiendo.
  • Poe en el interior de la cabina de su X-Wing gritándole «es ahora o nunca» a BB8.
  • Naves volando en el espacio.
  • Un X-Wing a punto de estrellarse.

Además, parece que en la demostración de Disney se verían varios paisajes no vistos hasta la fecha en una cinta de Star Wars, lo que promete nuevos y desconocidos planetas. ¿Lo más llamativo de todo esto (aparte del aparente desconcierto de Luke con Rey)? Que no habría ni rastro de Kylo Ren. Tampoco se lo ha podido ver en las escasas muestras de merchandising que han aparecido hasta la fecha. ¿Lo estarán ocultando por algún motivo en especial? Cada vez falta menos para saberlo.

leia el despertar de la fuerza

¿Y si Star Wars hubiera sido diferente?

Sabemos que todos los procesos de producción (más si son grandes producciones) conllevan cambios. Muchos. Las ideas surgen, caen, se transforman. Star Wars (o La guerra de las galaxias) no es diferente. De la cabeza de George Lucas salió la historia de un joven granjero apellidado Starkiller, cuyo padre había fallecido a manos del imperio y guiaría espiritualmente a su vástago hasta convertirlo en caballero jedi. Leia no era la hermana de Luke, y Han Solo podría haber terminado muerto.

Estos son solo algunos de los ejemplos que vienen a la mente. Lo cierto es que George Lucas iba montando la historia un poco sobre la marcha. Cuando se realizó la primera película de todas (al principio conocida como simplemente «Star Wars», añadiéndole años más tarde el título: «Episodio IV: Una nueva esperanza») ni tan siquiera el amigo de Lucas, Steven Spielberg, apostaba por ella. Como al final resultó ser todo un éxito, enseguida se lanzaron a por la secuela: nacía El imperio contraataca. El guionista elegido para plasmar las ideas del bueno de George fue Leigh Brackett. En los primeros escritos, Skywalker Senior guiaba espiritualmente a su hijo Luke para poder hacer frente al enemigo, el imperio y los sith, en cuyas filas se encontraba Darth Vader, un jedi caído. Entre las revelaciones que le haría el padre al hijo, se encontraba la existencia de una hermana desaparecida. Su nombre original era Nellith Skywalker y había sido enviada a otra galaxia para protegerla de Vader y del emperador. Efectivamente, durante la producción de El imperio contraataca, Lucas llegó a la conclusión de que habría un total de nueve películas, de las cuales estaban realizando la trilogía de en medio. La idea era que Nellith apareciera o bien en El retorno del jedi, o bien en la siguiente trilogía.

Mención de Nellith, hermana de Luke, en el guión original de El imperio contraataca

Mención de Nellith, hermana de Luke, en el guión original de El imperio contraataca

¿Por qué entonces nunca se llegó a la búsqueda del personaje, quedando todo en Leia como hermana de Luke? Al parecer, Harrison Ford habría sido el principal causante, aunque fuera indirectamente. Como muchos fans de Star Wars sabemos, el actor que interpretaba a Han Solo no quería que su personaje sobreviviera. De hecho, esperaba que lo matasen definitivamente al congelarlo en carbonita. Como no fue así, Ford le suplicó a George que lo matasen (en la ficción, claro) en El retorno del jedi. Viendo que su personaje estrella se le escapaba de las manos, Lucas vio que tenía dos opciones: matar a Han (o seguir sin él de algún modo) y realizar la nueva trilogía, o cerrarlo todo como buenamente podía durante la tercera película de «la trilogía de en medio». Evidentemente, eligió lo segundo. Ya tendría tiempo de convencer a Ford para realizar más películas de la saga con el paso de los años. O eso debió pensar.

De este modo, podemos observar que Mark Hamill (Luke) y Carrie Fisher (Leia) rodaron varias escenas de contenido romántico (aparte del famoso beso «para encelar a Han»). A saber: el beso de Leia a Luke durante Una nueva esperanza, que quedó siendo en la mejilla, originalmente era en la boca; en El imperio contraataca (aparte del citado morreo) tienen un «delicado acercamiento» interrumpido por C3PO, además del pico que le da Leia a Luke al final cuando le están curando la mano; finalmente, en el escrito de Brackett, había una escena donde Luke animaba a Leia a irse con Han y ambos compartían otro beso. Cómics y material no canónico aparte, claro está, donde «los hermanos» tenían lío en más de una ocasión.

No solo los protagonistas tomaron rumbos diferentes. Vader, como comentábamos, iba a ser el jedi caído ahora convertido en feroz enemigo. Sin embargo, con las reescrituras de guión de El imperio contraataca, Lucas llegó a la conclusión de que el mejor golpe de efecto sería la revelación de Vader como padre de Luke. El emperador Palpatine, a su vez, inicialmente no era un sith, sino un simple político con mucho poder y capacidad de persuasión. Este personaje, por cierto, no sería revelado hasta El retorno del jedi, siendo su aparición hasta entonces por meras menciones. La idea era crear una mayor sensación de amenaza.

¿Y qué pasó con el apellido Starkiller? Lucas pensó que era demasiado oscuro para pertenecer al héroe de la historia (significa, literalmente, «destructor de estrellas»), por lo que lo cambió a Skywalker («caminante del cielo»), mucho más esperanzador y hasta altruista. No obstante, el nombre «Starkiller» no desapareció del todo: en los videojuegos, pasó a formar parte de uno de los personajes principales, conocido como Darth Starkiller, Galen Marek, discípulo de Darth Vader. Y la muy reciente «tercera Estrella de la Muerte, pero más grande» de El despertar de la Fuerza, que también recibe dicho nombre.

Así, resulta realmente curioso (y hasta apasionante) pensar en lo que podría haber terminado siendo la historia de Star Wars si alguna de las ideas originales se hubieran llevado a cabo: un Han Solo fallecido antes de tiempo, con Luke y Leia terminando juntos y buscando a la hermana del primero en alguna otra galaxia muy, muy lejana.

Galen Marek, también conocido como Starkiller

Galen Marek, también conocido como Starkiller

Sálvame: Star Wars. Premisas y puntos de partida

Como ya hemos ido adelantando, el próximo sábado 21/05/2016, el programa de radio El Sótano estará en buena parte dedicado a los cotilleos y chismes que han ido surgiendo con la nueva trilogía de Star Wars. Rian Johnson (director del Episodio VIII) ya ha avisado que el rodaje ha avanzado en más de la mitad del metraje, y con ello internet y foros se han llenado de rumores y SPOILERS. ¿Qué es lo que vamos a abarcar en el programa entonces?

  • Guerras parejiles (que NO perejiles) o ship wars: Todo fandom (grupo de fans) que se precie tiene sus ship wars o guerras de parejas. Esto es, gente que en su imaginario cree que una pareja se hará oficial por encima de otras. En Star Wars, si la trilogía original se hubiera estrenado durante la era del internet, probablemente hubieran surgido guerras de los partidarios del HanxLeia contra el LukexLeia (recordemos que no se sabe nada de su verdadera relación filial hasta la tercera entrega). Con la llegada de la nueva trilogía y El Despertar de la Fuerza, nuevos personajes y nuevas generaciones se han asomado con fuerza (en varios sentidos) por el universo creado por George Lucas (y ahora en manos de Disney Pixar). Es el caso de Rey, Finn y Poe (en el bando de los buenos) y Kylo Ren, General Hux y Capitana Phasma (en el de los malos). Además, sabemos que hay, al menos, tres nuevos fichajes para el Episodio VIII: las actrices Kelly Marie Tran y Laura Dern y el actor Benicio del Toro. ¿Qué papeles jugarán todos ellos? ¿Qué les depara en las mentes calenturientas de los fans?
  • La genealogía de Rey: podríamos decir que es el GRAN misterio de la nueva trilogía: ¿quién es Rey? ¿De dónde viene? ¿Es hija de Luke, acaso? ¿O quizás una descendiente de alguien cercano al Lado Oscuro? Veremos…
  • ¿La redención de Kylo Ren?: Los que han visto El Despertar de la Fuerza (y si no SPOILERS) sabrán que la verdadera identidad del nuevo villano es la de Ben Solo, el hijo de Han Solo y Leia Organa, y por lo tanto nieto de Anakin Skywalker/Darth Vader. Aún no sabemos nada sobre qué le hizo caer a Ben en el Lado Oscuro y seguir fielmente al nuevo «villano en la sombra» de la saga (el líder supremo Snoke), y mucho menos qué le depararán los episodios VIII y IX. ¿Habrá posibilidades de redención para él o es una causa perdida?

Por si todo esto fuera poco, además anunciaremos al o la ganador/a de nuestro sorteo «Sálvame: Star Wars». Para todos/as aquellos/as que se queden con las ganas de obtener uno de los productos del sorteo, o alguno de nuestros artículos relacionados con El Despertar de la Fuerza, también avisamos que los venderemos en Fantasy Cloud con el 30% de descuento hasta el domingo 22/05/2016. ¡Que la Fuerza os acompañe!

P.D.: El fan art de la portada es de Monkey Aleng

sorteo salvame

Lo que esperamos ver de los nuevos personajes de Star Wars

Sí, es el Star Wars Day (Día de Star Wars, para aclararnos). Y sí, el hype por el Episodio VIII (a medio rodaje, que así lo comunicó el otro día Rian Johnson, su director) es grande. Así que, para conmemorar el primero y tratar de paliar un poco el segundo, hemos decidido hacer esta pequeña aportación: ¿Qué esperamos (nosotros, al menos) de los nuevos personaje de Star Wars? Nos referimos, claro está, a los nuevos protagonistas de El Despertar de la Fuerza… y a Luke y Leia, por supuesto. Contiene SPOILERS de El Despertar de la Fuerza y rumores del rodaje del Episodio VIII, avisados estáis.

Rey

Como ya sabrán los que han visto la última entrega, Rey es la nueva heroína, la nueva Luke, todo peso principal de la trama recae ahora sobre ella (y sobre el villano, que veremos más adelante). De Rey esperamos que siga siendo interpretada con la misma intensidad por Daisy Ridley. Y que tontee un poco (o bastante) con el Lado Oscuro de la Fuerza no le vendría mal a su personaje. De hecho, en la batalla final de El Despertar de la Fuerza, se la veía bastante dispuesta a acabar con Kylo Ren (o, al menos, desfigurarlo). Demasiado agresiva, quizás, en comparación con el bueno de Luke (cuando era aquel inocente granjero). Se acerca, en este sentido, más a Anakin. Hay incluso algunos rumores locos (ya descartados por Pablo Hidalgo) de que Rey sería en realidad una reencarnación de Anakin. Lástima: queríamos ver una escena similar a aquella de Fry en Futurama, donde Kylo Ren descubriría que Rey sería en realidad… ¡su abuelo! Todo esto nos lleva a que nos revelen (y que terminen de una vez con esta agonía) la procedencia de Rey.

Fan art que no es nuestro, más quisiéramos

Fan art que no es nuestro, más quisiéramos

Finn

A Finn ya nos lo estamos imaginando como el Espartaco de la Primera Orden: tiene que montar una rebelión de Stormtroopers (soldados de asalto) sí o sí. O bueno, al menos sería algo que estaría genial. Para ello primero tendría que despertar de su coma, claro. Y saber algo sobre su procedencia tampoco estaría mal, aunque no corre tanta urgencia como con el caso de Rey. Y sobre los rumores de un posible romance entre él y el personaje que interpretará Kelly Marie Tran (¿una rebelde?) no estarían nada mal, debido al friendzoned que le hizo Rey al final de la última cinta. Y más escenas con Poe, POR FAVOR.

Finn

 

Kylo Ren (SPOILERS de Bloodline)

Probablemente, y tras el lamentable estado en el que lo dejó Rey al final de El Despertar de la Fuerza, ahora estará en modo obsesión con ella (similar a lo que le sucedía a Darth Vader con Luke en El Imperio Contraataca). Esperamos que haya finalizado (o algo así) su entrenamiento con Snoke, y que ahora imponga más y se lo vea más seguro de sí mismo. Es probable que sepamos más sobre qué lo llevó a caer en el Lado Oscuro y unirse a los Caballeros Ren (en Bloodline, novela oficial situada seis años antes de El Despertar de la Fuerza, Kylo Ren sigue siendo Ben Solo). Y hablando de éstos últimos: más de ellos, por favor. La total ausencia de rastro de Adam Driver durante el seguimiento del rodaje por parte de los fans más acérrimos nos lleva a pensar que se están guardando algo grande con este personaje para el Episodio VIII. Ah, y una cicatriz en medio del rostro.

Fan art que tampoco es nuestro, también más quisiéramos

Fan art que tampoco es nuestro, también más quisiéramos

Poe Dameron

Con que tenga más escenas que en El Despertar de la Fuerza nos conformamos. Como personaje tiene mucho potencial y se comía la pantalla cada vez que hacía acto de presencia. Parece probable que tendrá algún papel de relevancia dentro de la Resistencia, y algunos rumores hablan de una escena que lo confronta con el personaje que interpretará Laura Dern.

Poe_Dameron

Luke Skywalker

Que diga más de una frase (que seguro que lo hará). Que explique porqué se estaba escondiendo (¿culpabilidad? ¿temor a algo?), y que muestre en qué estado se encuentran sus poderes y habilidades. Imaginarse a un gran maestro Luke, similar a Obi-Wan Kenobi y a Yoda, provoca que se nos hagan los ojos chiribitas. Y, por supuesto, que explique en qué consiste aquello del primer templo jedi.

Esto ya ha pasado, así que no hace falta imaginárselo

Esto ya ha pasado, así que no hace falta imaginárselo

Leia Organa (SPOILERS de Bloodline)

Al igual que Poe, que aparezca más en el Episodio VIII y que tenga mayor relevancia se agradecería mucho. Para los que hayan echado el ojo a la nueva novela oficial Bloodline (en inglés, por ahora) sabrán que Leia no lo ha tenido fácil como política dentro de la República. Y que, al parecer, no acaba de aceptar que Darth Vader fuera su padre (y que terminara redimiéndose). Así que mostrarnos más de todo esto, y saber explotarlo, nos otorgaría una gran satisfacción. Que Leia también tiene mucho que decir, creemos, y más aún siendo la madre del nuevo villano. Lo que nos lleva a imaginar, también, lo bien que estaría una escena entre ella y Kylo Ren (que sería raro que no se diera, ya sea en el Episodio VIII o en el IX).

leia bloodline