El sexo en Star Wars: Los últimos jedi

Las palabras «sexo» y «Star Wars« no suelen ir juntas en la misma frase, entre otras cosas por ser una saga dirigida al gran público, que como sabemos incluye a niños, adolescentes y adultos. Sin embargo, no está exenta de romances y momentos apasionados, como el famoso «te quiero» «lo sé» de Leia y Han en El imperio contraataca o el (supuesto) último beso de Anakin y Padme antes de ser ejecutados en Geonosis en El ataque de los clones.

Sin embargo, casi todos estos momentos suelen resultar bastante castos e incluso asexuales (como la historia de Anakin y Padme en general, que apenas nos creemos que hayan sido capaces de procrear), hasta que vino Rian Johnson con Los últimos jedi. Avisamos desde ya que habrá SPOILERS (muchos) de dicho episodio de la franquicia.

Johnson, un director comercial nada al uso (para ello basta con echar un vistazo a Brick o Looper), ya adelantó en una entrevista que la película contendría varios elementos freudianos. Tanto es así, que el octavo episodio no muestra un romance «directo» y al uso (con beso y declaración, a no ser que incluyamos el de Finn y Rose), pero sí varios acercamientos y una simbología que, tras varios visionados, se nos torna MUY perceptible y bastante clara en sus intenciones.

Tenemos por un lado a Rey (Daisy Ridley), criada prácticamente sola en el desierto, por lo que es fácilmente asimilable que no haya tenido muchas figuras con las que relacionarse, ni masculinas ni femeninas. Rey llega a Ahch-To buscando a Luke (Mark Hamill), un antiguo maestro jedi que vive en el exilio en dicho planeta, que se limita prácticamente a una isla con reductos de los primeros jedi, una misteriosa cueva y poco más. Rey conoció y se enfrentó en la anterior película, El despertar de la Fuerza, a Kylo Ren (Adam Driver), un joven unos pocos años mayor que ella que tampoco parece ser un derroche de carisma respecto a las habilidades sociales, y que a todas luces ha sufrido varios años de abuso por parte de Snoke.

Llegado cierto momento de la cinta, Rey y Kylo Ren descubren para su sorpresa que la Fuerza los está uniendo de alguna forma, ya que pueden hablarse, verse y hasta tocarse (aunque inicialmente la mitad de esto no lo saben), a pesar de que cada uno de ellos se encuentre en un planeta (o base espacial o nave) totalmente distinto. Por su parte, Luke percibe que la muchacha se está sintiendo fuertemente atraída hacia la citada cueva de la isla, la cual parece estar vinculada con la oscuridad y le causa bastante rechazo al maestro jedi.

Arte conceptual del entrenamiento de Rey con Luke, en The Art of Star Wars: The Last Jedi

Durante una de sus conexiones, Rey ve y reacciona ante Kylo Ren al estar éste sin camiseta ni nada que le cubra el torso, una escena que Johnson rodó para dejarle claro al espectador que estos dos personajes pueden verse con total claridad. Inmediatamente después de esto, la muchacha corre hacia la cueva, incrustada en el suelo y con forma que puede recordar a la de una vagina (vello púbico incluido), en donde es sumergida accidentalmente en el agua, perdiendo su característico peinado de moños y quedándose a partir de entonces con la mayor parte de su pelo suelto.

Hacemos hincapié en lo del cabello porque a nivel literario y narrativo la forma en la que un personaje femenino lleva recogido su pelo es en bastantes ocasiones asociado a su sexualidad. Así, alguien con el pelo recogido puede ser vinculado con la infancia, la asexualidad y la seriedad, mientras que el soltárselo es referente a la liberación, tanto a nivel sexual como espiritual. No viene de la nada el famoso dicho «desmelenarse».

Durante esta secuencia, Rey busca respuestas a la pregunta que más la está atormentando: quiere ver a sus padres. El mensaje que recibe, en una secuencia algo psicodélica y que recuerda tanto a Luke en la cueva de Dagobah como a Harry Potter ante el espejo de Oesed, es la de dos figuras que se acercan primero y que se funden finalmente en una sola: ella (recalcamos lo de las dos figuras porque, aparte de verse en la película, el arte conceptual de Los últimos jedi deja claro que al menos se tuvo en mente que eran Kylo Ren y la susodicha).

Arte conceptual de Rey en la cueva, extraído de The Art of Star Wars: The Last Jedi

Rey sale de la cueva y acude al propio Ben Solo, a quien le cuenta lo ocurrido. En este momento, él le dice que ella no está sola, ante lo que ésta responde que él tampoco y, en una secuencia bastante pausada, ella le tiende su mano a él para tocarlo, a lo que él responde sacándose el guante y haciendo lo propio. Cuando las manos de ambos finalmente se tocan, la respiración de ella se entrecorta, pero los interrumpe Luke, quien iracundo les ordena parar y derrumba la choza en donde se encuentran.

Esta escena es determinante no solo dentro de la trama de Los últimos jedi (es la que torna a Rey del lado de Ben, dejando atrás a Luke), sino en su propio contenido sexual, no tanto por lo que muestra (dos manos tocándose, algo a lo que Johnson se refirió como exponente básico de intimidad), sino por CÓMO lo muestra: Rey y Ben solos en la tienda, iluminados solo por un fuego, con ella aún mojada por la experiencia en la cueva, rozando piel con piel y respiración entrecortada. La reacción de Luke pone la guinda al pastel.

Como decíamos, es a partir de este momento que Rey rompe con la «figura paterna» (a la cual ya había desafiado al introducirse en la cueva) y se larga de Ahch-To para ir a buscar a Ben. Acude a él en una especie de nave-cabina, tumbada con el sable abrazado sobre su pecho, en una escenografía que claramente nos recuerda a una Blancanieves o una Bella Durmiente.

Arte conceptual de Rey, Ben y Luke, extraído de The Art of Star Wars: The Last Jedi

Cuando los dos jóvenes vuelven a estar solos en un ascensor, de camino al trono de Snoke, la secuencia vuelve a mostrarse bastante intimista, con ella acercándose mucho a él, mirándole a los ojos, luego a los labios, luego a los ojos de vuelta, a la vez que le sugiere que se vaya con ella al lado luminoso. Se trata claramente de un intento de seducción, al cual él responde con la misma moneda.

Finalmente, ante Snoke y su guardia pretoriana, totalmente vestida de rojo en una habitación que también está cubierta de carmesí, Rey y Kylo Ren dan inicio a una batalla que incluye intercambio de sables láser entre ellos, agarre de cadera, ella siendo herida, perforaciones y penetraciones varias para finalizar con Rey al grito de «¡Ben!» y ambos  mirándose con respiración nuevamente entrecortada. En fin, si esto no es lo más cercano a una escena sexual en Star Wars, que venga George Lucas y lo vea.

Tras la batalla aquí descrita, viene la proposición de Kylo Ren a Rey, la cual ésta rechaza, huyendo y dejándolo a él de nuevo «dormido» (en realidad inconsciente por una explosión), pose en la que se lo encuentra Hux al llegar al trono de Snoke. El típico vértigo post-coital. El resto, como sabemos, ya es historia… hasta la escena final, con Kylo Ren arrodillado nuevamente ante Rey, quien lo manda a dormir al sofá.

Frente a esta historia, tenemos el romance más típico (para este tipo de películas) de Finn y Rose, que se desarrolla sin mayores altercados, para finalizar con un pico bastante casto. Esta es, sin embargo, la relación más directa (y sana) de ambas, también la más infantil y, por lo tanto, inocente. Frente al crecimiento, «despertar» y entrada en la madurez de Rey, tenemos la del propio Finn, cada uno en su estilo. A ver por dónde nos sale J.J. Abrams en su Episodio IX, siguiendo al capítulo que ya ha sido catalogado por una parte de la prensa como «el más sexual» de todos.

Hablemos de Kylo Ren/Ben Solo (Star Wars)

Star Wars: Los últimos jedi se estrenó el pasado 15 de diciembre y todavía está dando que hablar en redes sociales y medios varios, para bien y para mal. Teniendo en cuenta el lapso de vida de las novedades en Twitter o Facebook, es bastante. Uno de los temas centrales de los debates que la rodean es el personaje de su villano (¿o anti héroe?), tanto en el episodio siete como en el que nos ocupa: Kylo Ren, también conocido como Ben Solo, único hijo de Han y Leia, interpretado por Adam Driver. Avisamos de paso que se avecina un largo análisis con SPOILERS de Los últimos jedi.

Tanto J.J. Abrams (director de El despertar de la Fuerza y el Episodio IX) como Rian Johnson (director de Los últimos jedi) han dejado caer varias declaraciones sobre la ambivalencia del personaje de Kylo y CÓMO NO es Darth Vader, a pesar de que al ver su diseño es lo primero que nos trae a la mente. Así, Abrams comentó que tanto a él como a Kathleen Kennedy (presidenta de Lucasfilm) se les ocurrió Driver tras unas pocas pruebas de casting a algunos actores debido a su versatilidad, hasta el punto de que fue el primer miembro del reparto en ser anunciado al público. Johnson, por su parte, ha declarado, entre otros, que Kylo y Rey «son las dos partes de un protagonista».

De este modo, diseños aparte, Kylo Ren poco y nada tiene que ver con el prototipo de villano que era Vader, más allá de ser su nieto, que tenga una cierta admiración por él y, de hecho por eso, copiarlo en la apariencia y vestimenta.

Con quien sí guarda mayor similitud es con Anakin, tanto en el aspecto debajo de la máscara (cicatriz ahora incluida), como en la actitud de un muchacho muy poderoso que no sabe muy bien qué hacer con el papel que le ha tocado jugar, derivando en una enorme inestabilidad emocional. Porque, si algo tiene Ben en común con su abuelo, es que ambos son tremendamente emocionales, hasta el punto de traspasar los límites de la cordura y de inestabilizarse con cierta facilidad.

Si hacemos caso a las palabras de otros personajes a lo largo de las últimas dos cintas, Ben también guarda cierta similitud con Han (Snoke le dice que tiene el corazón de su padre), lo que no debería pasar desapercibido entre tanto trato negativo en Ben, incluyendo entre los miembros de su propia familia. De lo poco que hemos visto a Han y su hijo juntos, la relación entre ellos debía ser algo distante. El dueño del Halcón Milenario no sabe muy bien qué hacer con el niño poco después de nacer debido a su conexión con la Fuerza y años más tarde se dedica a enseñar a otros jóvenes pilotos más que otra cosa, según Bloodline, además de lo comentado por el propio Kylo a Rey. Sin embargo, y a pesar de la dramática deriva de los acontecimientos, Ben no odia a su padre, como también le dice a la muchacha. Si acaso, su muerte lo ha sumido aún más en la confusión emocional en la que estaba sumido.

Una víctima de abuso y un pésimo líder

Llegados a este punto, ¿qué sabemos realmente del pasado de Kylo Ren? Pues más bien poco. único hijo de Han y Leia, poderoso en la Fuerza desde el momento en que nació, según Abrams, Kylo es tan fuerte en el lado luminoso como en el lado oscuro, lo que rápidamente atrajo la atención de Snoke. Se ve que este ser lo acechó desde temprana edad, aunque no sabemos exactamente cuándo (¿infancia? ¿adolescencia?). Sea como sea, sus padres, bastante metidos de lleno en sus respectivas carreras (Han como piloto, como ya decíamos, y Leia como política de la nueva república), se dieron cuenta en algún momento de que estaban perdiendo a su hijo y decidieron mandarlo con Luke, quien había fundado una academia jedi con una docena de estudiantes,

Luke y Ben entrenaron juntos por algún tiempo, pero llegó un punto en que el primero tuvo una visión del segundo, donde Snoke ya había llegado a lo más profundo de su corazón, y por puro instinto durante un momento fue a matarlo mientras dormía. Evidentemente, Luke enseguida cayó en la cuenta de la atrocidad que estaba a punto de cometer y se detuvo, pero ya era tarde: su sobrino había despertado y lo había visto. Ben evidentemente se defendió y derribó a Luke, se llevó a algunos de sus estudiante (¿los caballeros Ren?) y al resto los mató, incendiando de paso su academia.

Ben Solo no era siempre un conflictivo muchacho que daba problemas. Extracto de la guía visual de Los últimos jedi, por Pablo Hidalgo

Es increíblemente significativo que en dicho momento Ben no acudiera a sus padres… sino a Snoke, lo que nos habla de que efectivamente el villano ya tenía una poderosa influencia sobre él. Sin embargo, si nos fijamos en la actitud de Snoke hacia Kylo tanto en el séptimo episodio como en el octavo (más en los pocos minutos que trata a Rey), nos damos cuenta de que el primero es tremendamente abusivo con el segundo, recurriendo a humillaciones psicológicas («el increíble Kylo Ren» con tono de sorna al burlarse que ha sido derrotado por una inexperta), emocionales (prácticamente lo obliga a matar a Han) y físicas (el rayo, la tortura a Rey).

Si sumamos esto último a la sensación de soledad y abandono que ha debido sentir Ben por los poderes con los que ha nacido, la temprana edad a la que Snoke debió empezar a contactarlo y el bagaje emocional que de por sí lleva en los genes, nos parece que demasiado bien está Kylo Ren después de todo.

¿Dónde está el mayor drama, entonces? En que, una vez liberado de Snoke, y de hecho habiéndolo asesinado él (pudo matar a Han, pero no a Rey), Kylo Ren ya debería estar libre para poder tomar mejores decisiones… solo que no lo está. Si nos fijamos, tras el asesinato del líder de la Primera Orden y de su guardia pretoriana, lo primero que hace Kylo es quedarse mirando fijamente el cadáver de Snoke. Claramente está en shock. Es probable que tenga estrés postraumático en ese mismo momento y en los años próximos.

Arte conceptual de Los últimos jedi, extraído de The Art of StarWars: The Last Jedi

Sin embargo, Rey, por quien acaba de dar dicho paso, le dice que salve a la Resistencia. Pero Kylo tampoco guarda aprecio hacia el grupo (los llama ladrones, asesinos y traidores en la cinta anterior), está hasta las narices de todo y quiere mandarlo al carajo. Una reacción, a priori, muy normal en alguien que aún está en shock. Rey choca con él en este punto y ya sabemos todos cómo sigue la cosa.

La rabieta posterior de Kylo Ren es bastante criticada, y no falta razón, pero tengamos en cuenta que la película está contada desde la perspectiva de «los héroes», y él está en el bando de «los villanos». Si fuera al contrario, sinceramente, tampoco le faltarían motivos al muchacho para estar cabreado, más teniendo en cuenta lo fácil que es que salte. La aparición de Luke empeora aún más las cosas, pues Kylo odia a su tío: es el principal culpable de su actual situación, con la cual no parece que esté radiante de felicidad. Tanto es así, que ni se da cuenta de que lo que está frente a él ni tan siquiera es REAL, ya que Luke no deja marcas de pisadas en la sal que cubre Crait (solo por poner un ejemplo).

Toda esta secuencia también sirve para mostrarnos otra cara de Kylo: la de un pésimo líder. No sabe dar órdenes (Hux se le intenta imponer a la mínima y en cualquier momento me huelo un Frank Underwood con él) y se guía puramente por sus emociones, no por la estrategia ni por la ideología de la Primera Orden, la cual creo que se la trae más bien al pairo (cuando se le propone a Rey, entre otras cosas le dice que acaben juntos con la organización). Todo ello concluye en un gran fracaso para «los malos» y con los escasos miembros de la Resistencia huyendo con vida, lo que no es poco.

Por lo tanto, en lo personal veo poco probable que haya un gran salto temporal entre Los últimos jedi y el noveno episodio, entre otras cosas porque no veo a Kylo Ren gobernando la Primera Orden durante mucho tiempo sin graves consecuencias, comenzando para él mismo. Hux sigue rondándole y la última mirada que le dirige antes de finalizar la película no es precisamente de aprecio. Puede que el general no sea poderoso en la Fuerza, pero dentro de la Primera Orden tiene más contactos que Ren seguro (a quien se ha mostrado que temen, pero no respetan), por lo que es fácilmente imaginable la organización de una especie de golpe de Estado.

No es tampoco poco significativo que la última escena protagonizada por Kylo Ren en Los últimos jedi lo muestre arrodillado ante Rey, agarrando los dados de la suerte que pertenecieran a su padre, con gesto triste y actitud arrepentida, mientras un rayo de luz lo ilumina en medio de la oscuridad.

Esto ya lo hemos visto en otra parte…

La historia de lo que llevamos hasta ahora de Ben Solo y Kylo Ren no es única en el mundo del entretenimiento. De hecho, los seguidores de anime, manga y videojuegos procedentes de Japón tienen ejemplos varios. Cáspita, hasta Elza de Frozen podría servir de referencia en ciertos puntos. A partir de aquí, habrá SPOILERS de Naruto y de Code Geass.

El más llamativo es probablemente el de Sasuke Uchiha (Naruto), protagonista primero y villano después, empezando la serie como compañero, rival y amigo de Naruto para después volverse su enemigo, movido primero por las ansias de venganza personal y por, adivinad, estrés postraumático posterior, hasta el punto de querer acabar con todo el orden ninja establecido, el cual percibe como corrupto, aunque para ello tenga que matar a Naruto, a Kakashi, a Sakura o a quien haga falta.

Por suerte, Naruto nunca pierde del todo la esperanza en él (aunque hay momentos que casi), y en un enfrentamiento final donde ambos pierden sus brazos, Sasuke «ve la luz» y vuelve al lado luminoso (valga la redundancia). Tras unos años de exilio, y sin llegar a recuperar nunca su brazo, Sasuke acaba viviendo en Konoha con Sakura y ambos tienen una hija, Sarada, restaurando asimismo el clan Uchiha (del cual solo quedaba él).

La otra gran similitud percibida es con Lelouch Lamperouge, protagonista de Code Geass, aparentemente un estudiante normal que un día y de forma fortuita se ve ¿bendecido? ¿maldecido? con el poder del geass, el cual causa que todo aquel que lo mire directamente a los ojos siga sus órdenes. Lelouch decide usar este poder principalmente como medida de venganza personal, adoptando un alter ego enmascarado (vaya) conocido como Zero, con el cual también se erige como una figura justiciera frente al opresor imperio de Britannia. Sin embargo, Lelouch se va obsesionando con su venganza hasta el punto de derribar a todo aquel que ose interponerse, aunque sean sus amigos, parientes o similar.

Llegado el momento, Lelouch llega hasta sus padres, el emperador de Britannia, objeto principal de su venganza, a quien asesina. ¿Qué hace entonces el chico? Se auto erige como máximo dirigente y se vislumbra como la nueva principal figura opresora. Al final, Lelouch acuerda con su amigo Suzaku su asesinato ante el público y, en teoría, muere (aunque algunos teorizan que es una farsa para escapar con C.C. a la vez que le deja un mundo mejor a Nunally, que era su deseo). Sea como sea, parece que Lelouch volverá para una tercera temporada.

Podríamos hablar de otras representaciones de estos personajes más antihéroes (o héroes byronianos) y de sus contrapartes heroicas sin artificios, como Riku y Sora en Kingdom Hearts, Seifer y Squall en Final Fantasy VIII, Delita y Ramza en Final Fantasy Tactics, etc. En definitiva, parece ser un concepto que encanta a los asiáticos.

Lo que en mi opinión queda claro es que Kylo Ren se redimirá de alguna forma (¿dónde estaría la gracia de la trilogía entonces?), pero si en el camino sobrevivirá o si llegará totalmente íntegro ya es otro cantar… La narrativa está poniendo bastante énfasis en que el objetivo es obtener el verdadero equilibrio en la Fuerza, no que prevalezca un lado sobre el otro, que es en donde fracasaron las anteriores trilogías, con la oscuridad prevaleciendo en las precuelas y la luz en la original (como bien dirían en Kingdom Hearts, a más luz haya, mayor será la oscuridad). Ben Solo debe hallar ese equilibrio en él mismo, pero también entre él y Rey.

Podríamos hablar extensamente también de la interesante relación entre Kylo Ren y Rey, de qué papel puede jugar en el destino de la galaxia como último Skywalker (¡y Solo!), de cómo su historia parece ser la misma que la de Anakin pero a la inversa («terminaré lo que tú empezaste»), y más cosas, pero eso nos llevaría a escribir nuestra propia trilogía. Lo que sacamos en claro es que Kylo Ren/Ben Solo es, para nosotros, el personaje más interesante de esta nueva saga. Esperamos que sepan darle una conclusión satisfactoria.

Lo mejor del año 2017 en cine, series y videojuegos

Al igual que hiciéramos en el 2016, este año ya va llegando a su fin y toca hacer reflexión y recopilación de lo que, desde nuestra experiencia, ha sido lo mejor en los ámbitos de cine, series y videojuegos. Admito que yo al menos no tenía muchas esperanzas puestas en este 2017 cuando echaba un vistazo a la lista de estrenos, pero lo cierto es que las expectativas han sido superadas con creces, y creo que lo mejor de este año ha superado en calidad al anterior.

5- Logan (James Mangold)

El cierre al personaje interpretado desde hace más de una década por Hugh Jackman es también su mejor película, y con diferencia (incluyendo a las de X-Men donde aparece). Logan es pura crudeza y melancolía del cine crepuscular, con un Jackman en estado de gracia acompañado por unos también carismáticos Patrick Stewart (Charles Xavier) y Dafne Keen (X-23, Laura).

La cinta se sitúa en un futuro postapocalítico, con un Logan desencantado con la vida y cuidando de un avejentado (y casi senil) profesor Xavier, a la vez que se esconden de la caza de mutantes surgida a raíz de cierto incidente. En su camino se topará con una misteriosa mujer que le suplicará ayuda para una niña que la acompaña y que resultará estar bastante vinculada a nuestro protagonista.

En Logan confluyen una dirección espectacular, con un ritmo que no decae, unas interpretaciones carismáticas y, sobre todo, mucha llorera, especialmente para los que hemos amado al personaje desde su nacimiento en las viñetas. Para mí, la mejor cinta de superhéroes hasta la fecha (admitiendo que no soy especialmente fan del género).

Puedes leer nuestra crítica de Logan aquí.

4- Blade Runner 2049 (Denis Villeneuve)

Había muchos recelos ante la confirmación de una secuela de una obra de culto como lo es Blade Runner (Ridley Scott, 1982), por mi parte también, aunque al proyecto fuesen sumándose nombres como Denis Villeneuve, Ryan Gosling y los propios Ridley Scott y Harrison Ford. El resultado despejó todas mis dudas, topándome con una película que conserva lo mejor de su antecesora y atreviéndose a dar unos pasos más allá.

Es cierto que esos contados atrevimientos son casi lo peor de la cinta, ya que dejan entrever la idea de expandir un universo que, aunque atractivo, mejor dejarlo como está por si acaso la cagan.

Centrándonos ahora en Blade Runner 2049, lo mejor es sin duda su cinematografía (Roger Deakins merece un Oscar), seguido de un guión que trae temas de rabiosa actualidad y que te dejan pensando (como su predecesora) y unos personajes que, al menos a mí, me resultaron bastante atractivos.

En su contra juegan una historia demasiado larga y que se desinfla por momentos y, como decíamos, esas tramas abiertas con planteamientos de secuelas (innecesarias, sí). Lamentablemente, Blade Runner nunca fue un producto que atrajera al público mayoritario, algo que se ha visto reflejado en los número de taquilla.

Puedes leer nuestra crítica y análisis de Blade Runner 2049 aquí.

3- Coco (Lee Unkrich)

El tándem Disney-Pixar suele resultar (casi siempre) una apuesta seguro por el entretenimiento de calidad, de la animación que es capaz de divertir a los niños y emocionar a los adultos. Lamentablemente, la casa de Flexo llevaba unos últimos productos que no lograban calar tan hondo como algunos de sus clásicos (Toy Story, Monstruos S.A., Wall-E). Coco parecía que iba a ser más de lo mismo, oliendo además a refrito de El libro de la vida.

No pude alegrarme más de estar equivocada. Coco es simplemente maravillosa, con una animación espectacular, un respeto reverencial y cándido hacia la cultura mexicana y una historia con unos personajes que te sacan las lágrimas en más de una ocasión. Y por supuesto la música, aquí especialmente importante, también en homenaje a México.

Puedes leer nuestra crítica de Coco aquí.

2- Star Wars: Los últimos jedi (Rian Johnson)

La gente todavía está hablando bastante de la última película perteneciente a la saga Star Wars… lo cual ya de por sí es bueno, aunque no siempre sea en buenos términos. Para nosotros, el octavo episodio no es perfecto, pero es lo más cercano a una película de la franquicia creada por George Lucas que nos ha tenido entre obsesionados y perturbados durante días, tras un séptimo capítulo con mayor adrenalina, pero también más calcado y «sobre seguro».

Los últimos jedi es una historia fundamentalmente sobre personajes, sobre su psique, a lo que ayuda el contar con un actor de la categoría de Adam Driver (Osacr Isaac, Laura Dern, Benicio del Toro y Domhnall Gleeson están más desaprovechados), un «Anakin bien hecho», en contraposición a un Hayden Christensen que no tenía el respaldo de un guión con diálogos al menos aceptables.

La cinematografía es el otro gran componente de esta cinta, con planos que quedan grabados en la retina (sin querer hacer spoiler, cierto momento con una nave y otro frente a unos AT-AT y soles) y otros que te dejan los pelos como escarpias.

El hecho de que esté levantando tanto odios como pasiones deja en claro algo: Los últimos jedi ha ido a arriesgar, algo que no hizo su predecesora y que recuerda a las reacciones guardadas de algunos espectadores tras los primeros visionados de El imperio contraataca. Solo esperamos que J.J. Abrams sepa estar a la altura para poder ponerle un broche de oro.

Puedes leer nuestra crítica sin spoilers de Star Wars Los últimos jedi aquí.

1- NieR Automata (Yoko Taro)

Y llegó NieR. Lo cierto es que servidores no habíamos jugado ningún juego de NieR ni de Drakengard con anterioridad, por lo que llegábamos a Automata con la mente en blanco y atraídos por una estética muy de anime y una jugabilidad entre la acción y el RPG adictiva. Y qué MARAVILLA nos encontramos.

NieR Automata no es la mejor experiencia de ocio de este 2017, lo es desde hace varios años. Su poderosa narrativa, con momentos que te hacen reír y llorar, cuestiones existencialistas, personajes que te llegan al alma y un (o varios) final que te dejará estupefacto y con sonrisa bobalicona durante días (¡incluso semanas!). Si le añades la citada jugabilidad y una banda sonora compuesta por el siempre espectacular Keiichi Okabe hallamos esta OBRA MAESTRA.

Su director, Yoko Taro, no quiso quedarse ceñido a las barreras que ofrece un videojuego al que Square Enix apostó tras varias paupérrimas inversiones en el pasado, y decidió expandir aún más el universo de Yohra, los androides y su eterna guerra contra las máquinas a través de novelas, conciertos y videoclips que también dejan huella. Hasta ahí llegan 2B, 9S y A2, los tres personajes principales que, espero, me acompañen durante mucho más tiempo, aún con toda su melancolía. Y que Yoko Taro nunca los mate.

Puedes leer nuestra crítica de NieR Automata aquí.

Puedes leer nuestro análisis sobre NieR Automata y las construcciones de género por este otro lado.

Y puedes leer todos los conciertos traducidos e historietas cortas de NieR Automata en nuestro blog dedicado.

Menciones de honor

Por supuesto, la segunda temporada de Stranger Things (crítica aquí) hubiese entrado fácilmente en este top5, pero como ya incluimos a su también extraordinaria primera parte en la lista de 2016 no queríamos parecer demasiado repetitivos.

En cuanto a anime y manga, han habido varios descubrimientos en este 2017, destacando a mi parecer Koe no Katachi (análisis aquí) y La pequeña forastera (Totsukuni no Shoujo, análisis también por aquí), pero ninguna es realmente de este año, por lo que aquí lo dejamos.

Qué nos dice el último tráiler sobre Star Wars: Los últimos jedi

El último tráiler de Star Wars: Los últimos jedi ha llegado con bombo y platillos, acompañado de un nuevo póster y de la salida a la venta de las entradas.

Teniendo en cuenta el secretismo que la ha acompañado durante toda su producción, nos ha sorprendido (para bien) la cantidad de nueva información que deja entrever este avance… sin llegar, ni mucho menos, a contarnos toda la película (de hecho, juegan bastante al despiste). ¿Qué novedades e información que (quizás) sea importante nos trae?

Más Kylo Ren

El personaje interpretado por Adam Driver estaba siendo lo más ocultado en la promoción que ha estado saliendo hasta ahora, con el actor estando ausente en casi todos los eventos y relegando su participación en reportajes casi a un segundo plano (siempre bastante por detrás de Luke y Rey). Solo el maravilloso primer póster presagiaba su importancia dentro de la trama.

Al cartel lo acompaña ahora este tráiler, donde Kylo es el personaje con mayor exposición, además de Rey.

Ya en el principio, lo vemos guiando a un comando de soldados imperiales en lo que parece ser Crait, arrodillado ante Snoke (o así parece), destrozando su casco o contemplando el exterior desde un hangar que, si nos fijamos bien, parece el mismo que posteriormente aparecen destruyendo Finn y Rose.

Pero eso es solo la base. Lo más importante sobre Kylo que se puede percibir a través del tráiler es su duda/sufrimiento a la hora de tener que disparar contra el sitio donde se halla Leia (no puede) y que parece forjar una especie de alianza o entendimiento con Rey.

Esto último se deja entrever justo al final del tráiler, cuando Kylo le tiende la mano a quien parece ser Rey, y durante un diálogo anterior en el que él le dice a una persona (a todas luces la misma muchacha) que tienes que destruir tu pasado para poder conocer tu papel a jugar dentro de la partida.

Así pues, parece que tendremos a un Kylo Ren si acaso más confuso y dañado que en El despertar de la Fuerza, que incluso deja la puerta a un posible inicio de redención.

Rey, sus dudas y su poder incontrolable

Como decíamos, el personaje interpretado por Daisy Ridley es el que más podemos apreciar, lógico si tenemos en cuenta que es la nueva protagonista.

De entre lo más llamativo, por un lado sus escenas de entrenamiento y con Luke, quien parece temer el poder de la joven (así lo afirma también en lo que dice en el tráiler); por el otro lo que ya comentábamos de un acercamiento a Kylo Ren (al final Rey parece casi suplicarle a alguien -que bien podría ser también Skywalker- que le muestre su papel en todo este entramado en el que se ha visto envuelta, justo antes de que Kylo tienda la mano) y, sobre todo, una escena donde está siendo claramente torturada por Snoke, dejando el interrogatorio de Kylo Ren en la anterior entrega en un mero juego de niños.

El tráiler deja la sensación de que Rey anda todavía bastante descolocada con todo esto y que probablemente le cueste controlar sus poderes, lo que le causa desazón y puede que hasta frustración. El citado temor de Luke no parece ayudar a la causa. Así pues, el camino que acabe tomando Rey parece que definitivamente tendrá más intringulis que sus misteriosos orígenes.

¿Nuestra apuesta? Snoke le dice las palabras del principio del avance (esas sobre «siempre vi en ti un tremendo poder…) a Rey, a quien intentará llevar a su terreno (escena de la tortura). Antes de eso, como sabemos, Rey convencerá a un reticente Luke para que la entrene (de ahí el «necesito que alguien me diga cuál es mi lugar en todo esto», que definitivamente sucede en la primera mitad de la película por el aspecto de la muchacha y que probablemente vaya dirigido al jedi). Skywalker aceptará con reparos y receloso, lo que llevará a que algo ocurra entre ellos y que hará a Rey dudar, una vez más, de cuál es su papel y qué hacer (entrada en escena de Kylo, que sabemos por el rodaje que en algún momento caerá sobre Ahch-To, y que probablemente le dirige ese «tienes que matar tu pasado» a ella). A partir de ahí, solo Johnson dirá.

Luke y Leia, hermanos separados

Todo un aire de tragedia parece envolver a los mellizos a lo largo del tráiler. De Leia se prevé ya su trágico final, adelantado por el abrupto y fatídico fallecimiento de Carrie Fisher, mientras que a Luke lo acompaña un halo de oscuridad, dejando claro que ya no es el optimista jovenzuelo de la trilogía original. Está dañado (flashback incluido) física y emocionalmente y se lo ve cansado y harto de estarlo. Parece que en un momento le espeta a Rey (a quien en principio se niega a entrenar y a quien teme) que las cosas no están saliendo como ella esperaba, con un tono más de enojo que de otra cosa.

Un duelo esperado

La trama de la Resistencia no asoma mucho por el tráiler, pero sí lo hace una escena especialmente llamativa: Finn contra Phasma. Parece que ambos resolverán sus cuentas pendientes en esta octava entrega, y que el personaje de Gwendoline Christie estará algo mejor aprovechado que en El despertar de la Fuerza (lo cual es fácil).

Chewbacca, porgs y el Halcón Milenario

Algo que ya se ha visto para aquellos que hayan estado siguiendo los reportajes de Entertainment Weekly y similares es al famoso wookie entreteniéndose ahora con estos nuevos animalillos, incluso a bordo del emblemático Halcón Milenario.

La nave vuelve a volar en este avance, aunque seguimos sin saber quién la pilota. Lo más previsible, claro está, son el propio Chewbacca y Rey, pero estando por ahí hasta Kylo Ren con unas buenas habilidades de pilotaje heredadas, nunca se sabe.

Un apartado técnico espectacular

Nada nuevo en una película de Star Wars, que lleva siempre buenas cantidades de dinero invertidas detrás, pero Rian Johnson ha demostrado hasta la fecha no ser un director de blockbusters al uso, con Brick y Looper en su currículum.

Si algo demuestra este tráiler es que Johnson no se ha contenido en esta ocasión, mostrando una puesta en escena y una fotografía maravillosas y espectaculares. Tenemos muchas ganas de ver Crait. Qué carajo, ansiamos que sea ya 15 de diciembre.

Así estarán los personajes de Star Wars: Los últimos jedi al comienzo de la historia

La revista Entertainment Weekly ha lanzado una serie de artículos relacionados con la próxima entrega de la franquia, Star Wars: Los últimos jedi, dirigida por Rian Johnson (Looper, Brick) y que saldrá en cines el próximo 15 de diciembre.

Los artículos nos sitúan básicamente en cómo y dónde estarán los personajes durante el inicio de esta octava entrega, empezando por Luke (Mark Hamill) y Rey (Daisy Ridley… recordamos que el final de El despertar de la Fuerza nos dejó con estos dos recién encontrándose en el planeta Ahch-To y la continuación la sigue tan solo unos minutos después). Al parecer, nuestro ya no tan joven Skywalker no estará muy emocionado de ver a la muchacha y a su sable láser, dejándola inicialmente de lado, ya que prefiere seguir con sus cosas. En palabras de Hamill, Luke ya no es el joven optimista de antaño y piensa que quizás ha estado malinterpretando a la Fuerza durante todos estos años:

«(Luke) cometió el enorme error de creer que su sobrino era el elegido, por lo que invirtió todo lo que tenía en Kylo, similar a como Obi-Wan había hecho con mi personaje. Y él es traicionado, con trágicas consecuencias. Luke se siente responsable de eso, siendo el primer obstáculo que él tiene para volver a unirse al mundo y a la jerarquía jedi, ¿sabes? Es esa culpa, ese sentimiento de que es su culpa, que no había detectado la oscuridad en él hasta que ya era tarde».

La llegada de Rey podría dar la vuelta a las cosas, a pesar del rechazo inicial, que hará mella en su pasado de abandono (Rey fue dejada sola por unos padres desconocidos en Jakku). Más aún cuando todos los nuevos personajes que había ido conociendo en El despertar de la Fuerza la habían recibido con los brazos abiertos, especialmente Han, creando un contraste absoluto con «el gruñón» Luke. No obstante, Rey es una joven bastante esperanzadora, e intentará que Skywalker acuda en ayuda de la galaxia, que lo necesita.

Luke y Rey no estarán solos en Ahch-To, ya que los acompañarán una serie de nuevas especies con formas de «mini pingüinos», denominados «porgs», por un lado, y otros que se asimilan a unas tortugas disfrazadas de monjas (no es casual), conocidas como «las cuidadoras». Y Chewbacca, por supuesto.

Los porgs son nativos del planeta al que va a parar Luke y en donde se encuentra el primer templo jedi, que a su vez se encargan de custodiar «las cuidadoras» desde hace miles de años. Éstas últimas pueden comunicarse con Luke a través de lo que Johnson ha descrito como «una especie de habla escocesa en pez», pero no se encuentran especialmente emocionadas con que el jedi esté en la isla, simplemente «toleran» su presencia.

En Ahch-To hallaremos también unas pinturas rupestres relacionadas con la mitología y el pasado de los jedi, asegurando Johnson que la película abarcará esos temas, aunque no pretende fundar una nueva religión ni nada por el estilo.

De Ahch-To a la rebelión

En El despertar de la Fuerza también conocimos a Finn, interpretado por John Boyega. Al final de la anterior entrega, este personaje había quedado seriamente herido por Kylo Ren, dejándolo en coma. Cuando al fin despierta, en Los últimos jedi, Finn sigue teniendo esas ganas de salir huyendo de la Primera Orden, al igual que antaño. La muerte de Han a manos de su hijo y la lucha contra éste último solo ha conseguido aterrorizarlo aún más.

Sin embargo, esto empieza a cambiar cuando se topa con Rose Tico (nuevo personaje interpretado por Kelly Marie Tran), del servicio de mantenimiento. La muchacha piensa que él es un héroe por haber participado en la destrucción de la base Starkiller. Así lo describe Boyega:

«Él es un héroe para gente como Rose, que luchan junto a la Resistencia porque la Primera Orden ha destruido sus hogares».

Por el otro lado, Rose es una «don nadie», no solo frente a Finn, sino incluso al lado de su hermana mayor, Paige (Veronica Ngo), una francotiradora que lucha junto a Poe Dameron (Oscar Isaac). Esto empezará a cambiar tras el fortuito encuentro con el que era soldado imperial, que también empezará a hacer mella en Finn, quien ante la visión de esta chica de que él es un chico valiente y comprometido con la causa, intentará esforzarse más, aunque la idea de fugarse no desaparecerá del todo. De alguna forma, ambos terminan en Canto Bight, un nuevo planeta que vendría a ser un «Las Vegas con alienígenas».

En la Resistencia tenemos a otros dos personajes esenciales: Leia y Poe. La hermana de Luke, acostumbrada desde el comienzo de la historia a la pérdida (sin duda es la más fuerte de los Skywalker), no cesa en la lucha por la libertad de la galaxia. Sin embargo, la Resistencia se encuentra dividida tras la destrucción de la República, dejándola en un puesto muy vulnerable. A ello se le une la pérdida sufrida por Leia tras la muerte de Han a manos de su hijo.

Sin embargo, la líder de la Resistencia siempre encuentra esperanza, y parece que esta vez la hallará en Poe Dameron, cuya relación no es meramente profesional, sino familiar. Leia además sabe que no estará ahí para siempre y piensa en quién dejar el legado, viendo en Poe al candidato perfecto. Por eso, quiere que éste no se conforme con ser un piloto, sino también una persona sabia y sensata. Isaac lo describe del siguiente modo:

«Poe es en algunos aspectos un hijo adoptivo para Leia, pero también creo que ella ve en él el potencial para ser un verdadero y gran líder de la Resistencia».

El conflicto estará servido con la entrada de la vicealmirante Holdo (Laura Dern), quien conoce a Leia de antaño, pero aún no sabemos bien si esta especie de amistad continuará siéndolo o, por el contrario, acabará en rivalidad.

Lo que sí parece cierto es que Los últimos jedi tendrá un enfoque más político que el resto de películas de la saga, ya que Johnson siempre parece hacer bastante hincapié en este aspecto de la historia (y películas que le han servido de inspiración como el clásico Almas en la hoguera así parecen corroborarlo). A nosotros la verdad que esta arista nos emociona bastante y queremos saber ya más de Leia, Poe, Holdo, Finn, Paige y Rose.

Los malos (o no tan malos)

El líder supremo Snoke (Andy Serkis) tan solo apareció unos pocos minutos de metraje en la anterior entrega, a través de un holograma, pero ya sabemos que es «el gran villano en la sombra» de esta nueva trilogía (al menos aparentemente).

Sin embargo, Snoke no llega solo, siendo acompañado por una guardia pretoriana vestida de rojo y que se asimila a la guardia del Emperador en la trilogía clásica. Johnson resalta, no obstante, que estos nuevos soldados sí pelean, y saben cómo hacerlo. Su papel es básicamente el de ser los guardaespaldas de Snoke.

En cuanto a éste último, conoceremos más de él y sus objetivos en Los últimos jedi, pero los que estén ansiosos por conocer su origen tendrán que esperar; aunque, sí, tendrá más minutos de metraje que en El despertar de la Fuerza.

La octava entrega de la saga nos introducirá otro nuevo personaje cuyas alianzas todavía no están muy claras. Se trata de un hombre conocido simplemente (por ahora) como DJ (Benicio Del Toro). Por ahora, lo único que conocemos de este enigmático personaje es que se topa con Finn y Rose en Canto Bight. ¿En qué circunstancias? No sabemos. Básicamente, DJ no lucha por ningún bando, sino para su propio beneficio (económico).

Por ahora, este es el escenario presentado para los personajes (viejos y nuevos) en la próxima entrega de Star Wars. Lamentablemente, no ha salido nada (aún) sobre Kylo Ren, Hux o Phasma; aunque hay esperanzas de que se comente algo hoy (ya que todavía queda al menos un artículo pendiente de salida).

ACTUALIZADO: Sobre Kylo Ren, veremos especialmente cómo le ha afectado la muerte de su padre (asesinado por él mismo) y la humillación tras la derrota a manos de Rey. Para Johnson, su caída en el Lado Oscuro es comparable al tránsito del adolescente, pero de una forma mucho más insana. Al final, el director de Los últimos jedi resumen la relación entre él y Rey como «las dos cara de la luz y la oscuridad», mientras que Ridley afirma que su personaje se tomará el parricidio de forma mucho más personal.

«Ella no comprende a Kylo. Cuando todo lo que deseaba eran unos padres, ¿por qué alguien que los tiene haría algo así? Es algo más allá de su comprensión, es ridículo. Así que siente el dolor por la pérdida y además está la furia».

Lo que sí comparten ambos es un interés por el pilotaje, ya que veremos a Kylo a los mandos de un TIE Silencer similar al que tenía (cómo no) Darth Vader.

También ha habido ocasión para comentar algo sobre la capitana Phasma (Gwendoline Christie), que volverá para seguir complicándole las cosas a Finn. Puede que no sepamos mucho más sobre Phasma en esta octava entrega (para eso están la novela y la serie de cómics), pero sus apariciones serán más amenazantes y, en fin, presentes, que en El despertar de la Fuerza.

Las familias

Uno de los debates más encendidos en la red tras el final de la séptima entrega de la franquicia es quiénes son los padres de Rey. Este tema se abordará en Los últimos jedi, pero quizás no de la forma que esperamos. Para Johnson, el asunto es importante en el sentido de que también lo es para Rey, para que ella pueda aprender de ese pasado y no volver a caer en lo mismo en el futuro.

Para Ridley, su personaje encontrará las respuestas que está buscando, y descubrirá que al final no le importa tanto, mientras que lo esencial sea tener un lugar al que se pertenece. Al final, más allá de la familia y del punto de partida, lo importante es el destino (y esto lo dice también la actriz).

«Lo que es maravilloso es que no está tan claro, quién es bueno y quién es malo, y no soy yo diciendo «oh, dios mío, algunas personas se están volviendo malvadas». Siempre hay lugar para que la gente mala tome buenas decisiones, y viceversa»

Otro personaje principal con pasado misterioso es precisamente Finn, del cual también conoceremos más. Especialmente (probablemente) en su esperada confrontación con Phasma (recordamos que los soldados imperiales eran robados siendo bebés y entrenados por la Primera Orden).

No podemos terminar el artículo sin tocar (aunque sea brevemente) el periodo de luto por el que estará pasando Chewbacca tras la pérdida de Han Solo (quien por cierto estará «presente de alguna forma»). Nuestro querido wookie estará más serio y protector con Rey que de costumbre, lo que no quita que siga siendo nuestro peludo favorito y resiliente de siempre.

Salta a la red la descripción de un primer (posible) avance de Star Wars: Los últimos Jedi

Parece que todavía faltan unas semanas (¿en la Star Wars Celebration de abril?) para poder ver el primer avance oficial de Star Wars: Los últimos Jedi, pero algunos afortunados ya han tenido acceso a una pequeña muestra por parte de Disney y Lucasfilm, concretamente durante una reunión en Denver con acreedores. Daniel Miller, de LA Times, habría estado presente y esto es lo que ha podido avanzar a través de su cuenta de Twitter (advertimos que parecen ser filtraciones bastante fiables, por lo que, quien quiera mantenerse lo más alejado de SPOILERS posible, se retire ahora):

  • Luke le pregunta a Rey «¿Quién eres?» Después se la vería a ella manejar hábilmente el sable láser.
  • También aparecen: Finn, Leia y Chewbacca.
  • Se pueden observar distintos tipos de paisajes: montañas, desierto, bosques.
  • Una escena de un X-Wing bamboleándose en el aire, bajo el ataque de una nave gigantesca. Parecería un pajarillo herido.
  • La General Leia aparecería un solo segundo en traje militar y sin decir una palabra.
  • Un personaje (no dice cuál) diría en un momento del vídeo la frase «es ahora o nunca».

luke-skywalker

Por otro lado, y según recopilan en los foros de The Jedi Council, podría verse en el mismo vídeo, sin ningún orden en particular, lo siguiente:

  • Luke dentro de una cabaña en Ahcho-To preguntándole «¿Quién eres?» a Rey.
  • Finn en uniforme de la Primera Orden sobre un puente dentro de un destructor estelar (o una gran nave).
  • General Leia.
  • Algunas escenas de Rey entrenando con el sable láser.
  • Capitana Phasma.
  • Chewbacca rugiendo.
  • Poe en el interior de la cabina de su X-Wing gritándole «es ahora o nunca» a BB8.
  • Naves volando en el espacio.
  • Un X-Wing a punto de estrellarse.

Además, parece que en la demostración de Disney se verían varios paisajes no vistos hasta la fecha en una cinta de Star Wars, lo que promete nuevos y desconocidos planetas. ¿Lo más llamativo de todo esto (aparte del aparente desconcierto de Luke con Rey)? Que no habría ni rastro de Kylo Ren. Tampoco se lo ha podido ver en las escasas muestras de merchandising que han aparecido hasta la fecha. ¿Lo estarán ocultando por algún motivo en especial? Cada vez falta menos para saberlo.

leia el despertar de la fuerza