Capitana Marvel: Una líder necesaria

Originalmente, el nombre de Capitana o Capitán  Marvel fue usado por distintos superhéroes de la editorial Marvel Cómics. Entre los muchos que supieron llevar el nombre y legado, los siguientes son los más destacados:

  • Mar-Vell
  • Mónica Rambeau
  • Genis-Vell
  • Phyla-Vell
  • Khn’nr
  • Noh-Varr
  • Carol Danvers.

Aunque está demostrado  que es un personaje con muchas encarnaciones y no falto de cierto grado de polémica, es por ahora su última y más conocida etapa la que hoy nos convoca.

Hay un dicho  en el folclore popular que reza que a veces es bueno dar dos pasos para atrás para luego dar uno hacia adelante. Esta película lo confirma, ya que funciona tanto como una precuela así como paso inicial de un universo en ciernes que es hoy una aceitada máquina, un reloj suizo del entretenimiento sin más.

Capitana Marvel. Disney y Marvel

Capitana Marvel propone, un atractivo y apetecible viaje en el tiempo no solo para conocer el comienzo de todo, sino también un retorno a la  década de 1990, la cual humildemente un servidor considera idílica por varias razones.

Brie Larson aterriza en el papel de Carol Danvers con credenciales destacadas anteriores tales como The Room, Scott Pilgrim contra el mundo o Tienda de Unicornios, ésta última donde además de encarnar a la protagonista también dirige.

El puntapié inicial de su historia se apoya en que Carol Danvers, excelente piloto cuya necesidad de probar que es capaz para hacer todo lo que se propone es relegada o rechazada por su entorno, se propone a sí misma para acompañar a la doctora Lawson (una sorprendente Annette Benning) en un vuelo de pruebas para el proyecto PEGASUS. Sufriendo un accidente tras una trepidante persecución, Carol es víctima de una explosión donde le son legados sus poderes.  Muy malherida después de esto, ella es salvada gracias Yon-Rogg (Jude Law), quien la toma bajo su tutela para entrenarla, siendo consciente del gran poder que ella heredó. Es así como Carol Danvers pasa a ser Vers, una soldado principiante, quien no pierde la chispa y las ganas para demostrar de lo que es capaz.

Capitana Marvel. Disney y Marvel

En una misión, donde las cosas no salen como se esperaba, Vers tiene un aterrizaje forzoso en la tierra, más precisamente en el techo de una tienda de Blockbuster (un guiño en pos de Netflix, productora a su vez de su debut como directora).

Es en la Tierra donde paulatinamente se desvelan los no pocos misterios de este personaje, que al igual que su cronología en el universo cinematográfico de Marvel, viene a reivindicar no solo el hecho de ser mujer, sino además que son las mujeres quienes pueden perfectamente liderar en tiempos de crisis.

La película es la guinda en el pastel del «UCM» por muchas razones:

  • Dar a la mujer el espacio que le corresponde no solo para pelear, sino también para liderar.
  • Que sea ejemplo de temple y confianza para muchas personas en los tiempos tan agitados que corren.
  • Brinda un mensaje feminista (con el que Disney no ha sido nada sutil), dando la pauta de que los tiempos pueden y deben cambiar.

Capitana Marvel. Disney y Marvel

Puntos positivos

  • Aunque DC se haya adelantado reclutando a Patty Jenkins para dirigir Wonder Woman, por parte de Marvel esta es su primera película dirigida por Anna Boden, una prometedora directora del círculo indie.
  • El regreso a la década de los 90’s tanto en ambientación como a través de la música se agradece, con canciones de bandas como No Doubt, Nirvana y Garbage, entre otros, es algo que un servidor ha encontrado nostálgico a la par que gratificante.
  • Brie Larson brinda una interpretación compacta y reivindicativa, habiendo mostrado sus credenciales en películas tales como The Room y hasta recibiendo saludos y felicitaciones por parte de Gal Gadot. Su química con Samuel L. Jackson es de lo mejorcito de la película.
  • Goose.

Puntos negativos

  • El guión presenta ciertas lagunas que luego no se explican y creo que toda película de este tipo debe ser clara para la gente que tal vez no haya leído los cómics.
  • Creo que Marvel podría haber adelantado todo mensaje feminista positivo ya a través de la Viuda Negra (Black Widow), interpretada en varias ocasiones dentro de su universo cinematográfico por Scarlett Johansson, pero sin haber tenido todavía una película en solitario, hecho que está pautado en un futuro no tan lejano (y desde hace varios años).
  • Las precuelas sirven para introducir nuevos personajes, explicar cosas inconclusas o para darle más relevancia a cierto hecho determinado, pero como a todas las de su tipo le falta la epicidad que derrochan por ejemplo las últimas de Los Vengadores y algunos elementos quedan en el aire (probablemente de cara a futuras secuelas).

Humildemente creo que la película se apoya demasiado en dar un mensaje positivo y lo logra con creces a expensas de dejar puntos demasiado ambiguos y un guión que cae demasiado en lugares comunes. Dicho de otro modo, la cinta cumple como punto de partida y nos brinda a un prometedor personaje, pero habiendo visto ya más de diez títulos de este calibre entre Marvel y DC, uno siente que se queda a medio gas.

Glass, una efectiva y arriesgada vuelta de tuerca al género de superhéroes

M. Night Shyamalan ya tenía pensado hacer una trilogía mientras rodaba El Protegido (Unbreakable, 2000), ya que se dio cuenta de que no podía meter a Kevin Wendell Crumb (quien posteriormente será interpretado magistralmente por James McAvoy) en una historia donde ya brillaban los personajes interpretados por Samuel L. Jackson (Elijah Prince) y Bruce Willis (David Dunn). Además, su productora de aquél entonces, Touchstone (actualmente perteneciente a Disney), se negó a financiar una secuela, a pesar de que a la cinta le fue bastante bien en taquilla. Fue así como, 16 años más tarde, surge la muy notable Múltiple (Split) y, en 2019, Glass.

Glass es de este modo el culmen de la historia ideada por Shyamalan allá por el 2000, una efectiva y arriesgada vuelta de tuerca al género de superhéroes que plantea cuestiones bastante interesantes y universales, como «¿es mi mente la que limita mis capacidades físicas?» o «¿hasta dónde puedo/quiero llegar?». Advertimos que al ser una secuela de ambas, El protegido y Múltiple, habrá SPOILERS de aquéllas.

Han pasado tres semanas desde la desaparición de Kevin Wendell Crumb (James McAvoy), más conocido por una de sus 24 personalidades La Bestia, o el conjunto de algunas de ellas, La Horda; a la par que encontraban con vida a una de las chicas que había secuestrado, Casey Cooke (Anya Taylor-Joy). Mientras, David Dunn (Bruce Willis) le sigue la pista junto a la ayuda de su hijo, el ya adulto Joseph (Spencer Treat Clark), a la vez que se ha ido granjeando el nombre de misterioso justiciero, el Centinela. Una serie de catastróficas desdichas lleva a que la policía encuentre a la vez a La Horda y a Dunn y sean llevados al hospital psiquiátrico Raven Hill, donde se encuentra interno desde hace años Elijah Prince (Samuel L. Jackson) y en donde los tratará a todos ellos la doctora Ellie Staple (Sarah Paulson).

Glass. Universal Pictures y Buena Vista International.

Este es sólo el punto de partida de una cinta que contiene elementos del cine de suspense, del de superhéroes y que suma características de títulos de internamientos (en algunos puntos puede incluso llegar a recordar a Alguien voló sobre el nido del cuco) y una última media hora repleta de giros sorprendentes, especialidad de Shyamalan.

Una de las cosas que más destacan en Glass es cómo ha ido hilando todo su director, también guionista y productor, hasta los más pequeños detalles, y cómo ha ido evolucionando en la trilogía desde una cinta más intimista como El Protegido hasta el thriller psicológico que te mantiene de principio a fin en tensión que es Múltiple, para volver al desarrollo de planteamientos que ya se iniciaban con la primera y que culminan aquí en Glass.

Otra virtud es cómo llega a lograr que todos los personajes brillen por igual, al menos los principales, labor que no debemos agradecer únicamente al guión sino al inmenso trabajo de sus actores. Desde un James McAvoy que se come la pantalla hasta un carismático Samuel L. Jackson, pasando por un Bruce Willis que encarna a la perfección la imagen del héroe ya entrado en una edad y que aún así se mantiene en movimiento por un estricto código de justicia. Lo mejor es que, a pesar de que la división entre el bien y el mal queda meridianamente clara, ninguno de ellos te cae mal y hasta sufres por su destino. La que sí logra ser centro de las iras también con bastante solvencia es el personaje que interpreta Sarah Paulson.

Glass. Universal Pictures y Buena Vista International.

Los secundarios Anya Taylor-Joy, Spencer Treat Clark y Charlayne Woodard se mantienen evidentemente en un tercer plano, pero su papel e influencia son a la postre esenciales en uno de los mejores finales que recuerdo y que Shyamalan de nuevo sabe unir a los orígenes de tan conocidos superhéroes como Superman.

La labor de dirección de Shyamalan y el trabajo de fotografía de Mike Gioulakis son asimismo notorios, manipulando juegos de luces y colores (por ejemplo, a David lo representa el verde, a Elijah el morado y a Kevin los ocres, y esto a su vez compone un significado en torno a sus psiques y roles). También se puede percibir cómo varía la intensidad de los tonos según las circunstancias emocionales de los protagonistas y algunos manejos de cámara van vinculados al argumento.

La banda sonora, compuesta por West Dylan Thordson (quien ya hizo lo propio en Múltiple), tras el legado de James Newton Howard en El Protegido, de quien de hecho ha recuperado algunas piezas para la ocasión, cumple en cuanto a la creación de una atmósfera a veces inquietante, otrora armoniosa, pero siempre envolvente.

Glass. Universal Pictures y Buena Vista International.

Algo positivo y negativo tanto de Glass en particular como de Shyamalan en general es que arriesga, lo que ha dado lugar a algún que otro bodrio frente a resultados magistrales. Para nosotros, esta cinta pertenece a éste último grupo, aunque la conclusión de alguno de los personajes y los giros de tuerca puedan dejar ojipláticos a más de un espectador (y no necesariamente para bien).

Esto a su vez conlleva que algunas decisiones o situaciones en el guión puedan verse un poco forzadas (¿no trabaja más gente en un psiquiátrico?), pero que al fin y al cabo siempre pueden justificarse en la manida y válida para todo «magia del cine».

En definitiva, si quieres ver una cinta de superhéroes más al uso, sin grandes sorpresas (positivas y negativas), pero que te va a hacer pasar un buen rato y ya, continua con las de Marvel o DC habituales. Pero si quieres algo más original dentro del género, que te puede dejar pensando y con unos personajes cuya psicología es algo más compleja y profunda (a pesar de que la división entre el bien y el mal sigue estando ahí), sin duda dale una oportunidad a Glass y (si no lo has hecho ya) a El Protegido y Múltiple.