Episode Ardyn, la tragedia de un sino inevitable

El pasado día 26 salió a la venta el que es último contenido descargable de Final Fantasy XV: Episode Ardyn, por 9,99€ en PlayStation y Xbox One. Como muchos sabréis, con este capítulo la entrega número quince de la saga llega a su punto final, a la espera únicamente de un libro recopilatorio de historias que narrarán lo que iba a suceder en el resto del contenido descargable que fue cancelado.

Pero estamos aquí para hablar de Ardyn. Mucho hemos especulado con el pasado del que es, para nosotros, personaje más interesante de Final Fantasy XV y uno de los mejores (sino el mejor) villanos de la franquicia. Para regocijo nuestro, casi todo lo que habíamos teorizado se ha ido cumpliendo. Y es que las pistas estaban ahí, pero había que hacer un ejercicio de observación llamativo (y lamentablemente el desarrollo de este videojuego de Square Enix sí debió de resultar bastante accidentado). Primero avisamos de que habrá SPOILERS de Final Fantasy XV y de Episode Ardyn. Segundo, de que somos conscientes de ciertas incongruencias en los distintos guiones de Final Fantasy XV y lo que lo rodea, siendo (para nosotros) lo más complicado todo lo concerniente a Ifrit (que no vamos a tratar aquí).

Para el caso, se ha reforzado aún más la idea de que Ardyn se equipara a una especie de «Jesucristo oscuro» en la historia de Eos. No solo el propio diseño y su pasado (más el hecho de resultar al final inmortal): Ardyn tiene además 33 años en el momento de «morir» y es asignado como chivo expiatorio de los pecados de la humanidad por el dios Bahamut.

Ardyn «Jesucristo» Lucis Caelum en Episode Ardyn: Prologue

También hemos acertado en la existencia de una primera oráculo que guarda un especial vínculo con Ardyn, la figura clave del hermano usurpador y Bahamut como villano en las sombras. De ello hablaremos a continuación.

Aera, la primera oráculo

Empezamos por uno de los personajes a los que al fin podemos poner rostro y que es definitivo para el «lore» de Eos, similar al papel que tenía Lucrecia en Final Fantasy VII.

La familia de oráculos Nox Fleuret es básica para mantener el equilibrio en Eos, ya que se comunican con los sidéreos y transmiten al pueblo sus designios, ocupando la parte religiosa de esta historia.

La primera oráculo fue Aera Mils Fleuret, quien además era prometida de Ardyn y estaban enamorados, en claro reflejo de Noctis y Luna años más tarde. Gracias a lo que podemos ver en Episode Ardyn y en Episode Ardyn: Prologue, la relación entre Ardyn y Aera está más desarrollada que la de los protagonistas (algo que sinceramente no era difícil). Por un lado, ambos tienen una base de amistad y entendimiento mutuo y están en claro y estrecho contacto desde hace tiempo (como se percibe por el hecho de que Aera se lamente de llevar días sin ver a su prometido y salga por ello a su encuentro); frente a la mera relación epistolar (idealización de la infancia además) de aquéllos.

Por eso es comprensible el lamento y frustración que produce la cancelación del episodio dedicado a Luna, que ya había sido anunciado junto al que nos ocupa, al de Aranea y el de Noctis. Sin embargo, si nos ponemos escépticos, el equipo de desarrollo ya había añadido un par de escenas nuevas en actualizaciones posteriores y en la Royal Edition que tampoco habían podido arreglar al personaje y mostrar su potencial.

Ardyn y Aera en Episode Ardyn

Volviendo a Aera, su papel es clave también en quien es la que recibe el mensaje de Bahamut, el cual cambia totalmente el sentido de esta historia, y el hecho de haber tenido que ocultárselo a Ardyn la llena de culpa. Esto quizás puede parecer algo confuso al principio, por ello vamos a resumirlo aquí:

  • Ardyn es asignado por los sidéreos para ser el salvador de la humanidad ante la «plaga de las estrellas», otorgándole para ello el arma Raksasha, similar a la espada del Místico que porta Somnus. A su vez, Aera es nombrada oráculo.
  • Aera recibe en Episode Ardyn: Prologue el verdadero designio de Bahamut, que es que Ardyn, contaminado por la plaga que él mismo está intentando curar (tal como el propio sidéreo buscaba para erradicar así la «plaga de las estrellas» de una vez), sirva de chivo expiatorio de la humanidad corrompida. Aera queda consternada ante este descubrimiento y se lo cuenta a Somnus, ya que Ardyn no está presente y se intuía que sería el primer rey de Lucis al haber sido asignado inicialmente como salvador.
  • Somnus (hablaremos con más detalle de él), que se ha visto es ante todo un tipo pragmático y severo que piensa que el fin justifica los medios, entiende con este mensaje que debe deshacerse de Ardyn y coronarse él como rey «por el bien mayor».
  • Vuelve Ardyn y Aera no se ve capaz de confesarle la verdad. Somnus lo ataca y la muchacha defiende a su prometido, muriendo en el procedo. Ardyn empieza a ser consumido por la corrupción y cae ante Somnus y sus hombres, quienes lo encarcelan de por vida en una isla y pasa a ser conocido para la posteridad simplemente como «Adagium» (saben que Ardyn no puede morir hasta que no lo mate un «recipiente de luz», el Elegido, acabando así con este desequilibrio, según Bahamut).
  • Aera muere reconcomida por la culpa y Somnus, más entero y frío, se vuelve primer rey de Lucis. Dos mil años más tarde, uno de sus descendientes, Noctis, será quien acabe con Ardyn.

Hay diversas opiniones sobre si la oráculo siguiente a Aera sería la que aparece reflejada en «Cosmogonía» al lado de Ardyn o de si se trata de otros personajes. También existen teorías sobre si Aera en realidad sobrevive al episodio fatídico (y que incluso de a luz a un hipotético descendiente de ella y Ardyn, de ahí que los poderes de Luna sean parecidos a los de éste y al vínculo extraño que el pelirrojo busca con ella y con Ravus, que por otro lado también puede ser explicado desde una perspectiva de venganza y resquemor hacia lo existente). Debido a que Final Fantasy XV se ha terminado oficialmente, y a no ser que algún miembro de Square Enix diga lo contrario, lo que se deja más claro es que Aera fallece víctima del ataque de Somnus.

El asombroso parecido de Aera con Luna (parentesco aparte) y el que Ardyn acabe herido y enloquecido (más aún) tras la revelación de Bahamut aportan explicación al ataque a la muchacha en Altissia y la mirada que Ardyn le dirige momentos antes.

Tanto Aera como Ardyn y Somnus son así peones de los dioses, algo que detallaremos más adelante.

Somnus, un villano… pero no tanto como parece

Tanto Episode Ardyn: Prologue como Episode Ardyn retratan a Somnus el 98% del tiempo básicamente como a un capullo… Hasta la pelea final con Ardyn en su episodio, donde muestra más culpa y desasosiego por lo ocurrido con su hermano. ¿Por qué es esto?

Por un lado, como decíamos, Somnus es retratado como un joven pragmático para quien el fin justifica los medios. Sorprendentemente, parece haber pasado a la posteridad como un buen monarca y fundador. Por otro, Somnus es un tipo joven durante los acontecimientos de Prologue, seguramente mucho más impulsivo que su versión fallecida hace milenios y ahora protector de Insomnia.

Es desde la perspectiva de Ardyn cuando vemos al Somnus más sádico y retorcido, algo lógico teniendo en cuenta que es el causante principal de su situación actual. Lo sencillo para la dolida mente de Ardyn, quien además es descrito como idealista y soñador (antes de volverse loco), es ver a su hermano como un usurpador celoso y cruel, que no se detiene a pensar en los demás cuando se trata de lograr sus objetivos. Por eso mismo, Ardyn es el más desconcertado ante la actitud de Somnus para con él tras la batalla. Viéndose derrotado, es cuando se muestra más vulnerable y su verdadera cara.

Con la revelación de Somnus hay todavía un misterio que queda aparentemente sin resolver: ¿Quién es Izunia?

Tal como se ha anunciado en el último número de «Famitsu», Izunia, cuyo significado en japonés es comadreja, no es más que un alias escogido arbitrariamente por Ardyn de entre todos los recuerdos que fue absorbiendo al corromper a sus víctimas. Tal como se indica en la narración de Episode Ardyn, estas vivencias llegan a confundirse con las suyas propias. Esta explicación entraría en conflicto con algunas traducciones de Final Fantasy XV. Por otro lado, podríamos verlo como una especie de «origen del Joker» (con quien Ardyn guarda no pocas similitudes), en el sentido de que éste está tan ido de la olla que ya ni recuerda cuál es su verdadero pasado, inventándose (o recordando) varios en el camino.

En cuanto a Adagium, resulta ser el nombre en clave para Ardyn durante el largo proceso de desarrollo, el cual rescataron para la ocasión.

¿Quién es entonces el verdadero villano y causante de las desdichas no solo de Ardyn, sino de todos los personajes?

El verdadero villano: Bahamut

Tras el cambio de actitud de Somnus aparece Bahamut y le revela la dura verdad a Ardyn, una que ni Aera se había atrevido a contarle: todo era un plan de los propios sidéreos para acabar con el enorme desequilibrio que originalmente había causado uno de los suyos, Ifrit.

Para ello, Bahamut, quien ve en los humanos a meros peones, había ideado convertir a Ardyn en el recipiente principal de toda esa oscuridad producida por la plaga y habría de ser finiquitado por otro ser que en contraposición irradiara luz, de ahí que Noctis fuera el elegido. Ambos son chivos expiatorios que acabarían junto a ellos mismos con toda esta desigualdad, generándose así una nueva era de armonía.

Que Ardyn estaba corrompido era algo sabido tanto por Aera como por Somnus, por lo que ambos intuirían que solo era cuestión de tiempo este final. Lamentablemente, los hechos no se dieron exactamente como preveían.

Que Bahamut se intuya como figura amenazante e incluso maligna no es algo nuevo en Final Fantasy XV. Ya se percibe al final de Omen, donde Regis aparece hablando con una voz (claramente la del draconiano), que en su momento llegó a teorizarse que fuera la del propio Ardyn por su carácter amenazante.

Bahamut le cuenta a Ardyn un secretito al final de Episode Ardyn

En el avance de Dawn también se prevé algo de esto (de hecho la ilustración de Regis con el niño Noctis en brazos se deja ver en Episode Ardyn). Las figuras que se yerguen sobre ellos son los reyes del pasado y guardianes de Lucis (se supone que por ahí debe de andar Somnus), en el momento que se intuye le ha sido revelado al monarca que su hijo es el Elegido, con tintes claramente dramáticos.

En definitiva, los verdaderos villanos de Final Fantasy XV son los sidéreos, más concretamente Bahamut, ya que son los que manipulan los acontecimientos (y a los personajes) con la búsqueda de un objetivo (por un mal que en cierto modo ellos mismos crearon). No es la primera vez en la saga que una fuera sobrenatural o ajena a este mundo se esconde detrás del que ha sido antagonista durante casi todo el juego, revelándose como jefe final (ahí tenemos a Jénova en Final Fantasy VII, Artemisa en Final Fantasy VIII, Tiniebla Eterna en Final Fantasy IX, etc.).

Los remanentes de Final Fantasy Versus XIII

Esto nos lleva al siguiente punto, y es que la base de la historia resulta entonces bastante similar a la de Final Fantasy XIII, pero con la diferencia de que en aquél los protagonistas se revelaban contra el designio de los dioses y peleaban contra ellos. Ardyn puede intentar también negarse a seguir los designios de Bahamut, pero en dicho caso el sidéreo lo castiga brutalmente.

Recordamos que inicialmente Final Fantasy XV iba a ser Final Fantasy Versus XIII, la otra cara de la moneda de Final Fantasy XIII que compartiría la misma mitología. Como sabemos, el proyecto no acabó viendo la luz, pero los remanentes pueden percibirse especialmente en estas bases argumentales.

Otro de los elementos que iban a caracterizar a Versus XIII, en palabras de Tetsuya Nomura (su director original), era su sentido de tragedia y cierta influencia de las obras de William Shakespeare, algo que asimismo continúa vislumbrándose con Noctis y Ardyn como víctimas inevitables de su destino ya predeterminado.

Finalmente, el otro rasgo que queda perfectamente perfilado a través de la historia de Ardyn es que, quitando quizás a Bahamut, no hay un villano real en la historia. Un tráiler de Versus XIII daba inicio precisamente con una cita de Shakespeare: «No existe el bien ni el mal en sí mismos, sino es la misma mente humana la cual los genera«.