Violet Evergarden, la belleza hecha anime

Violet Evergarden (ヴァイオレット・エヴァーガーデン) es un título de anime hecho para Netflix por el estudio Kyoto Animation (Koe No Katachi, Kyoukai No Kanata) y dirigido por Taichi Ishidate, lo cual nos da ya una idea de la calidad que tiene su animación. Aún así, llegan a superarse y alcanzan aquí unas cuotas de belleza en dibujos difícilmente vistas con anterioridad (máxime si tenemos en cuenta que se trata de una serie de 13 episodios y un especial y no una película).

Basada en una serie de novelas escritas por Kana Akatsuki e ilustradas por Akiko Takase, la historia se centra en un mundo ficticio (inspirado claramente en la Europa de primera mitad del siglo XX) donde la protagonista, una joven llamada Violet, decide hacerse «doll» (persona que escribe cartas expresando las emociones y mensajes de los remitentes, entre otras tareas de similar índole) con la intención de descubrir el significado de la expresión «te quiero» y buscar su reinserción en una sociedad recién salida de una cruenta guerra.

El principal problema con el que se topa Violet es que ella misma es incapaz (en principio) de expresar emociones, ya que no las entiende (desde su nacimiento había sido criada para ser una niña-soldado, sin más); pero con muchísimo empeño de su parte y con apoyo de la gente que se va cruzando en el camino poco a poco irá adquiriendo conocimientos sobre las emociones humanas y nuestra peculiar manera de transmitirlas.

Al tratarse por lo general de capítulos autoconclusivos, el espectador irá acompañando a Violet en su camino, conociendo nuevos lugares y curiosos personajes de distintas procedencias, clases sociales y con sus diversos problemas (especial mención al episodio que gira en torno al padre que perdió a su hija). Aunque esto pueda resultar en ciertos altibajos de calidad, lo cierto es que ésta difícilmente decae y se mantiene siempre en torno al notable con picos de sobresaliente.

No nos referimos solo a la animación (magistral se mire por donde se mire), ya que Violet Evergarden es una pura delicia para los sentidos, con dibujos bonitos, diseños de personajes atractivos (hechos por la propia Akiko Takase), coloridos y realistas paisajes (muy europeos) y colores absolutamente preciosos; acompañada de una banda sonora (compuesta por el californiano Evan Call) repleta de sentimiento y con un opening y ending («Sincerely» de TRUE y «Michishirube» por Minori Chihara, respectivamente) que ya transmiten melancolía. Es también la historia, bastante cuidada; aunque no está hecha para todo el mundo.

Con esto último hacemos referencia especialmente a la gente que acuda a un título de anime buscando acción o belicismo puro y duro. Violet Evergarden es mucho más intimista, habla de las emociones, de cómo las expresamos, es incluso antibelicista al reflejar a una sociedad herida por un conflicto que se cree superado… en este sentido, puede llegar a ser considerada hasta ñoña (servidora por ejemplo ya lloraba con el primer capítulo).

Por otro lado, si se hurga un poco más en el fondo podemos encontrarnos con más significado del que puede aparentar con su precioso envoltorio. Podemos hallar así cuestiones como qué son las emociones, qué nos hace humanos, el sinsentido de las guerras y sus heridas invisibles o la facilidad (o no) con la que podemos llegar a establecer vínculos (o romperlos).

La otra gran virtud de este título es su elenco de personajes, ya que se trata básicamente de eso, una serie de personajes. Desde la propia Violet, una protagonista femenina autosuficiente desde que tiene uso de razón… menos en la parte emocional, donde se asemeja más a un infante (dando un curioso giro de tuerca al prototito de personaje femenino dependiente a nivel físico pero excesivamente sentimental); hasta Gilbert (el misterioso superior y maestro de Violet y una figura clave en su vida y en el argumento), pasando por Hodgins, Cattleya o Luculia, por lo general todos los personajes se hacen simpáticos y son significativos de una u otra forma en el crecimiento de la protagonista.

En definitiva, podemos decir que Violet Evergarden es hasta la fecha el mejor anime que ha estrenado Netflix (con permiso de Devilman Crybaby) y sin duda uno de los estrenos más interesantes de 2018. Eso sí, si estás esperando encontrarte con una serie bélica y repleta de batallas te llevarás una decepción, ya que su naturaleza es bastante más intimista, sentimental, pausada y profunda. Si crees que títulos como Clannad o Anohana son pornografía emocional, huye. Ahora, si quieres pasar un rato emotivo y deleitando la vista y el oído, no lo pienses más y vela. Nosotros estamos ya ansiando ver la película-secuela que estrenará en invierno 2020 y que se prevé cierre la historia narrada en las novelas.