Star Wars: El ascenso de Skywalker, un ¿punto final? con momentos épicos y algo de trampa

J. J. Abrams no lo tenía fácil. Tras la repentina salida de Colin Trevorrow de la dirección del noveno y último episodio y la muerte de Carrie Fisher (quien a todas luces desempeñaría un papel principal en esta entrega), decidió retomar las riendas tras su inicio con El despertar de la Fuerza y cerrar la trilogía y la saga con El ascenso de Skywalker.

Para escribir el guión eligió a Chris Terrio, quien ya había trabajado junto a Ben Affleck en Argo y a Zack Snyder en Batman v Superman, dando origen a una narrativa que resulta quizás lo peor de la película por su barroquismo y sus irregularidades, con una primera parte que, de verdad, no da respiro. Pero del estilo que uno se pregunta si los personajes no deberían parar a comer o echarse una siestecita.

Tras este inicio sigue un segundo acto más intenso y un final que ya es el colmo del horror vacui, con apariciones de última hora, regresos inesperados, villanos que cambian de planes sobre la marcha y más regresos inesperados… Lo que puede hacerle parecer un despropósito. Por suerte, el irregular ritmo y la sobrecarga van acompañados de momentos épicos, tensos, dramáticos y románticos… Y nostalgia. Mucha nostalgia.

Los que más sobresalen (para variar) en El ascenso de Skywalker son Rey y Kylo Ren, con una Daisy Ridley y un Adam Driver que siguen desprendiendo esa química que los lleva de enemigos que no pueden ni verse a tensión sexual no resuelta (y algo más). El arco argumental de estos dos personajes ha sido quizás el más constante de esta trilogía.

Star Wars: El ascenso de Skywalker. Disney y Lucasfilm.

Ridley también desprende buena química con John Boyega (Finn) y Oscar Isaac (Poe Dameron, quien por cierto a su vez tiene buena química hasta con una roca de Jakku). Suya es la primera y frenética parte de la película, donde la acción se atropella y no paran de soltar chascarrillos (alguno más afortunado que otro).

Mientras que el personaje de Poe está aquí más aprovechado, me temo que no podemos decir lo mismo de Finn, quien sigue encorsetado en la figura del secundario cómico (y pelín obsesionado con Rey). Lo mejor aquí, una vez más, el vínculo entre Boyega e Isaac, junto a las (breves, pero intensas) presentaciones de dos nuevos personajes: Zorii Bliss (Keri Russell, acompañada de un personajillo ciertamente hilarante) y Jannah (Naomi Ackie).

Una de las mayores complicaciones a la que se enfrentaba Abrams era cómo retomar el papel de Leia tras el fallecimiento de Fisher, optando por recuperarla con material rodado y no utilizado de otras películas, y hemos de decir que esto es algo que han resuelto sorprendentemente bien. Es verdad que algunos diálogos se perciben un poco inconexos y forzados, pero suyo es uno de los momentos más emotivos de la cinta, y esto es todo un logro.

Star Wars: El ascenso de Skywalker. Disney y Lucasfilm.

Leia no es la única cara conocida que hemos visto (sí, hay bastante fan service, uno mejor integrado que otro). Billy Dee Williams vuelve a ponerse la capa como Lando Calrissian y la verdad es que agradecemos su presencia, enérgica a pesar de la edad. También regresa Mark Hamill como Luke Skywalker en un momento breve pero sustancial (aunque nos preguntamos si a los fantasmas de la Fuerza les crecen las greñas). C3PO (Anthony Daniels) tiene aquí mayor peso argumental que en las dos anteriores entregas, lo que añade su característica vis cómica; y Chewbacca (Joonas Suotamo) protagoniza uno de los (breves) momentos más inquietantes del metraje.

Uno de los retornos más anunciados y esperados era el de Ian McDiarmid como el emperador Palpatine. Será con seguridad también uno de los más polémicos tras El ascenso de Skywalker. Digamos que su personaje es víctima de la sobrecarga que trae toda la película y especialmente el final, pero su presencia sirve (aparte de para el citado fan service) para cerrar una trama a nivel más global y que incluya a las precuelas, ya que hay, eso sí, decepcionantes «ausencias».

Uno de los elementos característicos de Star Wars son sus planetas, y aquí Abrams cumple su parte. Pasaana, Kimiji, Exogol… Algunos nos resultan más familiares que otros, pero sin duda la dirección artística en algunos de ellos es para tenerla en consideración.

Star Wars: El ascenso de Skywalker. Disney y Lucasfilm.

Decir que la banda sonora de John Williams es uno de los puntos fuertes de la película es caer en la redundancia. El compositor regresa aquí a sus 87 años y nos trae consigo temas ya familiares y otros nuevos. La experiencia no sería la misma sin su partitura y se perdería la mitad de la emoción en el camino. Hay un tema en especial, «Farewell», que nos pone los pelillos de punta al escucharlo.

No queríamos terminar la crítica sin aclarar que, si bien El ascenso de Skywalker rehuye de algunos de los temas planteados por Los últimos jedi (como hiciera aquélla con El despertar de la Fuerza, lo que sí denota una cierta falta de unión metanarrativa en la trilogía), está lejos de mandarle un «fuck you», como hemos llegado a leer. Hace referencias claras a acontecimientos sucedidos en el octavo episodio e incluso se da cierto cameo de unos bichitos bastante reconocibles.

En definitiva, El ascenso de Skywalker tiene fallos como película notorios, como son la ausencia de la personalidad que desprendía su antecesora, una narrativa con ritmo errático o conclusiones tramposas a alguna de sus tramas (no olvidemos que está Abrams tras la cámara y Disney tras el marketing). Sin embargo, lo compensa con fan service que hará las delicias de nosotros, seguidores de la saga (servidora también se llevó su parte del pastel) y momentos épicos y hasta emotivos, con alguna carcajada, sonrisa y hasta llanto. Al fin y al cabo, George Lucas no creó esta saga situada en una galaxia muy, muy lejana para contentar a los académicos (que inicialmente no dieron un duro por ella y la vapulearon), sino para seguir despertando a ese niño interior que ansía con visitar distintos mundos y acompañar a sus héroes por duros derroteros.

Información y primer e impresionante avance de Star Wars: The Rise of Skywalker

La convención Star Wars Celebration ya ha abierto nuevamente sus puertas, esta vez en Chicago, y prometía traernos las primeras novedades sustanciales del noveno (y por ahora último) episodio de Star Wars. Y vaya si lo ha hecho.

En el panel dedicado a esta entrega, con Stephen Colbert presidiendo, acompañado por el director, J.J. Abrams; la productora, Kathleen Kennedy; R2D2 y el actor que encarna a C3PO, Anthony Daniels; Daisy Ridley (Rey); John Boyega (Finn); Oscar Isaac (Poe Dameron); Kelly Marie Tran (Rose Tico); Billy Dee Williams (Lando Calrissian); Joonas Suotamo (Chewbacca); Naomi Ackie (Jannah); y… sorpresa final, el regreso de Ian McDiarmid (Palpatine), lo que terminó por enloquecer a los asistentes y a reproducir por segunda vez el primer avance.

A lo largo del panel se mencionó, como información sobre lo que viene con Star Wars: The Rise of Skywalker (que traducido de forma literal sería El alzamiento de Skywalker), el director y la productora mencionaron que toda esta trilogía gira en torno a la nueva generación. Abrams en concreto ha asegurado estar ilusionado con las dinámicas entre los personajes.

Hablando de éstas, han bromeado sobre un triángulo entre Rose, Finn y Rey que John Boyega ha corregido que en realidad sería un pentágono con Poe, a quien según él sin duda deberían añadir. Daisy Ridely ha definido el vínculo entre el trío protagonista como «es amistad. Es familia (…). Una colección preciosa de gente».

Sobre lo que veremos entre Kylo y Rey, Daisy Ridley ha señalado que tendremos que esperar a la película. Según ha informado el periodista Clayton Sandell, Ridley le habría dado su opinión sobre esta relación a Abrams, en la que se profundiza mucho más en el noveno episodio. También han comentado divertidos sobre la famosa escena de Ben semi-desnudo en Los últimos jedi.

Por su parte, Billy Dee Williams parecía estar encantado con Abrams y ha defendido las decisiones que tomó Lando en El imperio contraataca.

Aparte de esto, bromas entre los actores y realizadores aparte, se ha confirmado que el personaje interpretado por Naomi Ackie se llama Jannah y que BB8 tendría un nuevo «amigo droide» llamado Dio.

Por lo demás, el primer avance (realmente impresionante, sorpresa final incluida) nos intuye la aparición (o mejor dicho, regreso) de una amenaza mayor que seguramente pondrá contra las cuerdas a todo el equipo, incluyendo seguramente a Kylo Ren (interpretado por Adam Driver, quien no pudo asistir por problemas de agenda). Este enemigo entre las sombras ataría asimismo las tres trilogías y cierto legado que se referencia de forma directa y explícita en el título.

Filtraciones hechas por usuarios «de fiar» con anterioridad en Reddit y en el portal MakingStarWars hablaban de que C3PO tendría mayor protagonismo (lo que podría confirmarse en una de las imágenes mostradas durante el panel) y un papel más activo esta vez, que los llevaría a él y a los protagonistas a algún tipo de artefacto vinculado a Anakin.

El usuario de Reddit habló a su vez de un incipiente posible romance entre Kylo Ren y Rey (o al menos de sentimientos románticos de éste hacia la muchacha, que lo tendrían confundido) y que el ahora Líder Supremo estaría buscando (o invocaría) a un nuevo personaje denominado «Oráculo», una especie de parásito enorme sobre la cabeza gigantesca de un bebé.

The Rise of… ¿Skywalker?

Por otro lado, hemos tenido la revelación del título de esta última entrega, el cual suena a la par épico (por todo lo que conlleva de cierre de tramas y uniones) y misterioso. Porque, claro, lo de Skywalker es cuanto menos ambiguo.

El único Skywalker que oficialmente queda pululando con vida es el mismo Kylo Ren (descartamos a Leia por el trágico fallecimiento de Carrie Fisher, a pesar de que el personaje continúe con vida mediante escenas rodadas de capítulos anteriores), quien en dicho caso daría a entender una redención, ya que al final de Los últimos jedi claramente se había quedado más en el Lado Oscuro. El hecho de que se pueda escuchar brevemente el tema de Kylo durante la revelación del título en el tráiler y de que quizás una cinta de algo menos de 3 horas  de duración(con varias cosas que contar y arcos para cerrar) no daría para tantos giros apoyan esta teoría.

La aparición de Palpatine (confirmada con la presencia sorpresa de McDiarmid en el panel y posteriormente por el propio Abrams) también hace pensar en la posibilidad de la redención de Ben Solo, ya que se vería obligado a unir fuerzas con el otro bando para acabar con la verdadera y temible amenaza, al igual que ya hiciera su abuelo. Por otro lado, las palabras de Kylo Ren en El despertar de la Fuerza sobre terminar lo que Darth Vader empezó cobrarían aquí un mayor significado.

Otra posibilidad que se baraja (y que no excluye a la anterior) es un regreso (¿físico? ¿espiritual?) de Luke (que sabemos será interpretado aquí por Mark Hamill, ya sea en forma de fantasma con la Fuerza, flashback, etc.), lo cual sumaría peso al título.

Finalmente, otra teoría que lleva circulando por la red desde el inicio de esta trilogía es que sea Rey esta Skywalker, como una especie de hija secreta de Luke o similar. En Los últimos jedi Kylo le decía a la muchacha que no era más que la hija de un par de borrachos de Jakku, algo que, en palabras del director Rian Johnson, era cierto desde la perspectiva de Solo. Abrams ha declarado en esta Star Wars Celebration que, si bien el noveno episodio «honrará al octavo», también «hay algo más» a explorar en los orígenes de Rey.

Hay otra idea que sobresale entre los espectadores: ¿y si Rey en realidad estuviera de alguna forma vinculada con Palpatine? Esta es otra teoría que lleva años circulando y que, con el regreso del ex emperador, no hace más que ganar posiciones.

El significado del título puede ser asimismo simbólico, máxime con el archienemigo que es Palpatine de vuelta. Tanto éste como los Skywalker han sido los que han impulsado la narrativa de la historia desde la primera trilogía y (por lo que se ve) hasta la última. Que Ben (solo o probablemente acompañado) acabe de una vez por todas con ese desequilibrio mayor en la Fuerza y en la historia de la galaxia que es Sidious y establezca(n) la victoria final y definitiva de los Skywalker (de nuevo, acabando lo que Vader empezó) los asentaría a su vez como linaje y legado.

Sea como sea, aún queda mucho para el estreno el próximo 19 de diciembre de Star Wars: The Rise of Skywalker, y todos sabemos lo habitual que es para J.J. Abrams jugar a confundir al espectador.

Por cierto, todas las imágenes corresponden a fotos sacadas por asistentes al evento y subidas a Twitter. No son nuestras. Mostramos las que nos han parecido más relevantes.

Enlaces de interés:

Star Wars IX presenta posible poster y diseños de los personajes

Star Wars IX presenta posible poster y diseños de los personajes

La próxima Star Wars Celebration dará comienzo el 11 de abril en Chicago, donde se prevé que el director de la última película de la franquicia ideada por George Lucas, J.J. Abrams, junto a la productora Kathleen Kennedy y una parte del elenco, revelen el título oficial y el primer tráiler de este noveno episodio.

Sin embargo, ya han empezado a surgir las primeras filtraciones, a todas luces oficiales, como el que podría ser primer cartel de Star Wars IX, según el portal web The Geekiverse.

Del póster destacan los «nuevos» atuendos de Kylo Ren y Rey, que parecen un claro regreso a sus versiones de El despertar de la Fuerza, pero con notorias diferencias: Rey lleva tapada la cicatriz que se hizo durante la batalla junto a Ben contra la guardia de Snoke; y Kylo por su parte parece llevar una túnica con capucha similar a la del Emperador Palpatine.

Más allá de esto, por supuesto no podemos dejar de fijarnos en los Caballeros Ren y en los soldados de asalto rojos. C3PO figura asimismo en una posición predominante (sobre todo respecto a las dos anteriores entregas de esta trilogía), lo que coincide con últimas filtraciones sobre el argumento, que hablan de que el droide sería determinante en el hallazgo de un holograma/recuerdos grabados por Anakin Skywalker que hablan de un viejo artefacto jedi.

Un usuario de Reddit además ha compartido esta nueva imagen donde podemos ver de forma más nítida (en comparación con filtraciones anteriores) a los protagonistas de la última trilogía y a nuevos personajes, así como al esperado Lando Calrissian (a quien vuelve a encarnar Billy Dee Williams).

De entre los nuevos rostros, destaca aquí el personaje de Jannah, que es interpretada por Naomi Ackie; y la misteriosa Zorii, también presentes en el póster.

Star Wars IX, aún sin título oficial, se estrenará el próximo 19 de diciembre. Repiten en el reparto Daisy Ridley (Rey), John Boyega (Finn), Oscar Isaac (Poe Dameron), Adam Driver (Kylo Ren), Mark Hamill (Luke Skywalker), Billy Dee Williams (Lando Calrissian), Joonas Suotamo (Chewbacca), Domhnall Gleeson (General Hux), Kelly Marie Tran (Rose), Anthony Daniels (C3PO), Jimmy Vee (R2D2), Lupita Niong´o (Maz Kanata), Billie Lourd (Connix) y grabaciones de Carrie Fisher en anteriores episodios para Leia. De caras nuevas, a la mencionada Naomi Ackie se unen Richard E. Grant, Keri Russell y Dominic Monaghan.

¿Posible escena entre Kylo Ren, Anakin y Darth Vader en Star Wars IX?

El episodio IX (aún sin título) de Star Wars, dirigido por J.J. Abrams, va tomando forma al haber iniciado su rodaje hace unas semanas. Tras haberse filtrado fotos con Poe (Oscar Isaac), Finn (John Boyega) y Chewbacca (Joonas Suotamo), lo que nos hace pensar en que la trama de la Resistencia irá, al menos en parte, nuevamente separada de la de la Fuerza, el medio británico Express habla de una supuesta escena que involucraría a Kylo Ren (Adam Driver), Darth Vader y Anakin Skywalker (Hayden Christensen, cuyo regreso aún no está confirmado).

La escena, que es descrita como «emotiva», aparecería en un arte conceptual para este episodio, donde se refleja a Kylo Ren en su trono y frente a él una ventana que da al espacio, donde se reflejaría la imagen de un rostro a la mitad, con un parte de Anakin y otra de Darth Vader.

Al tratarse de una supuesta imagen de arte conceptual, no está asegurado que vaya a salir en el producto final, ni tampoco que la imagen sea una fantasma de la Fuerza o una mera ilusión o sueño.

La idea de un fantasma de la Fuerza o ilusión de una figura mitad Anakin, mitad Darth Vader, ya apareció reflejada en el arte conceptual de El despertar de la Fuerza, también dirigida y escrita (junto a Lawrence Kasdan) por Abrams.

Anakin/Vader en el arte conceptual de El despertar de la Fuerza

Kylo Ren siempre ha mostrado bastante inclinación hacia la figura de su abuelo, por lo que resulta creíble que éste puede aparecerse ante él de alguna forma (en el séptimo episodio lo vemos hablándole al casco quemado de Vader).

Además, todo ello uniría de forma bastante coherente las tres trilogías, especialmente a las precuelas, bastante vapuleadas por el público. Abrams ya ha indicado anteriormente que su intención es atarlo todo en el último capítulo de «la saga Skywalker».

Lo que parece claro es que Luke sí se aparecerá como fantasma de la Fuerza y/o recuerdo, ya que Mark Hamill sí ha confirmado su regreso. Lo que desconocemos es si será ante su sobrino, Rey, Leia (también de vuelta con metraje rodado y no utilizado de Carrie Fisher), o todos ellos.

Debido a que, como decíamos, ya ha empezado el rodaje del noveno episodio, cada vez irán surgiendo más rumores al respecto, algunos mucho más creíbles que otros. ¿Vosotros esperáis ver a Anakin o a Darth Vader pululando por la próxima película?

Luke, Lando y Leia vuelven para el episodio IX de Star Wars

Disney y Lucasfilm han confirmado que el rodaje de Star Wars: Episodio IX arrancará el 1 de agosto de 2018 en los Estudios Pinewood de Londres. J.J. Abrams, quien escribió el guion junto a Chris Terrio (Argo) regresa para dirigir la última entrega de la saga de Skywalker.

Los miembros del reparto que repiten incluyen a Daisy Ridley (Rey), Adam Driver (Kylo Ren), John Boyega (Finn), Oscar Isaac (Poe Dameron), Lupita Nyong’o (Maz Kanata), Domhnall Gleeson (Hux), Kelly Marie Tran (Rose), Joonas Suotamo (Chewbacca), y Billie Lourd (Connix). Al elenco del Episodio IX se incorporarán Naomi Ackie y Richard E. Grant, a quienes se unirán los veteranos actores de Star Wars Mark Hamill (Luke Skywalker), Anthony Daniels (C3PO) y Billy Dee Williams, que retomará su papel de Lando Calrissian.

El papel de Leia Organa volverá a ser interpretado por Carrie Fisher, utilizando material de archivo inédito de Star Wars: El despertar de la fuerza. «Amamos desesperadamente a Carrie Fisher», ha dicho Abrams, quien ha añadido que «nos resultaba imposible encontrar un final totalmente satisfactorio a la saga de Skywalker sin ella. No íbamos a buscar otra actriz ni utilizar un personaje creado por ordenador. Con el apoyo y la autorización de su hija Billie, hemos encontrado la forma de rendir homenaje a su legado y al papel de Carrie como Leia en el Episodio IX utilizando imágenes inéditas que rodamos juntos para el Episodio VII«.

El compositor John Williams, que ha escrito la música de todos los capítulos de la saga de Star Wars desde Una nueva esperanza en 1977, regresará a una galaxia muy, muy lejana con el Episodio IX. El estreno está programado para diciembre de 2019.

Sobre Luke, Leia y Lando

Definitivamente, de entre todo lo confirmado, nos quedamos con el ataque de nostalgia que supone la vuelta de Billy Dee Williams como Lando, añadiendo la incertidumbre de si el (todavía desconocido) personaje que interpretará Naomi Ackie estará vinculado a él de alguna forma.

Por otro lado, el que Luke regrese confirma su proyección como fantasma de la Fuerza, al igual que ya lo hicieran Obi-Wan o Yoda. La cuestión es, ¿se aparecerá ante Rey para seguir su entrenamiento? ¿A Kylo para atormentarlo y seguir su despedida («hasta luego, muchacho»)? ¿A los dos?

En cuanto a la reutilización de material rodado con Carrie Fisher como Leia, nos parece lo más acertado, aún a sabiendas de que seguramente suponga una breve aparición del personaje y/o una pronta muerte (al menos no fallecerá detrás de las cámaras y que lo anunciasen en los créditos iniciales, como temíamos la mayoría). Es algo arriesgado, teniendo en cuenta que puede salir algo «chapuza» de todo esto, pero tengamos fe en Abrams.

Hablemos de Kylo Ren/Ben Solo (Star Wars)

Star Wars: Los últimos jedi se estrenó el pasado 15 de diciembre y todavía está dando que hablar en redes sociales y medios varios, para bien y para mal. Teniendo en cuenta el lapso de vida de las novedades en Twitter o Facebook, es bastante. Uno de los temas centrales de los debates que la rodean es el personaje de su villano (¿o anti héroe?), tanto en el episodio siete como en el que nos ocupa: Kylo Ren, también conocido como Ben Solo, único hijo de Han y Leia, interpretado por Adam Driver. Avisamos de paso que se avecina un largo análisis con SPOILERS de Los últimos jedi.

Tanto J.J. Abrams (director de El despertar de la Fuerza y el Episodio IX) como Rian Johnson (director de Los últimos jedi) han dejado caer varias declaraciones sobre la ambivalencia del personaje de Kylo y CÓMO NO es Darth Vader, a pesar de que al ver su diseño es lo primero que nos trae a la mente. Así, Abrams comentó que tanto a él como a Kathleen Kennedy (presidenta de Lucasfilm) se les ocurrió Driver tras unas pocas pruebas de casting a algunos actores debido a su versatilidad, hasta el punto de que fue el primer miembro del reparto en ser anunciado al público. Johnson, por su parte, ha declarado, entre otros, que Kylo y Rey «son las dos partes de un protagonista».

De este modo, diseños aparte, Kylo Ren poco y nada tiene que ver con el prototipo de villano que era Vader, más allá de ser su nieto, que tenga una cierta admiración por él y, de hecho por eso, copiarlo en la apariencia y vestimenta.

Con quien sí guarda mayor similitud es con Anakin, tanto en el aspecto debajo de la máscara (cicatriz ahora incluida), como en la actitud de un muchacho muy poderoso que no sabe muy bien qué hacer con el papel que le ha tocado jugar, derivando en una enorme inestabilidad emocional. Porque, si algo tiene Ben en común con su abuelo, es que ambos son tremendamente emocionales, hasta el punto de traspasar los límites de la cordura y de inestabilizarse con cierta facilidad.

Si hacemos caso a las palabras de otros personajes a lo largo de las últimas dos cintas, Ben también guarda cierta similitud con Han (Snoke le dice que tiene el corazón de su padre), lo que no debería pasar desapercibido entre tanto trato negativo en Ben, incluyendo entre los miembros de su propia familia. De lo poco que hemos visto a Han y su hijo juntos, la relación entre ellos debía ser algo distante. El dueño del Halcón Milenario no sabe muy bien qué hacer con el niño poco después de nacer debido a su conexión con la Fuerza y años más tarde se dedica a enseñar a otros jóvenes pilotos más que otra cosa, según Bloodline, además de lo comentado por el propio Kylo a Rey. Sin embargo, y a pesar de la dramática deriva de los acontecimientos, Ben no odia a su padre, como también le dice a la muchacha. Si acaso, su muerte lo ha sumido aún más en la confusión emocional en la que estaba sumido.

Una víctima de abuso y un pésimo líder

Llegados a este punto, ¿qué sabemos realmente del pasado de Kylo Ren? Pues más bien poco. único hijo de Han y Leia, poderoso en la Fuerza desde el momento en que nació, según Abrams, Kylo es tan fuerte en el lado luminoso como en el lado oscuro, lo que rápidamente atrajo la atención de Snoke. Se ve que este ser lo acechó desde temprana edad, aunque no sabemos exactamente cuándo (¿infancia? ¿adolescencia?). Sea como sea, sus padres, bastante metidos de lleno en sus respectivas carreras (Han como piloto, como ya decíamos, y Leia como política de la nueva república), se dieron cuenta en algún momento de que estaban perdiendo a su hijo y decidieron mandarlo con Luke, quien había fundado una academia jedi con una docena de estudiantes,

Luke y Ben entrenaron juntos por algún tiempo, pero llegó un punto en que el primero tuvo una visión del segundo, donde Snoke ya había llegado a lo más profundo de su corazón, y por puro instinto durante un momento fue a matarlo mientras dormía. Evidentemente, Luke enseguida cayó en la cuenta de la atrocidad que estaba a punto de cometer y se detuvo, pero ya era tarde: su sobrino había despertado y lo había visto. Ben evidentemente se defendió y derribó a Luke, se llevó a algunos de sus estudiante (¿los caballeros Ren?) y al resto los mató, incendiando de paso su academia.

Ben Solo no era siempre un conflictivo muchacho que daba problemas. Extracto de la guía visual de Los últimos jedi, por Pablo Hidalgo

Es increíblemente significativo que en dicho momento Ben no acudiera a sus padres… sino a Snoke, lo que nos habla de que efectivamente el villano ya tenía una poderosa influencia sobre él. Sin embargo, si nos fijamos en la actitud de Snoke hacia Kylo tanto en el séptimo episodio como en el octavo (más en los pocos minutos que trata a Rey), nos damos cuenta de que el primero es tremendamente abusivo con el segundo, recurriendo a humillaciones psicológicas («el increíble Kylo Ren» con tono de sorna al burlarse que ha sido derrotado por una inexperta), emocionales (prácticamente lo obliga a matar a Han) y físicas (el rayo, la tortura a Rey).

Si sumamos esto último a la sensación de soledad y abandono que ha debido sentir Ben por los poderes con los que ha nacido, la temprana edad a la que Snoke debió empezar a contactarlo y el bagaje emocional que de por sí lleva en los genes, nos parece que demasiado bien está Kylo Ren después de todo.

¿Dónde está el mayor drama, entonces? En que, una vez liberado de Snoke, y de hecho habiéndolo asesinado él (pudo matar a Han, pero no a Rey), Kylo Ren ya debería estar libre para poder tomar mejores decisiones… solo que no lo está. Si nos fijamos, tras el asesinato del líder de la Primera Orden y de su guardia pretoriana, lo primero que hace Kylo es quedarse mirando fijamente el cadáver de Snoke. Claramente está en shock. Es probable que tenga estrés postraumático en ese mismo momento y en los años próximos.

Arte conceptual de Los últimos jedi, extraído de The Art of StarWars: The Last Jedi

Sin embargo, Rey, por quien acaba de dar dicho paso, le dice que salve a la Resistencia. Pero Kylo tampoco guarda aprecio hacia el grupo (los llama ladrones, asesinos y traidores en la cinta anterior), está hasta las narices de todo y quiere mandarlo al carajo. Una reacción, a priori, muy normal en alguien que aún está en shock. Rey choca con él en este punto y ya sabemos todos cómo sigue la cosa.

La rabieta posterior de Kylo Ren es bastante criticada, y no falta razón, pero tengamos en cuenta que la película está contada desde la perspectiva de «los héroes», y él está en el bando de «los villanos». Si fuera al contrario, sinceramente, tampoco le faltarían motivos al muchacho para estar cabreado, más teniendo en cuenta lo fácil que es que salte. La aparición de Luke empeora aún más las cosas, pues Kylo odia a su tío: es el principal culpable de su actual situación, con la cual no parece que esté radiante de felicidad. Tanto es así, que ni se da cuenta de que lo que está frente a él ni tan siquiera es REAL, ya que Luke no deja marcas de pisadas en la sal que cubre Crait (solo por poner un ejemplo).

Toda esta secuencia también sirve para mostrarnos otra cara de Kylo: la de un pésimo líder. No sabe dar órdenes (Hux se le intenta imponer a la mínima y en cualquier momento me huelo un Frank Underwood con él) y se guía puramente por sus emociones, no por la estrategia ni por la ideología de la Primera Orden, la cual creo que se la trae más bien al pairo (cuando se le propone a Rey, entre otras cosas le dice que acaben juntos con la organización). Todo ello concluye en un gran fracaso para «los malos» y con los escasos miembros de la Resistencia huyendo con vida, lo que no es poco.

Por lo tanto, en lo personal veo poco probable que haya un gran salto temporal entre Los últimos jedi y el noveno episodio, entre otras cosas porque no veo a Kylo Ren gobernando la Primera Orden durante mucho tiempo sin graves consecuencias, comenzando para él mismo. Hux sigue rondándole y la última mirada que le dirige antes de finalizar la película no es precisamente de aprecio. Puede que el general no sea poderoso en la Fuerza, pero dentro de la Primera Orden tiene más contactos que Ren seguro (a quien se ha mostrado que temen, pero no respetan), por lo que es fácilmente imaginable la organización de una especie de golpe de Estado.

No es tampoco poco significativo que la última escena protagonizada por Kylo Ren en Los últimos jedi lo muestre arrodillado ante Rey, agarrando los dados de la suerte que pertenecieran a su padre, con gesto triste y actitud arrepentida, mientras un rayo de luz lo ilumina en medio de la oscuridad.

Esto ya lo hemos visto en otra parte…

La historia de lo que llevamos hasta ahora de Ben Solo y Kylo Ren no es única en el mundo del entretenimiento. De hecho, los seguidores de anime, manga y videojuegos procedentes de Japón tienen ejemplos varios. Cáspita, hasta Elza de Frozen podría servir de referencia en ciertos puntos. A partir de aquí, habrá SPOILERS de Naruto y de Code Geass.

El más llamativo es probablemente el de Sasuke Uchiha (Naruto), protagonista primero y villano después, empezando la serie como compañero, rival y amigo de Naruto para después volverse su enemigo, movido primero por las ansias de venganza personal y por, adivinad, estrés postraumático posterior, hasta el punto de querer acabar con todo el orden ninja establecido, el cual percibe como corrupto, aunque para ello tenga que matar a Naruto, a Kakashi, a Sakura o a quien haga falta.

Por suerte, Naruto nunca pierde del todo la esperanza en él (aunque hay momentos que casi), y en un enfrentamiento final donde ambos pierden sus brazos, Sasuke «ve la luz» y vuelve al lado luminoso (valga la redundancia). Tras unos años de exilio, y sin llegar a recuperar nunca su brazo, Sasuke acaba viviendo en Konoha con Sakura y ambos tienen una hija, Sarada, restaurando asimismo el clan Uchiha (del cual solo quedaba él).

La otra gran similitud percibida es con Lelouch Lamperouge, protagonista de Code Geass, aparentemente un estudiante normal que un día y de forma fortuita se ve ¿bendecido? ¿maldecido? con el poder del geass, el cual causa que todo aquel que lo mire directamente a los ojos siga sus órdenes. Lelouch decide usar este poder principalmente como medida de venganza personal, adoptando un alter ego enmascarado (vaya) conocido como Zero, con el cual también se erige como una figura justiciera frente al opresor imperio de Britannia. Sin embargo, Lelouch se va obsesionando con su venganza hasta el punto de derribar a todo aquel que ose interponerse, aunque sean sus amigos, parientes o similar.

Llegado el momento, Lelouch llega hasta sus padres, el emperador de Britannia, objeto principal de su venganza, a quien asesina. ¿Qué hace entonces el chico? Se auto erige como máximo dirigente y se vislumbra como la nueva principal figura opresora. Al final, Lelouch acuerda con su amigo Suzaku su asesinato ante el público y, en teoría, muere (aunque algunos teorizan que es una farsa para escapar con C.C. a la vez que le deja un mundo mejor a Nunally, que era su deseo). Sea como sea, parece que Lelouch volverá para una tercera temporada.

Podríamos hablar de otras representaciones de estos personajes más antihéroes (o héroes byronianos) y de sus contrapartes heroicas sin artificios, como Riku y Sora en Kingdom Hearts, Seifer y Squall en Final Fantasy VIII, Delita y Ramza en Final Fantasy Tactics, etc. En definitiva, parece ser un concepto que encanta a los asiáticos.

Lo que en mi opinión queda claro es que Kylo Ren se redimirá de alguna forma (¿dónde estaría la gracia de la trilogía entonces?), pero si en el camino sobrevivirá o si llegará totalmente íntegro ya es otro cantar… La narrativa está poniendo bastante énfasis en que el objetivo es obtener el verdadero equilibrio en la Fuerza, no que prevalezca un lado sobre el otro, que es en donde fracasaron las anteriores trilogías, con la oscuridad prevaleciendo en las precuelas y la luz en la original (como bien dirían en Kingdom Hearts, a más luz haya, mayor será la oscuridad). Ben Solo debe hallar ese equilibrio en él mismo, pero también entre él y Rey.

Podríamos hablar extensamente también de la interesante relación entre Kylo Ren y Rey, de qué papel puede jugar en el destino de la galaxia como último Skywalker (¡y Solo!), de cómo su historia parece ser la misma que la de Anakin pero a la inversa («terminaré lo que tú empezaste»), y más cosas, pero eso nos llevaría a escribir nuestra propia trilogía. Lo que sacamos en claro es que Kylo Ren/Ben Solo es, para nosotros, el personaje más interesante de esta nueva saga. Esperamos que sepan darle una conclusión satisfactoria.