Fire Emblem: Three Houses y Code Geass, entre lo mejor de 2019

El año 2019 ha terminado hace casi una semana y nosotros aún no hemos realizado nuestro habitual listado de lo mejor en ocio de fantasía y ciencia ficción que inicialmente prometía más que lo que ha terminado siendo (lo que no quita para que hayan surgido eventuales joyas… inesperadas la mayoría, eso sí). Avisamos de que el listado es puramente personal y en base a lo que ha experimentado el personal.

Cine

Ha sido un año cinematográficamente hablando regulero; si bien la culpa ha sido probablemente de lo altas que teníamos las expectativas ante títulos como Star Wars: El ascenso de Skywalker (que ha estado bien, pero no ha llegado al nivel ansiado para el cierre, bastante tramposo y atropellado, de una trilogía y de toda una saga) o el remake de El rey león.

Eso sí, se han estrenado películas de la talla de Joker (Joaquin Phoenix ha ganado el Globo de Oro por su actuación) o de Vengadores: Endgame, otro cierre, pero esta vez algo más redondo que el galáctico.

Sin embargo, si tenemos que quedarnos con una cinta de superhéroes que ha logrado encandilarnos (de forma totalmente inesperada, a pesar de que Múltiple nos gustó) fue Glass, una deconstrucción bastante original (y con un elenco de lujo) del género.

Lee crítica sin spoilers de Glass

Series

Estaba siendo un año bastante normalito respecto a las series de fantasía o ciencia ficción, con una tercera temporada de Stranger Things que vuelve a acercarse al nivel de la primera como único elemento a destacar… hasta que llegó Cristal oscuro: La era de la resistencia.

El nuevo título, que bajo el sello de Netflix sirve como precuela de la obra de culto dirigida por Jim Henson, recupera lo mejor de aquélla y lo multiplica por diez. Un titánico trabajo que se nota ha sido realizado con mucho esfuerzo (los diez capítulos que dura han sido dirigidos por Louis Leterrier) y mimo. Previsiblemente anunciarán una segunda temporada, la cual probablemente tarde en llegarnos un tiempo.

Le siguen de cerca The Mandalorian, la primera serie en acción real de Star Wars que sigue los pasos de un cazarrecompensas mandaloriano (de ahí el título), muy al estilo western y cine clásico japonés (más El lobo solitario y su cachorro); y finalmente The Witcher, una correcta (aunque el inicio sea algo soporífero) primera temporada que adapta los libros escritos por Andrzej Sapkowski.

Leer crítica sin spoilers de Cristal oscuro: La era de la resistencia

Anime

Ha sido, en cambio, un buen año de anime, con numerosos títulos a destacar como la nueva adaptación de Fruits Basket, Kimetsu no Yaiba, Yakusoku no Neverland o Beastars.

Sin embargo, por habernos emocionado quizás algo más, debemos quedarnos por encima de éstas con la nueva adaptación de Dororo, uno de los clásicos de Osamu Tezuka que, aunque con severos altibajos en la animación cuenta con una narrativa muy «a la japonesa» deliciosa; El tiempo contigo, la última película dirigida por Makoto Shinkai y que sigue en su alto nivel de calidad; y Carole & Tuesday, lo nuevo de Shinichiro Watanabe que nos expresa la importancia de la música en un hipotético mundo futurista (que a pesar de todo nos resultará muy familiar).

Destacamos asimismo la película Code Geass: Fukkatsu no Lelouch, por suponer el retorno, tras más de una década, de uno de los animes con cierto margen de culto, con un final inigualable… ¡y que lo han hecho bien! Algo que sin duda no tenían fácil.

Leer crítica sin spoilers de Code Geass: Fukkatsu no Lelouch

Videojuegos

En el panorama de los videojuegos 2019 se veía también muy prometedor. Lo cierto es que han habido algunas decepciones, pero también sorpresas muy agradables. Kingdom Hearts 3 era en este sentido uno de los títulos más esperados y que, si bien se trata de un juego con virtudes nada desdeñables, se siente algo apresurado y que deja un sabor de boca un poco amargo para tamaña conclusión (Re:Mind está a la vuelta de la esquina y promete jugosas novedades).

A pesar de haber sido además año de nuevos Pokémon (Espada y Escudo), en lo personal hemos optado por quedarnos con la gratificante experiencia que nos supuso Sekiro (a pesar de su cacareada dificultad), Days Gone (algo maltratado por los críticos) y Star Wars Jedi: Fallen Order, quizás uno de los mejores videojuegos de la franquicia en años. Y…

La crème de la créme

Fire Emblen: Three Houses. Un videojuego al que llevamos echadas decenas de horas (¡y lo que nos queda!). Pura diversión (y sufrimiento) en el último título de Intelligent Systems y Koei Tecmo para Nintendo Switch que mezcla juego de rol estratégico, una escuela muy a lo Hogwarts de Harry Potter y una trama política que parece sacada de la pluma de George R. R. Martin. Sin duda, Edelgard, Dimitri, Claude, Rhea y demás alumnos y miembros de Garreg Mach han venido para quedarse largo tiempo con nosotros.

Lee crítica sin spoilers de Fire Emblem: Three Houses

Han Solo o el arte de fusionar western y ciencia-ficción

Todavía quedan dos meses para el estreno de Han Solo: Una historia de Star Wars, pero ya vamos siendo testigos de que, poco a poco, la cinta de la franquicia que a priori parecía más inútil (¿el pasado de Han Solo sin Harrison Ford? ¿Para qué?), empieza poco a poco a convencer a los más escépticos. Y me incluyo.

Como decíamos, una película sobre el pasado de Solo, con un Ford que evidentemente no iba a poder interpretarlo, cuando es un personaje que de por sí conocemos a una edad joven (30 años) y teniendo ya el Universo Expandido (rebautizado como Legends con la llegada de Disney), parecía algo absurdo. Sin embargo, ahora que Lucasfilm ha empezado a ponerse en serio con la promoción, y a medida que se van revelando más detalles, nos está resultando al menos un producto quizás hasta interesante. ¿Por qué?

Principalmente, el enfoque que, tras un desarrollo algo complicado, parecen haberle dado a la cinta, virando más hacia la aventura dramática que a la comedia que no se toma en serio a sí misma (aunque las palabras de Donald Glover, quien lo interpreta a Lando en Solo, respecto a que será la película más divertida nos hace mantenernos cautos) que al parecer pretendían Chris Miller y Phil Lord, los anteriores directores. Los grandes culpables de ello son Lawrence y Jon Kasdan, el primero guionista a su vez de la trilogía original, El despertar de la Fuerza e Indiana Jones, lo que nos puede indicar por dónde van a ir los tiros. Según se ha revelado recientemente, el propio Kasdan llevaba tiempo detrás de una película en solitario de Han Solo, algo que llegó a tratar con George Lucas. Teniendo en cuenta que no es un novato y el (en mi opinión también) cansino humor al que nos tiene acostumbrados Disney-Marvel, un cambio hacia el lado dramático aventurero (no, no pretendemos que sea Ciudadano Kane) sería más que bienvenido.

Pero es más, el tono de la cinta que vamos percibiendo a través de tráilers, entrevistas y fotos nos deja caer asimismo una mezcla entre la ciencia-ficción (característica de Star Wars), el western y el cine negro.

De la parte vinculada a la ciencia-ficción no hace falta hablar, mientras que la del western se observa muy claramente en una escena del tráiler donde parece que habrá un duelo entre Han (interpretado aquí por Alden Ehrenreich) y un grupo enmascarado al más puro estilo indios/Caballeros Ren (con el personaje interpretado por Paul Bettany al mando); a que parte de la trama girará en torno a uno o varios grupos de forajidos (uno de ellos liderado por Woody Harrelson, en donde ingresarán Han y Chewie); y al asalto a un tren como parte de la trama,  además de que los carteles promocionales lanzados hasta la fecha se asemejan a los clásicos carteles de «Wanted». El hecho de que Han y Chewbacca no dejen de ser el prototipo de personajes marginados, fuera de la ley y del sistema, y que sean duchos con las armas de fuego tornaban propicio este acercamiento.

Sin ir más lejos, la Cantina de Mos Easley, lugar donde los encontramos por primera vez en Una nueva esperanza, fácilmente puede traernos a la mente la clásica taberna del lejano Oeste con toques de… cine negro.

La parte de «cine noir» es la que menos se percibe hasta la fecha, no por ello inexistente. De hecho, parece que la mayor representante (hasta ahora, al menos) al respecto será el personaje interpretado por Emilia Clarke, Qi’ra. Descrita como amiga de la infancia (y algo más) de Han, ambos han crecido solos en esa especie de Gotham espacial que debe de ser Corellia. Por lo tanto, ambos son supervivientes, algo que según la actriz Qi’ra muestra mediante un exterior duro y hasta impenetrable. La clásica «femme fatale», vaya. Teniendo en cuenta que no volvemos a ver nada de Qi’ra ni en la trilogía original ni en la actual que se está desarrollando (donde Han ya está muerto), nos da la sensación de que esta muchacha, importante para el personaje de Solo, probablemente morirá o bien traicionará a su amigo. Quizás ambas.

Existen varios exponentes que mezclan (con más o menos éxito) la ciencia-ficción, el western y el cine negro, pero si hay uno que se nos hace como la que mejor ha sabido llevar dichos ingredientes, sin duda esa ha sido Cowboy Bebop. Hasta ahora, no se sabe nada de si ha servido o no de inspiración a los Kasdan (que sí han mencionado a Sin Perdón o Heat, por poner unos ejemplos), pero no sería de extrañar si así fuera. No solo el propio Han en la figura del protagonista, Spike Spiegel, un cazarrecompensas nihilista y algo rudo, sino de nuevo la propia Qi’ra en una especie de mezcla entre Faye (en uno de los carteles incluso puede percibirse la pose y los tonos morados en el pelo) y Julia (el pasado tortuoso de Spike, la misteriosa figura femenina que golpea ocasionalmente los pensamientos del protagonista). Incluso el breve lapso que tenemos actualmente del personaje interpretado por Thandie Newton nos trae irremediablemente a la mente a Coffee, del capítulo Mushroom Samba.

No pretendemos decir que Han Solo: Una historia de Star Wars se asemejará a Cowboy Bebop, ni mucho menos, primero porque el producto de Shinichiro Watanabe es algo difícil de igualar, ya que es considerada una obra maestra; y segundo porque aún sabemos más bien poco de la próxima cinta de la franquicia de Lucasfilm. Eso sí, nos parece que la eventual fusión entre ciencia-ficción, western y cine negro puede llegar a dar unos gratos resultados y, en lo personal, será más que bienvenida. Por lo demás, solo queda esperar al 25 de mayo.

Orígenes del fandom de la ciencia ficción: los futurianos

Hubo un tiempo en el que el mundo del fandom difería considerablemente de lo que conocemos ahora. En sus orígenes estos grupos de aficionados estaban compuestos por escritores, editores, intelectuales y auténticos especímenes contraculturales.

En la década de 1930 puede decirse que fue el origen del fandom tal y como lo podemos conocer ahora: grupos de aficionados contactaban y compartían sus aficiones, especialmente  por la ciencia ficción, que estaba en pleno auge y viviendo su época dorada.

Si hemos de destacar uno de estos grupos, sin lugar a dudas  es el de ¨Los futurianos¨, con origen en Nueva York y liderados por el que luego ha sido uno de los escritores más importantes de la ciencia ficción: Frederik Pohl (Pórtico, Mercaderes del Espacio).

Desde este grupo se generaron una de las generaciones de escritores más importantes del género, y por supuesto la mitad de las revistas fantásticas de la época estaban editadas por futurianos.

Wollheim_Pohl_&_Michel_c._1938

Pohl, Wollheim y Michel (1938)

Los cuatro miembros fundadores fueron el propio Pohl, John Michel, Robert A.W Lowndes y Donald A. Wollheim, pero también destacaron otros miembros como Damon Knigth, James Blish, y por supuesto la aparición de las primeras escritoras de este género, como la increíble y fantástica Judith Merril (quien a su vez tuvo un hijo con Frederick Pohl, por cierto).

Los futurianos fueron el ala subversiva de la ciencia ficción, en su mayoría militantes de   izquierdas, algo que no gustaba en los otros aficionados y que provocó su propio rechazo, llegándoles a prohibir la entrada en la primera Worldcom. Todo esto provocó que los futurianos organizasen una contra-convención de fandoms.

Los futurianos influyeron notablemente en este género y plantearon nuevas ideas y enfoques, contribuyeron a aportar ideas más reflexivas y sociales. Estas características pueden percibirse, por ejemplo, en la obra Mercaderes del espacio, una de las novelas distópicas que mejor han interpretado la evolución del capitalismo.

Uno de los sucesos más interesantes de estos locos, fue la fundación de «la casa futuriana». En 1939 Pohl y su mujer, la futuriana Leslie Perri (es importante reflejar el protagonismo que tuvo la mujer en este grupo, considerando la época), alquilaron una casa en Brooklyn, donde invitaron a otros futurianos a vivir en ella. Al tiempo acabaron expulsados por las quejas de los vecinos, pero esto no quedó así, hubo otras casas futurianas como el apartamento en Benford Avenue que fue bautizado ¨La Torre de Marfil¨.

Estas casas se convirtieron en lugares legendarios, donde los futurianos escribían continuamente, se editaban revistas y fanzines y por supuesto reinaba un ambiente ¨bohemio¨ y distendido, donde también se acogían a otros aficionados venidos de afuera, ¿Os imagináis un lugar así ahora? Cabe también resaltar las visitas constantes de Isaac Asimov, que al final también se considero como otro futuriano más.

Estos «hippies tecnológicos» ( así los llamaba Bruce Sterling) siempre estaban en activo, imaginaros esta casa llena de pequeñas imprentas, papeles tirados y gente de lo más excéntrica dentro, escribiendo sin parar, pero no todo fue diversión. Sus ideologías socialistas ( con la excepción de James Blish, que coqueteó un tiempo con el fascismo) no fueron bien aceptadas por la sociedad americana de la época, y muchos de sus miembros, que pertenecían al partido comunista, fueron vigilados por el servicio secreto. Los agentes muchas veces entraban en la casa buscando espías soviéticos, encontrando solo historias futuristas sobre robots y alienígenas.

Wollheim, Rothman, Pohl y Michel

Wollheim, Rothman, Pohl y Michel

En los años 40 la última casa futuriana se cerró, y el grupo acabo diluyéndose.

Con este artículo quiero hacer reflexionar a las nuevas generaciones de amantes del género de ciencia ficción o fantástico.Quizás es bueno recordar los orígenes para poder encauzar nuestro futuro y pensar que siempre podemos ser algo más que consumidores de productos. Podemos interactuar más entre nosotros, debatir, organizarnos y sobre todo ser creativos y participar de una forma más activa. Si tienes inquietudes no dudes en crear un blog o un fanzine, o ponte a escribir y compartir, organiza reuniones y por supuesto busca tu propio hogar futuriano.

futurianos

Esos clásicos inolvidables: Cowboy Bebop. Parte I

Retomamos el blog pensando en los clásicos, esas obras (ya sean de anime, cine, videojuegos, literatura) que se han convertido, con el paso de los años, en culto, en representantes del máximo esplendor de una creación.

¿Qué pasa si sumamos jazz/soul/blues + western + ciencia-ficción + BUEN GUSTO? De ahí sale Cowboy Bebop, un anime de 26 episodios (más película, más sucedáneos varios como manga y videojuegos), producido por Sunrise, que lleva calando hondo desde 1998, y que aún a día de hoy, dieciocho años después, sigue generando interesantes y profundos debates.

Y es que Cowboy Bebop es una obra (maestra) que puede gustar tanto a aquellos que aman el anime y el manga como a los que no han visto ni un solo minuto seguido de Dragon Ball. Ahí reside una de sus grandes virtudes. Es una obra cuidada al máximo detalle tanto en guión (narrativa), como en animación, personajes o banda sonora. Tengamos en cuenta que se estrenó en 1998 y que aún a día de hoy puede seguir disfrutándose la gran calidad de su animación, y su narrativa trepidante y pausada cuando requiere serlo. En definitiva, que es un anime que puede ser visto (y de qué manera) por todo tipo de público (bueno, infantes no, está más dirigida a un público adulto) y en cualquier década desde su estreno. Y no deja de ganar en encanto.

Pasando a la parte más técnica, Cowboy Bebop surge de la mente de Shinichiro Watanabe, por aquel entonces un desconocido que apenas había dirigido algunos episodios de Macross Plus. El éxito de crítica y de público que alcanzó con Cowboy Bebop fue tal, que al poco tiempo ya estaba dirigiendo su propia película (de Cowboy Bebop también). Desde entonces, no ha parado de darnos joyas del anime (unas más relucientes que otras), pero el grado de excelencia que obtuvo en Cowboy Bebop no ha podido volver a repetirlo (él mismo dice que cada vez que inicia un proyecto piensa «voy a hacerlo tan bueno como Cowboy Bebop», para inmediatamente después darse cuenta de que no tiene ni idea de cómo hizo tan buena a Cowboy Bebop). Algunas de estas obras posteriores incluyen a Samurai Champloo (para una servidora, la segunda mejor), el cortometraje Baby Blue o Sakamichi no Apollon (Kids on the Slope).

Shinichiro-Watanabe

Uno de los elementos comunes en todas estas obras de Watanabe es la música, que pasa a ser uno de los personajes principales. En Samurai Champloo, por ejemplo, el hip hop, rap y r&b juegan su papel, mientras que en Sakamichi no Apollon y en Cowboy Bebop lo hacen el jazz (en la última, el blues y el soul también se suman). De hecho, la mayor parte de episodios de Cowboy Bebop (y su cortometraje Baby Blue) tienen nombres de famosas canciones (Honkey Tonk Woman, Sympathy for the Devil, Wild Horses son algunos ejemplos). Sin embargo, la principal encargada de que la música en Cowboy Bebop sea TAN memorable es Yoko Kanno, quien volvería a trabajar con Watanabe en Sakamichi no Apollon. Kanno despliega toda su maestría y buen hacer en los episodios de esta serie, dejándonos temas para el recuerdo como The Real Folk Blues, Tank! (ending y opening de la serie, respectivamente), Space Lion o Blue, entre muchos otros. Pero no sólo del jazz, blues y soul vive Cowboy Bebop, ya que Kanno hasta se atreve con la bossa nova o el heavy metal.

El diseño de personajes, otro de los enormes alicientes de Cowboy Bebop, recae en Toshihiro Kawamoto (MUY recomendable el art book que sacaron, traducido al inglés, con sus diseños y notas para la serie); mientras que el de las naves lo hace en Kimitoshi Yamane. Ambos son los encargados de (en parte) dotarles de la abrumadora personalidad y vida propia que tienen todos dentro del universo Bebop. Sobre las distintas influencias para cada personaje, lo trataremos más adelante en otro apartado. Los diseños de Kawamoto pueden ser vistos nuevamente en, por ejemplo, Wolf´s Rain (otro anime bastante digno).

https://www.youtube.com/watch?v=Aw3fN3OPk3A

Parte de estos memorables personajes son también las voces. Y aquí vamos a arrojarnos al vacío (y quizás muchos lectores nos miren de manera asesina), pero las de Cowboy Bebop merecen ser escuchadas en inglés. No por nada, según las malas lenguas de la red, el propio Watanabe reconoció que ama el doblaje (norte)americano para esta serie. Sin menospreciar para nada al original japonés, que cuenta con, entre otros, las memorables Megumi Hayashibara y Maaya Sakamoto; e incluso el español tiene aquí un pase (Spike tiene la voz de Woody Allen en español de España y ni se nota, mérito fundamental de Joan Pera): ¿Por qué en inglés, entonces? Bueno, la ambientación tiene algo que ver: Cowbpy Bebop está repleto de guiños y homenajes a la cultura pop, que es proveniente fundamentalmente de Estados Unidos. Por otro lado, la profunda y sugerente voz de Steve Blum para Spike y la ultra sexy voz de Wendee Lee para Faye hacen el resto.

Vamos a ir terminando esta Parte I introduciendo brevemente (hay muuuuucho para escribir de ella, pero mejor lo veremos a través de los personajes) la temática. Cowboy Bebop se sitúa en un futuro no muy lejano (2027), donde la humanidad ha conquistado el espacio, moviéndose libremente por él en naves (la Tierra, mientras tanto, ya se encuentra prácticamente destruida y desolada). El crimen se ha trasladado al espacio también claro, por lo que para contrarrestarlo han surgido las figuras de cowboys, los cazarrecompensas de toda la vida, que persiguen y atrapan a los criminales que tienen puesto precio a su cabeza. Entre estos cowboys, nos encontramos a Jet y Spike, ambos a bordo de la Bebop, una enorme nave-pesquero donde se trasladan, trabajan y viven. Inicialmente un dúo, acabarán siendo un cuarteto (más un perro) por los avatares del destino (y muy a pesar de Spike). Pero todo eso, lo veremos en la Parte II =)

See you, space cowboy

cowboy bebop2