Algo pasa con los salones de manga y anime en Madrid

Corría el año 2002 y un pequeño evento centrado en el mundo del manga y el anime comenzaba a tomar forma en Madrid, concretamente en el Hotel Puerta de Toledo y bajo en nombre «Expomanga». Entradas desde tres euros, gratuitas para los visitantes que acudieran haciendo cosplay, mangas de regalo y poco espacio para un determinado número de asistentes marcaron estas primeras ediciones de una convención que probablemente aspiraba a seguir los pasos del Salón del Manga de Barcelona, la que sigue siendo principal celebración de estas características a nivel nacional.

Pasaron los años, Expomanga se mudó a los pabellones de la Casa de Campo, pero las entradas, aunque subían, seguían manteniéndose en unos asequibles cinco euros, gratuidad para los cosplayers y un evento que, aunque iba creciendo a ojos vista, seguía manteniendo esa sensación de estar dirigido a ciertos nichos más o menos reducidos del mercado. 

Avanzó el tiempo y dichos grupos fueron aumentando, el pabellón de la Casa de Campo se quedó pequeño, máxime con el aumento de la rigurosidad de las normas tras los desgraciados acontecimientos del Madrid Arena, y Expomanga volvió a mudarse al recinto ferial más grande de la capital, Ifema. Evidentemente, esto conllevaba una subida de tarifas en las entradas a casi quince euros en algunos de los casos. Las entradas gratuitas para cosplayers habían desaparecido ya unos eventos antes por su falta de rentabilidad en una convención que se encontraba masificada.

Una de las últimas celebraciones de Expomanga en la Casa de Campo

Sin embrago, Expomanga no fue la primera en moverse a Ifema, el paso lo había dado antes Japan Weekend, una celebración de la cultura pop japonesa (aunque en ocasiones parezca que cada vez menos), más reciente pero que había crecido a una velocidad más vertiginosa, principalmente por su doble sesión anual en Madrid los meses de febrero y septiembre.

Podríamos decir que, si bien Expomanga es la veterana, Japan Weekend es la que se ha instalado más hondo en este tipo de certámenes capitalinos. Ha sabido aprovechar mejor la marea otaku que se multiplicaba rápidamente en Madrid y, a base de una variante de entradas «anti crisis» (en colaboración con Selecta Visión), a base de traer a curiosos invitados provenientes de Corea y Japón, es seguramente a día de hoy la que mayor número de asistentes atrae.

Expomanga, que estaba organizada principalmente por la Asociación Española de Amigos del Cómic, pasó a manos de Conceptum! Spain, y pasó a denominarse Héroes Manga Madrid. Si bien con este cambio pretendían probablemente crear una asociación con la otra gran convención anual de cómics (no solo japoneses), que también organizaban, Héroes Comic Con (antes Expocómic), lo cierto es que en el imaginario colectivo se sigue escuchando habitualmente flotando la palabra»Expomanga».

Japan Weekend en 2016, celebrándose ya en Ifema

Llegamos a la actualidad, Héroes Manga vuelve a anunciar cambio de organizadores y éstos a su vez que este año no habría cita habitual en abril/mayo (como suele ocurrir desde el inicio de estas celebraciones) para poder mejorar las condiciones de cara al 2020. Y aquí ocurre otra sorpresa en un corto lapso de tiempo. Se anuncia la llegada de la primera edición de Mangadrid.

Mangadrid no guarda relación alguna con la organización detrás de Héroes Manga, pero sí con la de Japan Weekend. Pareciera que han querido aprovechar el vacío (aparentemente temporal) dejado por éstos para intentar ocupar este espacio en abril/mayo.

Ha habido varios problemas con esta jugada. Por un lado, la falta de tiempo (es fácil intuir que organizar este tipo de acontecimientos puede llevar fácilmente varios meses) les ha pasado factura en la ausencia de una carta de invitados abultada, aparte de algunas cantantes y cosplayers, todos ellos nacionales. También, claro está, en la escasez de promoción y de una campaña de marketing amplia y que llegase a un mayor número de gente que la que habitúa este tipo de espacios en redes sociales.

Por otro lado, seamos claro, existe una saturación de este tipo de eventos en Madrid. De una única convención anual con Expomanga se pasaron a tener tres, y posteriormente se les unió Madrid Otaku, que pretende volver a los viejos y añorados tiempos de la Casa de Campo con entradas más asequibles y una interesante carta de invitados. En total ya son cuatro celebraciones del mundo del manga y del anime en la capital.

Madrid Otaku 2018

En frente tenemos a Barcelona, cuna del Salón del Manga, que sigue estando ahí, rígido e imparable, a pesar de que Japan Weekend también ha aterrizado en la ciudad condal. Pero aparte de estos dos eventos, no hay más (nos estamos ciñendo al anime y al manga, recordamos). Madrid los duplica.

¿Y qué podemos hallar de distinto de una convención a otra? Pues, aparte de los invitados y quizás algunas actividades, poco más. En todas ellas encontrarás los mismos stands comerciales (y no todos con material oficial), los mismos concursos (de cosplay, de karaoke, de baile…), sala de proyecciones, etc.

Lo que sigue manteniendo a estos salones es el hecho de que la gente va a pasarlo bien en un espacio donde, por unas pocas horas, puede sentir una sensación parecida a la plena libertad, tras pasarse semanas enteras entre personas que probablemente y salvo excepciones no comparten esta afición. Una especie de refugio repleto de actividades y merchandising que hipnotiza, similar a un sueño. Pero unas entradas cada vez más caras y el mayor número de celebraciones hace que la gente se vuelva selectiva.

Desde aquí deseamos realmente que tanto a Mangadrid (que por cierto ha confirmado volverá a estar presente en mayo de 2020, aparte de las Japan Weekend) como al resto de organizaciones les vaya bien y puedan crecer para ofrecernos cada vez más lujos del mundo otaku; no obstante en ocasiones es necesario pararse a pensar y reflexionar sobre qué es lo realmente necesario para este tipo de consumidores y cómo se puede evolucionar, no solo hacia entradas más abultadas de precio, sino hacia la verdadera innovación.